Cocina Tradicional Española
En consecuencia a la sucesión de culturas que han habitado la Península Ibérica, contamos con una inmensa variedad en lo que respecta a: la música, arte, idioma y como no podía ser menos, la gastronomía.
La situación geográfica de España, ha hecho que determinados productos sean principales en nuestras comidas, por la gran variedad que se nos ofrece. Uno de estos casos es el pescado, al ser una península y por lo tanto estar rodeado casi completamente por agua, este alimento, se ha podido consumir mediante la pesca desde tiempos muy lejanos. Gracias a la gran extensión de valles y caudalosos ríos que filtran el agua con el objetivo de sustentar el regadío, podemos contar con multiplicidad de verduras y fruta fresca en cada temporada. O los reconocidos jamones españoles, que se curan en las montañas de la Península. Desde el asentamiento de colonizaciones fenicias, griegas o cartagineses hasta nuestros tiempos, la gastronomía española ha evolucionado constantemente con el paso de los siglos.
Los fenicios y griegos, difundieron el cultivo de la vid, trigo y cebada y por lo tanto se comenzó a producir vinos, pan y cerveza ( que por esos entonces era una especie de zumo de cebada) ya que vieron la necesidad de dar salida a los excedentes de grano que de no ser consumidos, se estropearían.. Los romanos, siguieron sus pasos .Hasta el s.II a.C, la cocina romana se basaba en alimentos básicos: guisantes, queso de leche de oveja, carne de cordero, col, frutas. Pero, a principios del siglo II a.C , los romanos entraron en Asia Menor y descubrieron el refinamiento de las cortes griegas de Oriente. A partir de ese momento, la preparación de las comidas se empezó a hacer larga y costosa. Los servicios de los cocineros, trabajo desempeñado por esclavos, se comenzó a pagar mucho más.
Según pasaban los años, el hombre fue descubriendo nuevos alimentos, formas de conservación y maneras de consumirlo. La alimentación pasó de ser una necesidad diaria a una emoción de paladares, puesto que los romanos realizaban festines y banquetes en honor a la comida. Buscaban nuevos animales, mezclas poco usuales y bebidas para despertar sus intereses de primeros gourmets. Aunque sin duda, fueron los árabes, los que empezaron a dejar un impacto gastronómico más importante en España .Introdujeron condimentos ligeros aplicados a diferentes platos, al igual que empezaron a combinar frutas o frutos secos en los platos de pescados o carnes, creando otros sabores a las comidas.
El azafrán; cítricos como las naranjas, limones o pomelos, hortalizas como las berenjenas, alcachofas o el arroz; sandías; melones; pistachos y dátiles son algunas de las muchas aportaciones gastronómicas que nos dejaron hasta nuestros días. Años después, con la formación de reinos cristianos, se empezó a elaborar platos con cerdo, ya que tanto para judíos como musulmanes este alimento estaba prohibido. Los cristianos, hicieron completa utilización del animal, no se desprendían de ningún resto, las partes del cerdo que a los ricos no gustaban, a los pobres alimentaban. A esto, hay que sumarle, algunas de las costumbres gastronómicas que conservamos hasta nuestros días, por ejemplo, preparaban platos especiales para la Cuaresma (sin ninguna otra carne animal que no fuese la de pescado) o la invención de las torrijas.
Año 1492, fue un año que cambió la península en muchos sentidos, no solo fue el triunfo de la Reconquista, sino respecto a la gastronomía del país, que dio un giro enorme tras descubrir el nuevo continente: América y por lo tanto, sumarse a nuestras comidas, una gran variedad de productos, especias y nuevas formas de elaborar platos. Poco a poco, se fueron integrando a nuestra dieta española productos como la patata, tomates, vainilla, pimentón, avena, legumbres o el chocolate. Muchos de ellos, productos indispensables en nuestros platos como pueden ser la tortilla de patata, lentejas con chorizo, gazpacho, fabada asturiana o el típico chocolate con churros.
Los platos más representativos de la cocina española
Muchos conocen la gastronomía española por sus platos más famosos como la paella, la tortilla, los callos y las diversas tapas. Pero existen muchísimas otras exquisiteces dentro de la comida española que valen la pena probar, y son bastantes más de lo que podrías imaginar. Yo, que me he dedicado a saborear toda la mayor cantidad posible de delicias que ofrece la gastronomía de España, me quedo impresionado con la variedad no sólo de recetas, también de ingredientes.
Y es que si hay algo que tiene la comida de este país es que, si sustituyes un sólo ingrediente, por otro igual, pero de otra región, ya todo cambia, desde el nombre, hasta el sabor. A continuación te presento una lista, bastante subjetiva porque la objetividad no existe, de los 100 platos de la cocina española que deberías probar antes de irte al más allá.
1- HUEVOS ROTOS CON CHORIZO
Uno de mis platos españoles favoritos de toda la vida. Una bomba de calorías llena de felicidad y sabor. huevos rotos
Receta Ingredientes:
Ingredientes de los huevos rotos con chorizo para 4 personas:
1 kg de patatas.
1 cebolla.
2 chorizos.
4 huevos grandes.
Sal y pimienta al gusto.
Aceite de oliva.
Preparación de los huevos rotos con chorizo:
– Pon a calentar a fuego medio una sartén grande donde quepan las patatas sin amontonarse mucho con dos dedos de aceite de oliva.
– Corta la cebolla en trocitos pequeños.– Añade la cebolla a la sartén y póchala, es decir, cocínala a fuego lento hasta que esté tierna y transparente, este proceso te llevará entre 10 y 15 minutos.– Limpia las patatas, pélalas, pártelas en rodajas de no más de medio centímetro de grosor y salpimiéntalas.
– Cuando la cebolla esté transparente, incorpora las patatas y fríe todo junto a fuego bajo hasta que las patatas estén blandas. Al final sube el fuego para que se tuesten ligeramente por fuera.– En el momento en que las patatas estén listas, escurre el aceite y resérvalas.
– Parte el chorizo en rodajas y fríelo en otra sartén con un poquito de aceite. Para hacer el chorizo hace falta muy poco aceite ya que el propio chorizo suelta su grasa– Una vez listo, escurre el aceite del chorizo y pon las rodajas en un plato junto con las patatas.– Pon a calentar abundante aceite de oliva en otra sartén y, cuando el aceite esté caliente, fríe los huevos. Es importante hacerlo a fuego vivo para que queden con puntilla.
– Sirve las patatas y el chorizo en un plato o fuente y sobre ellas coloca los huevos fritos.– Y ya puedes disfrutar de este delicioso aperitivo de huevos rotos con chorizo.
2- CACHOPO
Tradicional receta asturiana hecha con 2 filetes de ternera empanados que tienen en el medio queso y jamón serrano. Se acompaña de patatas fritas y normalmente con 1 plato comen 2 personas. cachopo con patatas fritas.
La receta de cachopo asturiano de ternera es uno de los platos más emblemáticos de su cocina. Se trata de dos filetes de ternera rellenos de jamón y queso que se empanan y se fríen ¿lo habéis probado alguna vez…? El cachopo asturiano suele ser de gran tamaño, para compartir, aunque también podéis preparar la misma versión en tamaño más pequeño, un «cachopín», utilizando filetes de ternera más pequeños.
Receta Ingredientes:
Cachopo Asturiano
Ingredientes
2 filetes finos de ternera
Queso en lonchas
4 lonchas de Jamón Serrano
2 huevos batidos
Pan rallado
Aceite de oliva virgen o virgen extra
Paso 1: Preparamos la carne para el cachopo
Cogemos los filetes de ternera y los espalmamos un poco (con un mazo especial para romper las fibras de la carne y que ésta resulte más fina). Si los filetes son pequeños, podéis pedir al carnicero que los corte más gruesos, y luego los abra como un librito, como para hacer un San Jacobo. Extendemos bien uno de ellos sobre nuestra tabla.
Paso 2: Cómo rellenar un cachopo
Ponemos por encima unas lonchas de jamón serrano ocupando toda la superficie; en este caso hemos necesitado 4 lonchas. Cubrimos el jamón serrano con queso, podéis poner el que más os guste. Tapamos con el otro filete. No le hemos puesto sal por el jamón.
Paso 3: Rebozado del cachopo de ternera
Pasamos por pan rallado; si notáis que vuestros filetes son muy grandes y se os desmonta al manipularlo, podéis ponerle palillos en los laterales. Después lo pasáis por huevo batido y de nuevo por pan rallado.
Paso 4: Cómo freír el cachopo asturiano
Para freírlo nosotros lo hemos hecho en una cazuela baja de gran tamaño, podéis usar incluso una paellera. El aceite no debe estar muy caliente, ponemos el fuego a temperatura media. De este modo no se quedarán muy dorados por fuera y crudos por dentro. Ya sólo nos queda servirlo, ¡recordad quitar los palillos!, y disfrutar de este delicioso y tradicional cachopo asturiano.
3- CHIPIRONES EN SU TINTA
Conocidos también como Calamares en su tinta. Una delicia que se puede acompañar con arroz blanco para que se impregne de la salsa. Magia en el paladar. calamares en su tinta. Los chipirones en su tinta es que es un plato, a parte de delicioso, muy poco calórico ya que para que os deis cuenta solo tienen 82 calorías por cada 100 gramos. Si en esta receta evitáis la harina o maicena y acompañáis de arroz integral tendréis un plato perfecto para incluirlo en la dieta. Los chipirones o calamares son un ingredientes muy versátil. Lo podemos preparar como en esta receta, en su tinta, o en salsa americana o como no, chipirones rellenos.
Receta Ingredientes
INGREDIENTES PARA HACER CHIPIRONES EN SU TINTA
1 kg de chipirones limpios
2 cebollas
1 pimiento verde
1 ajo
2 bolsas de tinta de calamar
Sal
1 hoja de laurel
1 cucharada de maicena
1 copa de vino blanco
Aceite de oliva
Arroz blanco como guarnición
CÓMO HACER CHIPIRONES EN SU TINTA
1.- Comenzamos pochando en un chorrito de aceite de oliva el ajo, las cebollas y los pimientos. Lo tendremos unos 15 minutos a fuego lento.
2.- Es hora de limpiar los chipirones. He de decir que es un poco laborioso y lo mejor es pedirlo al pescadero, si no os lo hace, os tocará hacerlo a vosotros. Debajo del grifo limpiamos las tripas, quitamos las telillas y los dejamos bien limpios.
3.- Ahora tenemos que saltear los chipirones, que tome color. Únicamente los doramos a fuego fuerte y lo retiramos y reservamos.
4.- Agregamos al sofrito la copa de vino blanco y subimos el fuego para que se evapore el alcohol.
5.- Añadimos los chipirones, el laurel y la tinta de calamar. Cubrimos con agua y ponemos una cucharadita de maicena para que espese la salsa. Muchas personas prefieren no poner maicena o harina pero a mí me gusta que esté un poco espesa.
Por otra parte decir que es preferible ponerle solo agua porque la tinta le da un sabor espectacular ya que mucha gente le pone caldo de pescado.
6.- Dejamos cocinar a fuego lento durante unos 40 minutos o hasta que veamos que los chipirones estén tiernos porque dependerá de su tamaño y grosor. Yo los tuve 40 minutos exactamente
4- TORREZNOS
Los torreznos no son otra cosa sino tocino cortado en tiras gruesas frito en aceite hasta que queden dorados y crujientes. Son tan maravillosos que la UNESCO los considera patrimonio gastronómico de la humanidad. torreznos cocina española.
La receta para hacer los torreznos perfectos es muy fácil. Sólo necesitamos paciencia y algo de tiempo. En una hora tendremos una ración de torreznos como la que nos podemos comer en nuestro bar preferido acompañados de una cerveza bien fresquita o de un buen tinto Ribera del Duero. En la provincia de Soria son receta estrella y los preparan de lujo. Como todo tienen sus pequeños trucos pero hoy os contaré el secreto para comer unos torreznos de premio en casa.
Receta Ingredientes:
la receta
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 1 hora
Tiempo total: 1 hora y 15 minutos
Raciones: 3
Categoría: entrante
Tipo de cocina: española
Calorías: 304 kcal por ración
Ingredientes de los torreznos para 3 personas
300 g de panceta adobada (100 g por persona)
Aceite de oliva virgen extra
Cómo hacer los torreznos perfectos
El día antes a preparar los torreznos sacaremos la panceta del envase (suele encontrarse al vacío) y la colgaremos en un lugar fresco y seco durante al menos 14 horas (si son 24 mejor), lo importante es que le de el aire por todos lados y la piel quede bien durita y seca.
Para hacer los torreznos cortaremos la panceta en tiras de unos 2 centímetros. Para partirla es mejor que lo hagamos con mucho cuidado en vertical. En horizontal la piel será imposible de cortar. Si vemos que tiene pelos podemos quemarlos un poco con un soplete o un mechero.
Cortar la panceta adobada en tiras para hacer los torreznos
Ponemos aceite de oliva virgen extra en una sartén que cubra el fondo (unos 2-3 mm) lo justo para poner la panceta con la piel hacia abajo y que quede sumergida. No es necesario poner más aceite. La panceta la ponemos en la sartén con el aceite frío y ponemos el fuego a una temperatura muy baja (en mi caso en el número 3 de 9 niveles). Dejamos que se vaya haciendo muy poco a poco durante al menos 30-40 minutos.
Colocar la panceta en la sartén con la piel hacia abajo
A los 20-25 minutos empezaremos a oír chasquear la piel de la panceta, eso quiere decir que se van formando las burbujas. A los 40 minutos subimos el fuego a temperatura media (al 6) y vamos haciendo la panceta por los lados.
Freír a fuego medio dando vueltas cada 5 minutos
La corteza seguirá haciendo burbujas hasta quedar completamente subida y crujiente.
Torreznos casi fritos y listos para sacar
Sacamos los torreznos y secamos el exceso de aceite en papel de cocina antes de servir.
Secar exceso de grasa del torrezno en papel de cocina.
Como suele ser un aperitivo para compartir podemos partir los torreznos en una tabla de madera y servir la ración al centro para compartir con los comensales. Acompañarlos de una cerveza bien fresquita, de un vermut o de un buen tinto es indispensable.
Presentación final de los torreznos
La preparación
Dejar secar la panceta al menos un día antes de hacer los torreznos
Cortar la panceta en tiras de unos 2 cm
Poner aceite de oliva virgen extra en una sartén que cubra el fondo y colocar la panceta con la piel hacia abajo en frio Calentar el aceite a fuego bajo y mantener la panceta en posición unos 30-40 minutos Cuando la piel ya haya empezado a chasquear y haya formado algunas burbujas subir el fuego a temperatura media y freír dándole vueltas hasta que quede dorada y la piel sea crujiente Sacar los torreznos y secar el exceso de grasa en un papel de cocina Partir y servir los torreznos para compartir.
5- TORTILLA DE PATATAS
Clásico entre los clásicos en la gastronomía española. Las mejores tortillas de patatas son las que quedan ligeramente cremosas en el centro. Si no sabes cómo prepararla, yo te enseño. comida barata en Madrid.
La tortilla de patatas o tortilla española es uno de los platos por excelencia de la gastronomía española. Para hacerla sólo necesitamos tres ingredientes: huevos, patatas y un buen aceite. Gusta a mayores y pequeños y se prepara en casi todas las casas, y como todas las recetas populares cada uno prepara la tortilla de patatas a su manera: unos con cebolla, otros sin cebolla, jugosa, muy hecha…unos caliente recién hecha y otros fría.
Receta Ingredientes:
tortilla de patatas
Ingredientes 4 personas
5 huevos
500 g de patatas
1 cebolla
Sal
Aceite de oliva virgen extra
Cómo hacer tortilla de patata
Tortilla de patatas, receta
Tortilla de patatas con o sin cebolla
Nuestro primer dilema cuando nos enfrentamos a hacer una tortilla de patatas es decidir si la vamos a hacer con cebolla o no. A mi personalmente me gusta mucho más con cebolla, pero conozco muchos casos que literalmente «odian» la cebolla, por lo que en caso de que vayas a hacer tortilla de patatas para un grupo variado, es mejor que preguntes, o, ante la duda, prescindas de la cebolla o utilices cebolla en polvo, porque normalmente es la textura y no el sabor, lo que no suele gustar a los que tienen fobia la cebolla. Otra alternativa es hacerla añadiendo pimientos verdes, que también le dan un sabor muy especial.
Primer paso: cortar y freír las patatas y la cebolla
Pelamos y lavamos las patatas, las cortamos en rodajas finas al igual que la cebolla. Ponemos ambas cosas en una sartén y cubrimos de aceite de oliva virgen extra, dejamos que se hagan a fuego medio-suave hasta que comiencen a dorarse. Sabréis que las patatas están hechas cuando comiencen a romperse, con la paleta. Para que la tortilla esté jugosa es importante que las patatas se hagan bien y se confiten, porque no hay nada peor que una tortilla con las patatas medio crudas. Por lo tanto, paciencia con este paso.
Segundo paso: mezclar con los huevos
Las sacamos de la sartén y escurrimos bien. Ponemos en un cuenco grande, aparte batimos los huevos y los añadimos a las patatas y a la cebolla, añadimos un poco de sal y mezclamos. Dejamos un par de minutos que se mezclen bien. Aquí hay quien prefiere dejar las patatas enteras y quien prefiere machacarlas un poco con la paleta para que se mezclen bien con el huevo. Tortilla de patata, trucos
Tercer paso: cuajar la tortilla
Ponemos en la sartén un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra y vertemos todo. Al principio rompemos un poco, como si fuéramos a hacer un revuelto, luego vamos dándole forma por los bordes. Cuando veamos que ya está cuajada por abajo ponemos un plato o una tapa encima de la sartén y le damos la vuelta rápidamente. Ponemos de nuevo la sartén en el fuego y deslizamos la tortilla desde el plato a la sartén. Dejamos unos minutos más (2 o 3 si te gusta más cuajada, menos si te gusta jugosa) para que se termine de hacer y ya tenemos lista nuestra tortilla de patatas.
Tortilla de patatas jugosa o cuajada
Aquí, como con la cebolla hay mucha división de opiniones. Hay quien prefiere la tortilla de patatas muy jugosa, con el huevo dentro apenas cuajado y quien la prefiere más cuajada. Te vamos a explicar cómo debes hacerla en cada caso:
Tortilla de patatas jugosa
En ambas opciones el paso de las patatas es el mismo, os recordamos de nuevo que deben estar muy blanditas y casi confitadas en el aceite. Para hacer la tortilla más jugosa por dentro es importante que, una vez mezclada con el huevo sigas los siguientes pasos:
Utiliza una sartén más pequeña y honda, ya que así te permitirá hacer una tortilla de mayor altura, sin que el calor de la sartén llegue al centro. Si utilizáramos una sartén más plana y amplia, el calor llegará por igual a la parte superior que al centro, cuajando el huevo inmediatamente, por lo tanto nuestro primer consejo va de nuevo dirigido a la sartén. Un ejemplo de una buena sartén para hacer tortillas jugosas puedes verla aquí.
Una vez vuelques las patatas con el huevo, sube el fuego a buena temperatura para que se cuaje rápidamente el exterior, y en un minuto más o menos sigue los pasos para darle la vuelta, dejándola tan solo un minuto más por el otro lado.
Tortilla de patatas cuajada
Por el contrario si quieres hacer la tortilla de patatas más cuajada, las instrucciones son las contrarias a las que damos arriba. En este caso utiliza una sartén más plana y amplia, para que de esta forma el calor llegue bien a todas partes y el huevo se cuaje por igual. Un ejemplo de sartén para hacer tortillas de patatas cuajadas sería esta sartén doble para tortillas de 24 cm pero poco profunda.
Para cuajar más la tortilla pon el fuego medio para que el huevo se haga bien por dentro, y déjala 2-3 minutos por cada lado.
6- MIGAS DEL PASTOR
Plato típico hecho a base de sobras de pan duro y cuya receta varía dependiendo de la región. Con chorizo son alucinantes. En algunas preparaciones llevan hasta uvas. casa Montal Zaragoza.
Este es un plato típico de los pastores. Cuando pasaban días en el campo estos productos solían llevarlos en el zurrón ya que aguantaban perfectamente y podían aprovechar el pan que estaba duro.
Receta Ingredientes:
migas de pan duro
6 dientes de ajo con piel
1 trozo de chorizo
250 gramos de panceta
aceite de oliva
sal
pimiento verde para freír
4 huevos
Preparación de Migas del pastor.
En caso contrario compra un pan con abundante miga y déjalo 3 – 4 días hasta que se ponga bien duro y con ayuda de un cuchillo de sierra haz rodajas bien finitas y seguidamente corta estas rodajas en tiritas pequeñas. Una parte muy importante para la elaboración de las migas es humedecerlas con agua y mantenerlas húmedas durante 3 – 4 horas antes de hacerlas ya que al estar húmedas obtendrás un mejor resultado y se quedarán suaves y crujientes a la vez. Migas del pastor, humedecer las migas con agua.
En una sartén con abundante aceite de oliva, pero sin pasarte, colocamos los dientes de ajo. Migas del pastor, colocar los ajos en una sartén con un poquito de aceite de oliva Cuando empiecen a tomar color añadimos la panceta troceada... Migas del pastor, añadir la panceta troceada... dejando que doren ligeramente.
Migas del pastor, dorar la panceta Añadimos el chorizo que habremos cortado en trocitos... Migas del pastor, añadir el chorizo troceado... y removemos todo bien para que suelte en el aceite su color rojo sin dejar que se nos queme. Migas del pastor, dejar que el chorizo suelte el color Escurrimos los ingredientes...
Migas del pastor, escurrir los ingredientes... y los reservamos, pasando nuevamente a la sartén el aceite. Migas del pastor, devolvemos el aceite a la sartén Metemos las migas en el aceite... Migas del pastor, añadir las migas... removiendo bien con una cuchara de madera. Migas del pastor, remover bien con una cuchara de madera.
Sin dejar de remover seguimos cocinando las migas de pan hasta que nos queden doraditas y crujientes. En dicho aceite añadimos la panceta y el chorizo con los ajos que teníamos reservados. Migas del pastor, añadir la panceta, el chorizo y los ajos reservados.
Verificamos de sal y seguimos la cocción durante unos 5 minutos más. Migas del pastor, seguir cocinando hasta que queden las migas crujientes Por otro lado, para acompañar, freímos unos pimientos verdes cortados en trozos... Migas del pastor, freír unos pimientos verdes troceados... y por último freímos los huevos para acompañar también a nuestras migas. Migas del pastor, freír los huevos Están listas para comer. Si se te apetece también las puedes acompañar con unas uvas.
7- ARROZ NEGRO
También conocido como “paella negra”, es un arroz hecho con tinta de calamares y claro, calamares. De sabor fuerte y delicioso. Arroz negro.
Cocinar el arroz negro, una receta fácil cocinada en paella de 40 centímetros de diámetro y con la que pueden comer perfectamente 5 comensales. Para conseguir un buen arroz hay que tener en cuenta una serie de trucos sencillos, pero necesarios para que el arroz quede en su punto.
La elaboración de este arroz negro con sepia, calamares y gambones es muy sencilla. Básicamente ha de realizarse un pochado de las verduras, un sofrito de los cefalópodos y la cocción final del arroz; pocos pasos y muy sencillos. El fumet o caldo que empleemos, mejor casero. También se puede usar agua, pero no le dará el punto de sabor tan rico que le aporta el caldo casero.
Si os gustan los arroces, en mi blog vais a encontrar muchísimos. Os recomiendo que probéis este arroz con verduras y este arroz con pollo y chipirones. También os animo a preparar este rico arroz tres delicias. Y ahora, amigos, vamos allá, ¡al lío!
Elaboración:
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de cocinado: 40 minutos
Tiempo total: 50 minutos
Receta Ingrediente:
Ingredientes
400 g de arroz SOS bomba Reserva
Caldo de pescado o fumet 1 litro aproximadamente
3 paquetitos de tinta de calamar
500 g. de sepia
2 dientes de ajo
120 g. de tomate
Unas hebras de azafrán
1 tacita de aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto
1/2 cucharadita de pimientón de la Vera dulce
1 paella de 40 cm. de diámetro
INGREDIENTES PARA EL CALDO:
2 l de agua
las cabezas de los gambones
los tentáculos de la sepia y el calamar
1 tomate
1 cebolla
sal
2 cucharadas de carne de pimiento choricero
150 ml de vino blanco
ARROZ NEGRO INGREDIENTES:
1 sepia
1 calamar mediano
sal
aceite de oliva virgen extra
500 g de arroz
1.1 l de caldo
1/2 cebolla
2 dientes de ajo
40 g de tinta de calamar
paella de 40 cm de diámetro
Arroz negro, una receta fácil paso a paso
Arroz negro preparación:
Todo picado y limpio antes de empezar a hacer el arroz negro.
Así que empezamos picando la cebolla y el ajo, limpiando los gambones, cortando la sepia y el calamar en trozos de bocado y reservamos todo. En el arroz negro los gambones no son necesarios, pero le dan un toque muy bueno. Sobre todo en el fumet.
Cómo hacer un buen caldo para el arroz negro
1. En una fuente honda echamos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y añadimos las cabezas de las gambas.
2. Añadimos a la vez los tentáculos del calamar y de la sepia, salamos y freímos durante unos minutos.
3. Con esta acción conseguiremos aromatizar el aceite y le dará mucho sabor al caldo del arroz negro con sepia.
4. Una vez frito, ponemos dos cucharadas de carne de pimiento choricero, sofreímos durante 30 segundos y removemos.
5. Ahora, agregamos el vaso de vino blanco. Dejamos 2 minutos que se evapore el alcohol. Pasado el tiempo incluimos la cebolla y el tomate partidos por la mitad.
6. Vertemos el caldo y ponemos el fuego a tope, cuando empiece a hervir bajamos a fuego medio alto durante 30 minutos.
7. Mientras empieza a hervir, aprovechamos para ir eliminando las impurezas, quitamos esa espuma con cuidado.
8. Pasado ese tiempo, probamos el punto de sal por si hiciera falta rectificarlos, colamos y mantenemos caliente para utilizarlo en nuestro rico arroz negro.
Receta arroz negro, la cocción
1. En una paella ponemos unas cucharadas de aceite de oliva virgen extra ponemos el fuego a la mitad.
2. Echamos la cebolla picada en trozos pequeños, salamos y la pochamos unos minutos.
3. Cuando esté bien pochada agregamos el ajo y lo sofreímos junto a la cebolla un minuto escaso. El ajo, le dará sabor
4. Listas las verduras, incluimos la sepia y el calamar que tenemos partidos en trozos de bocado. Salamos y freímos bien durante unos 7 minutos, aproximadamente.
5. Removemos hasta que se dore. Una vez dorado, agregamos el arroz, mezclamos y lo tostamos durante 1 minuto.
6. Es importante tostar el arroz para que luego el grano quede suelto y no se apelmace.
7. Pasado ese minuto, añadimos la tinta de calamar y removemos durante 30 segundos, aproximadamente, hasta que quede el arroz negro.
8. Justo en este momento incluimos el caldo colado y caliente para cocinar nuestro arroz negro.
9. Moveremos un poco el arroz para dejar una capa homogénea, ponemos el fuego a tope 1 minuto.
10. Al mover el arroz negro al principio, lo que buscamos es colocar el arroz en su sitio (es importante que la capa sea fina). Pasado el minuto, bajamos el fuego.
11. Lo ponemos a temperatura medio alta durante los 17 minutos que quedan de cocción del arroz negro con calamares, sepia y gambones.
12. Incorporamos las gambas ya peladas (que no queden en la superficie). Pasados 2 minutos más, probamos y rectificamos de sal si hiciera falta.
13. Dejamos que se cocine el arroz negro los 15 minutos que restan. Es muy importante no volver a tocar más el arroz a lo largo de la cocción.
14. Cuando el arroz negro con sepia lleve 17 o 18 minutos vamos a oír como un pequeño estallido constante, eso significará que se está quedando sin agua.
15. Justo en ese momento, apagamos el fuego de nuestro arroz negro, lo dejamos reposar unos 3 minutos, aproximadamente. Servimos y a disfrutar.
Arroz negro
Consejos para hacer un buen arroz negro
1. Pochar los ingredientes sin prisa, que queden transparentes y la verduras suelten el agua.
2. Tostar el arroz para que quede suelto a la hora de servirlo.
3. La capa de arroz en la paella debe ser la mínima posible, eso ayudara a que quede suelto.
4. Las gambas no son necesarias, pero le dan un toque muy bueno.
5. El fumet debe estar caliente a la hora de echárselo a nuestro arroz negro.
6. Un acompañamiento perfecto es la famosa salsa alioli para disfrutar de un estupendo arroz negro con alioli.
8- PIMIENTOS DE PIQUILLO RELLENOS
Los mejores son los rellenos de bonito o de bacalao. Los pimientos de piquillo llegan a otro nivel. No te asustes por el nombre, no pican casi. pimientos de piquillo rellenos de bacalao.
El pimiento del piquillo es una variedad de pimiento que se produce en Lodosa en Navarra España. Se suele cocinar en el horno y normalmente se suelen rellenar, podemos encontrar muchísimas recetas de pimiento del piquillo con distintos tipos de relleno, nosotros vamos a rellenarlos con bacalao.
Además de rellenar los pimientos del piquillo, los podemos comer en crudo con un poco de aceite, ajos laminados y sal, a la sartén, caramelizados o podemos utilizarlos para acompañar carnes, pescados azules o tortilla de patatas.
Recetas Ingredientes:
Pimientos de piquillo rellenos de bacalao
Ingredientes
12 pimientos del piquillo enteros en conserva
350 g bacalao desalado
2 cucharadas de harina
300 ml de leche entera
1 cebolla
Aceite de oliva virgen extra
1 diente de ajo
200 ml caldo de pescado
100 ml vino blanco
3 pimientos del piquillo
1 cucharadita de azúcar
Sal
Hervimos el bacalao
Colocamos el bacalao en una cazuela con agua fría y lo llevamos al fuego. Una vez rompa a hervir, retiramos del fuego y dejamos reposar durante 5 minutos. Escurrimos los trozos de bacalao y los desmigamos. Hacemos la bechamel con bacalao En un cazo ponemos un poco de aceite y el ajo laminado.
Cuando el ajo comience a tener un color dorado, añadimos el bacalao desmigado y damos un par de vueltas. Añadimos una cucharada de harina, mezclamos bien con el bacalao y añadimos poco a poco la leche. Dejamos cocinar sin dejar de remover hasta que la salsa vaya espesando y añadimos una pizca de sal.
Rellenamos los pimientos
Ponemos el relleno del bacalao en una manga pastelera para que sea mucho más fácil de rellenar los pimientos pero podéis utilizar una cuchara
Rellenamos los pimientos del piquillo y reservamos.
Salsa de pimientos de piquillo
Para hacer la salsa de piquillos, vertemos un poco de aceite en una cazuela, añadimos la cebolla y dejamos cocinar a fuego medio hasta que coja un poco de color. Añadimos la otra cucharada de harina y rehogamos con cuidado para que la harina no se queme. A continuación añadimos el vaso de vino y una vez evapore el alcohol, añadimos el caldo de pescado. Vertemos la salsa en el vaso de la batidora, añadimos 3 pimientos del piquillo, trituramos la salsa y la llevamos de nuevo a la cazuela.
Dejamos cocinar hasta que la salsa tome cuerpo. Incorporamos por último los pimientos del piquillo rellenos con cuidado y dejamos cocinar durante 5 minutos. Servimos los pimientos del piquillo en una fuente junto con la salsa.
9- ARROZ CALDOSO CON POLLO
Los andaluces saben, y saben mucho. Esta delicia de plato es caldosa, perfecta para días lluviosos. receta arroz con pollo andaluz.
Las recetas de arroz del tipo de este arroz caldoso con pollo son uno de los comodines en la cocina. Es ideal porque puedes preparar el sofrito y dejarlo todo listo a falta de cocinar el arroz y en solo 20 minutos tendrás un plato estupendo en la mesa.
Debes tener en cuenta que cocinar arroz es muy similar de unas preparaciones a otras, aunque puedan variar los ingredientes los pasos son muy parecidos y una vez que le cojas el truco te saldrá perfecto cada vez que lo hagas.
Receta Ingredientes:
Arroz Caldoso con Pollo
Para 4 Personas
1/2 Pollo Limpio y Sin Piel
300 de Arroz
1,2 L. de Caldo de Pollo
Varias Hebras de Azafrán (Colorante alimentario si no tienes)
1 Pimiento Verde
1 Pimiento Rojo
150 ml. de Tomate (También sirve tomate triturado)
1/2 Cebolla
3 Dientes de Ajo
1 Cucharadita de Pimentón Dulce
Aceite de Oliva VE
Pimienta Negra
Sal
Cómo Preparar el Pollo para Hacer el Arroz Caldoso con Pollo
Lo primero que se prepara cuando quieres hacer un arroz caldoso con pollo riquísimo es el pollo. Prepara las piezas de pollo asegurándote que están libres de piel y restos de plumas. Después ponles sal y pimienta. En el recipiente donde vayas a hacer el arroz, pon un chorreón de aceite a calentar. Añade las piezas de pollo y fríelas hasta que se doren bien por todos los sitios. A continuación las sacas y reservas.
El Sofrito de Arroz
Pela la cebolla y los dientes de ajo. Prepara también los pimientos, quítale las simientes y lávalo. A continuación los troceas bien. Rectifica el aceite en caso de ser necesario e introduce las verduras. Pon el fuego medio y añádeles un poquito de sal para que se vayan ablandando. Déjalas cocinarse unos 10 minutos, hasta que veas que están hechas.
Cuando haya pasado ese tiempo, pon el pimentón dulce, dale una vuelta y rápidamente le pones el tomate por encima. No te demores en este paso porque el pimentón se quema con facilidad. Si lo prefieres añade el pimentón y el tomate a la vez y así te aseguras de no quemarlo. Déjalo cocinarse unos cinco minutos.
Cocinar el Arroz para el Arroz Caldoso
Después pon los trozos de pollo que habías reservado y el arroz que le vayas a poner. A mi me gusta hacerlo con el arroz bomba, pero también sale muy rico con el arroz redondo. Mientras se mezclan los sabores con el arroz, mete el caldo en el microondas o caliéntalo aparte, pero debe estar bien caliente cuando vayas a verterlo sobre el arroz.
Ahora es el momento de subir el fuego a tope y verter el caldo sobre el arroz. Coloca también las hebras de azafrán o colorante alimentario. Mueve el arroz para formar una capa del mismo grosor sobre la superficie y ya no se moverá más. Cuando veas que empieza a hervir baja el fuego a medio-bajo y déjalo 15 minutos. De cualquier manera, te aconsejo mirar el paquete del arroz porque dependiendo del tipo de arroz puede variar unos minutos. Una vez que haya pasado el tiempo apártalo del fuego y déjalo reposar 5 minutos antes de servirlo.
10- COCIDO MADRILEÑO
Uno de los platos más increíbles de la gastronomía española. Ideal para climas fríos y para comer en grandes grupos. ¡Puf! ¡Nunca puedes servirte sólo un plato! cocido madrileño. Es verdad que desde pequeño el cocido en casa siempre ha sido el cocido gallego. Aunque desde que llegué a Madrid, la balanza entre cocido gallego y madrileño se está equilibrando.
La razón es que mi suegra, Encarna, lo prepara con la mejor materia prima, despacio y con mucho, mucho mimo. Los domingos de cocido se han convertido en día de gozo y de siesta, por supuesto. Un cocido en la que priman ingredientes de gran calidad y un tiempo de cocción bastante lento. Una receta que hecha con cariño y con los ingredientes adecuados te saldrá de rechupete. Un cocido donde se incorpora lo mejor de Madrid y de toda España.
Receta Ingredientes:
1 puñado de garbanzos por cada comensal. Añadimos 6 puñados.
Fideo mediano al gusto. Ponemos 1 puñado pequeño por persona.
2 puerros
1 nabo
3 zanahorias grandes
6 patatas medianas 1 por personas
1 calabacín
1 repollo y 3 dientes de ajo para rehogar el repollo
1/2 Kg de morcillo de ternera
1/4 Kg de costillas de cerdo
250 g de tocino blanco o entreverado de cerdo
1/4 de pollo (muslo y contra muslo)
1/2 pechuga de pollo
200 g o 1 punta de jamón
1 hueso de jamón
1 hueso de caña
1 hueso de rodilla
4 chorizos
Aceite de oliva virgen extra y sal al gusto
Preparación de los Garbanzos.
Garbanzos. Antes de empezar con el cocido. Preparar el cocido el día antes porque prefiero desgrasar bien el caldo. Es opcional y un consejo para evitar que quede muy fuerte. Es muy fácil, sólo tenemos que enfriar toda una noche, en la nevera para que no se estropee el caldo. Al día siguiente se puede quitar fácilmente la grasa de la superficie con una cuchara.
Una vez aclarado este punto totalmente opcional, vamos con los garbanzos. La noche de antes ponemos los garbanzos en remojo con un puñado de sal gorda y agua templada. Con respecto a la temperatura del agua, tradicionalmente se dice que los garbanzos deben de entrar en contacto con el agua. Cubrimos de agua templada y los dejamos a temperatura ambiente, jamás en la nevera. Al día siguiente colamos los garbanzos y reservamos.
La preparación de los Garbanzos
Los Garbanzos del cocido madrileño. En la olla a presión metemos el calabacín lavado y sin pelar, el nabo pelado y los puerros lavados y en trozos. Añadimos también la carne a excepción de los chorizos y morcilla y los huesos. En unas bolsas de rejilla, añadimos los garbanzos.
Podéis comprar estas bolsitas en cualquier ferretería o tiendas de menaje. Recogerlos en una malla de cocción, es por presentación, limpieza y comodidad. Así no se esconden huesecillos entre los mismos, ni se estropean al recogerlos. Introducimos las bolsas con los garbanzos bien cerradas en la olla a presión .
En otra cazuela cocemos los chorizos pinchándolos anteriormente y la morcilla. En 15 minutos estarán listos, así evitamos la grasa que suelta, que no suele ser agradable. Reservamos. Vertemos agua en la olla hasta cubrir todos los ingredientes. Tapamos la olla y la ponemos a potencia máxima hasta que empieza a hervir, momento en el que lo bajamos a temperatura media.
Pelamos las zanahorias y las patatas. Reservamos.
Pasada una hora de haber arrancado la olla rápida a hervir, la retiramos del fuego. Cuando podamos abrirla, añadimos las zanahorias. Volvemos a cerrar la olla y la ponemos a cocer de nuevo.
Presentación del Cocido Madrileño
Preparamos el repollo. Deshojamos el repollo y lo lavamos. Lo ponemos a cocer en una cacerola con agua y un poco de sal. Lo dejamos cocer 1 hora a fuego medio/alto. Una vez cocido lo colamos. En una sartén añadimos un chorrito de aceite de oliva y picamos los dientes de ajo. Dejamos que se doren e incorporamos el repollo para rehogarlo todo junto durante 15 minutos aproximadamente, a fuego lento. Una vez listo, añadimos un poco de sal al gusto
Yo nunca cocino el repollo con el resto de ingredientes. No me gusta que esta verdura se haga la protagonista del sabor de la receta. Tal y como os indico en el paso a paso, el repollo lo cuezo y lo rehogo por separado. Si el repollo no es de vuestro agrado, podéis sustituir este ingrediente por unas judías verdes que, cocidas y rehogadas con su ajito, son una combinación perfecta para acompañar este espectacular plato.
Después de haber agregado las zanahorias y pasado 5 minutos de cocción retiramos la olla a presión y cuando podamos la abrimos para añadir la patata que cocerá 12 minutos más con el resto de ingredientes. Lo justo para que queden en su punto. Si al abrir, el caldo está muy concentrado muy rojo por el pimentón que suelta el chorizo. Podéis retirar y guardar un poco y añadir algo de agua a la olla. El caldo que retiréis, luego lo volvéis a añadir a la sopa.
Con el caldo colado y desgrasado, probamos de sal normalmente no hace falta añadir nada preparamos la sopa. Añadimos los fideos y hervimos los minutos indicados en el paquete. Servimos el cocido madrileño en 2 o 3 vuelcos, como lo hagáis normalmente en casa. Por un lado servimos de primero la sopa bien caliente, al gusto de fideos para cada comensal. Y en varias fuentes, una con las verduras y los garbanzos, y otra con las carnes y embutidos. En casa nos encante mezclar el tocino con los garbanzos y hacer como una especie de pasta estilo ropa vieja, que está buenísima. Pero aquí, como en la mayoría de los cocidos no hay norma exacta.
11- PATATAS REVOLCONAS
Una de las recetas de cocina española más fáciles que existen. Imagínate un puré de patatas teñido de color con pimentón en polvo y con trozos de chorizo, o bacon… o ambas. patatas revolconas Como la mayoría de las receta tradicional o “de siempre” se trata de un plato con ingredientes sencillos, básicamente es patata triturada con un tenedor y aliñada con ajo y pimentón.
Aunque originariamente formaba parte del repertorio gastronómico diario de campesinos y gente humilde, hoy en día es habitual que se sirva como tapa en bares y restaurantes, principalmente en las comunidades de Salamanca, Ávila y Extremadura, de donde son más típicas. Visitando Ávila y Cáceres deguste este plato por primera vez hace algunos años y se han convertido en una tapa tradicional de la cocina española. Para bares y restaurantes de toda España y ver si están a la altura del paladar más exquisito Gourmet.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
4 patatas grandes
3 dientes de ajo
1 hoja de laurel
1 cucharadita pimentón dulce de La Vera
½ cucharadita de pimentón picante de la Vera
200 g. panceta adobada o torreznos, cortezas de cerdo, papada de cerdo...
4 cucharadas aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto, recordad que la carne tiene bastante sal
Un chorrito de vinagre un poquito para cocer las patatas
La preparación de las patatas
Primero hacemos las patatas, en este caso las hemos cocido sin piel pero podéis hacerlas también con piel y pelarlas después. Todo depende de la prisa que tengáis en la cocina. Al cocerlas con piel conseguimos que mantengan todo su almidón. Seleccionamos patatas del mismo tamaño ya que así tardarán el mismo tiempo en cocerse. Las lavamos muy bien bajo el grifo. Las colocamos en una cazuela ancha y llenamos aproximadamente con un dedo de agua fría.
Añadimos un poco de sal, la hojita de laurel y un chorrito de vinagre de vino blanco. Cuando el agua comience a hervir bajamos el fuego y las dejamos cocer a fuego medio. El tiempo de cocción dependerá del tamaño de las patatas, pero entre 20 y 40 minutos estarán. Comprobamos que están cocidas pinchando con un tenedor que deberá entrar con suavidad en la patata.
Las sacamos y escurrimos, y quitamos la piel antes de que se enfríen porque resulta más fácil, eliminando también los ojos o manchas verdes. Si tenéis prisa, directamente pelamos las patatas. Las cortamos en trozos grandes y las ponemos a cocer con agua, sal y la hoja de laurel durante unos 25 minutos, hasta que vemos que están muy blanditas. Escurrimos y reservamos.
Cómo se preparan las patatas revolconas
Mientras se cuecen las patatas preparamos el aliño. Cortamos la panceta en trozos no demasiado pequeños y los ponemos a freír en una sartén con las 4 cucharadas de aceite. Cocinamos la panceta hasta que vemos que está bien doradita pero sin que llegue a quemarse. Retiramos y reservamos. n la misma sartén, y con el aceite sobrante freímos los ajos cortados en láminas. Cuando estén doraditos retiramos la sartén del fuego y le añadimos los pimentones. Removemos con una cuchara de madera para integrar. Ponemos las patatas en un bol y le añadimos el aceite y los ajos de la sartén. Con la ayuda de un tenedor removemos y aplastamos las patatas hasta que queden bien impregnadas de la salsa y sin trocitos. Y por último las servimos acompañadas de la panceta adobada frita y su salsita por encima.
12- GAMBAS AL AJILLO
Todos las hemos probado, todos las amamos. Su aroma nos vuelve locos. Uno de esos platos típicos españoles que no deberíamos pasar por alto. como hacer gambas al ajillo receta.
Las gambas al ajillo son un plato muy típico de nuestra gastronomía que suelen tomarse como entrante o bien como tapas en muchos bares; aunque también podemos encontrarlas como acompañamiento de otros platos.
Las gambas al ajillo son un auténtico manjar que podéis preparar de una forma sencilla en muy poco tiempo. De forma que siempre son una buena opción para cuando no disponemos de mucho tiempo para dedicarle a la cocina.
Receta Ingredientes:
GAMBAS AL AJILLO
500 gramos de gambas
5 dientes de ajo
2 guindillas
Aceite de oliva
Sal
Preparación de Gambas al Ajillo
1.Comenzamos pelando las gambas. Lo mejor para este plato es que utilicéis gambas blancas pequeñas, que son las que mejor se hacen.
2.Cortamos los dientes de ajo en láminas. Aunque yo he utilizado unas 5 cabezas de ajo, podéis ir incorporando más cantidad de ajo si os gustan con más sabor.
3.En una sartén echamos una buena cantidad de aceite de oliva, como veis en la foto. A continuación vamos a dorar las guindillas y los ajos a fuego suave para que no se quemen.
4.Una vez que los ajos y las guindillas se han dorado, es el momento de echar las gambas que hemos pelado con un toque de sal.
5.Freímos las gambas a fuego alto unos de forma que se hagan bien por todos los lados durante 2-3 minutos. Es importante que no os paséis de tiempo para que no queden demasiado secas. En el caso de que las gambas sean grandes sí que será necesario que las cocinéis durante más tiempo para que se hagan bien.
6.Para servirlas, es muy típico utilizar una cazuelita de barro y, si queréis, podéis añadir un poquito de perejil. Recordad que se sirven muy calientes, casi recién salidas de la sartén.
La importancia de obtener, un buen producto fresco, para preparar gambas al ajillo utilizar gambas frescas y, si podéis, que sean de buena calidad ya que es un plato sencillo en el que lo importante es el ingrediente principal. Sin embargo, si queréis que salga más económico, también podéis optar por gambas congeladas que, si escogéis bien, a veces no se diferencian demasiado.
13- PATATAS BRAVAS
Patatas cortadas en trozos medianas a las que se les pone encima una salsa brava a base de tomate, es ligera o medianamente picante. receta como hacer patatas bravas españolas. Receta de patatas tan tradicional y castiza, la salsa brava o picante es la esencia de la misma.
Podemos decir que salsas bravas hay tantas como cocineros/as o locales de hostelería donde las sirvan. Cada maestrillo tiene su librillo, sus trucos y su toque personal. Pero una buenas bravas, mueven montañas y tienen auténticos devotos que pueden hacer kilómetros para disfrutarlas.
Las patatas deben de estar tiernas por dentro y crujientes por fuera, por lo que vamos hacerles una doble fritura: primero las confitamos y luego las freímos a temperatura muy alta. La salsa tiene que tener su punto picante, pero sin excesos, lo que buscamos es ese picor delicioso que nos invita a tomar un poco más.
Receta Ingredientes:
1 Kg. de patatas especiales para freír o fritura
Aceite de oliva virgen extra el necesario para confitar y luego freír las patatas
Para la salsa brava o picante: 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas de pimentón de la Vera dulce
1 cucharada de pimentón de la Vera picante
1 cucharada de harina fina de maíz
200 ml. de caldo de carne
1 cucharadita de sal
La preparación de patatas bravas
Pelamos las patatas, las lavamos, escurrimos y secamos bien con un trapo de algodón o papel. Las cortamos de forma tosca, en cubos del tamaño de un bocado, aproximadamente en dados de unos 5 cm de grosor. Ponemos un cazo grande y vertemos abundante aceite de oliva virgen extra, más o menos por encima de la mitad de la capacidad del cazo.
Añadimos las patatas en el aceite en frío y dejamos que se caliente a temperatura media. Bajamos el fuego al mínimo y las vamos a confitar en el aceite muy lentamente durante 15 minutos. Cuando ya estén tiernas las sacamos del cazo con un escurridor y reservamos. Mientras se van enfriando las patatas, vamos con la salsa brava.
La preparación de esta salsa brava
En una sartén, echamos 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Ponemos a fuego bajo. Cuando comience a coger algo de temperatura, añadimos 2 cucharadas de pimentón dulce y 1 de pimentón picante. Mezclamos bien, para que se integre con el aceite, y de paso no se nos queme. Incorporamos ahora la harina fina de maíz, que nos servirá para espesar la salsa.
Seguimos removiendo, y siempre a fuego bajo. Se irá formando como una pasta espesa. Vertemos la mitad del caldo de carne. Removemos para que se mezcle bien con el resto de ingredientes. Subimos a fuego medio, mientras seguimos removiendo. Cocinamos 5 minutos. Salamos al gusto. Vertemos el resto del caldo, removiendo al mismo tiempo. A fuego medio/alto, cocinamos 10 minutos más para que vaya cogiendo consistencia nuestra salsa brava. Cuando tenga la textura deseada, apagamos el fuego. Dejamos reposar.
Las patatas bravas terminadas una vez finalizada presentar y servir
En una sartén, ponemos a fuego alto abundante aceite de oliva virgen extra. Cuando el aceite esté muy caliente echamos las patatas y freímos unos 10 minutos, o hasta que estén doradas. Nos quedarán doradas y crujientes por fuera, blandas y tiernas por dentro. Las sacamos de la sartén y las ponemos en un plato con papel absorbente para quitarles el exceso de aceite. Las pasamos a un plato bonito y finalmente las regamos con la salsa brava.
14- BACALAO A LA VIZCAÍNA
En el país vasco llevan las comidas a un nivel estratosférico de delicia y calidad. Este plato es legendario. haciendo bacalao a la vizcaina. Esta receta de bacalao a la vizcaína es una receta tradicional de la gastronomía vasca y el conjunto del bacalao con esta salsa cuyo sabor está marcado por el pimiento choricero es una combinación ganadora.
Es muy sencilla de preparar y queda tan rico todo que una vez comido el bacalao es difícil resistirse a mojar pan hasta acabar con toda la salsa. Si quieres acompañar con una guarnición, yo sin duda me decantaría por patatas, y mejor aún si las podemos mojar en la salsa. Les digo cómo preparar estas patatas gajo al horno aromatizadas para huír de fritos y disfrutar de unas patatas tiernas por dentro y doraditas por fuera, perfectas para acompañar este plato.
Recetas Ingredientes:
Cómo preparar el bacalao a la vizcaína para 4 personas
4 lomos de bacalao fresco y desalado. También se puede preparar con bacalao congelado o con bacalao salado, en este último caso habrá que desalarlo y ya que tiene que estar dos días sumergido en agua y cambiándole el agua 2-3 veces al día me parece más práctico utilizar bacalao ya desalado.
4 dientes de ajo.
1 cebolla grande.
1 cucharada sopera de carne de pimiento choricero.
50 ml de brandy o coñac.
400 ml de agua.
Para la guarnición, puedes preparar estas patatas gajo al horno aromatizadas, y en este caso por supuesto utilizar la salsa del bacalao para mojarlas la receta de bacalao a la vizcaína.
Pela los ajos y córtalos en rodajas finitas. Cubre el fondo de una cacerola u olla bajita con aceite y ponla en el fuego a temperatura suave. Echa los ajos para que se vayan confitando poco a poco, la idea es que no se doren de golpe ni se frían.
Introduce con cuidado los lomos de bacalao con la piel hacia arriba en la olla. El aceite no debe freírlos, por lo que apenas verás que se mueven algunas burbujitas, pero poco más. Puedes subir un poco la temperatura del fuego si ves que hay poco movimiento.
Cocina los lomos de bacalao unos 2 minutos, dale la vuelta y otros 2 minutos por el otro lado. Escurre el bacalao con una espumadera y reserva junto con los ajos. Verás que han ido soltando bolitas de albúmina, es la esencia para preparar el clásico bacalao al pil pil y viene genial para espesar la salsa a la vizcaína que vamos a preparar.
Pela la cebolla y córtala en tiras muy finitas y, cuando hayas sacado el bacalao y los ajos, échala en la olla y cocínala a fuego medio-bajo para que se confite durante unos 15 minutos. Verás que lo estás haciendo bien si la cebolla cada vez está más tierna pero no se dora.
Cuando la cebolla esté bien tierna añade la cucharada de carne de pimiento choricero junto con el brandy o coñac, sube el fuego para que esté medio-alto y que se evapore el alcochol, tardará unos 2-3 minutos. Añade el agua, baja el fuego para que esté medio-flojo y cocina la salsa 10 minutos, removiendo de vez en cuando.
Tritura la salsa con una batidora de mano o incluso con un robot si la quieres muy fina. A mi me gusta con la batidora de mano y que quede espesa e incluso un poco grumosa como puedes ver en las fotografías pero lo ideal es que la dejes a tu gusto. Añádele más agua si la quieres más ligera y tritúrala con la herramienta que prefieras. Introduce de nuevo el bacalao y los ajos en la olla, que se impregne bien con la salsa y cocínalo todo junto a fuego flojito 5 minutos.
Tiempo: 45 minutos Dificultad: fácil
Sirve y degusta: Lo ideal es servir el bacalao con la salsa calientes, aunque según la época del año se pueden servir templados o incluso fríos. Si has tenido que preparar la receta con antelación no hay problema, cuando tengas lista la salsa coloca el bacalao en la olla pero no lo calientes esos 5 minutos que necesita hasta justo antes de servirlo.
15- FIDEUÁ
De origen valenciano, este plato se prepara de manera similar a la paella pero con pasta. delicioso fideua de marisco. Como la paella, la fideuá se prepara en una paella un recipiente grande y parecido a una sartén. Estos recipientes se crearon especialmente para la producción de platos similares a la paella, pues cocinan el arroz o, en este caso, la pasta de manera uniforme. Sin embargo, si no tienes una paella siempre puedes recurrir a una sartén grande y de fondo plano en su lugar. Pero si sí que tienes una paella, sin embargo, recuerda que es típico tanto cocinar como servir este plato en la sartén, y darle una cuchara a tus invitados para que se sirvan.
En cuanto a la historia de la fideuá, hay un cuento popular que tiene que ver con los pescadores españoles. De acuerdo con esta historia, el plato fue creado en 1915 por Jean Baptiste Pascual, de Safor, Gandía, más conocido como Zabalo. Era un cocinero en un barco pesquero y solían cocinar platos de arroz típicos españoles como la paella. Sin embargo, el patrón del barco era un amante del arroz y siempre comía mucha más paella de la que le pertenecía, lo que significaba que el resto de marineros nunca disfrutaban de una ración completa de comida.
Receta Ingredientes:
Receta de la Fideuá
Fideuá
Ingredientes cuarto raciones
500 gramos de pasta gruesa
200 gramos de gambas
250 gramos de rape
250 gramos de sepia o calamar
4 cangrejos de río grandes
1 bote grande de tomates machacados
2 dientes de ajo
1 pimiento rojo
Azafrán, aceite de oliva y sal
Preparación de la Fideuá
Retira las pieles de las gambas pero no las tires. Limpia la sepia o el calamar y el rape bajo el grifo con agua fría. Precalienta el horno Cocina las pieles de gamba y los restos del rape durante 20 minutos en una olla con agua y un poco de sal; esto será la base del caldo. En una paella o sartén ancha calienta aceite. Une vez que alcance una temperatura alta, añade los cangrejos de río enteros, las gambas, el rape y la sepia o el calamar en rodajas.
Saltea los ingredientes durante unos minutos, apaga el fuego y coloca sobre un plato. en el mismo aceite, fríe el ajo, añadiendo el azafrán, pimiento rojo, los tomates machacados y la sal. Esto debe ser freído ligeramente durante unos 8-10 minutos. Añade el caldo, la pasta, y cocina a fuego alto durante unos 10 minutos. Añade el pescado y el marisco. Coloca la paella o sartén en el horno y mantén la dentro hasta que la fideuá esté dorada. Sírvela caliente.
16- CHORIZO A LA SIDRA
Lo ideal con este plato es mojar pan en la salsa que resulta de esta preparación. Cada bocado es la gloria. receta de chorizo a la sidra. Las tapas tradicionales que nos gustan a todos, el chorizo a la sidra. Este aperitivo es tradicional de Asturias y de otras regiones españolas de tradición , si tenemos invitados y servimos con un poco de pan, y sidra o bien vino al gusto, de cada lugar es una auténtica delicia. Es una receta perfecta para cuando tenemos invitados en casa y queremos agasajarles con un plato sencillo pero delicioso. Además combina genial con unas patatas bravas, así que si servís las dos cosas juntas, es todo un plato de éxito.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
1/2 kg de chorizo fresco ahumado asturiano
700 ml de sidra de manzana natural
Opcional: Una hojita de laurel
Preparación del chorizo a la sidra
Primero quitamos las cuerdas de los chorizos y los pinchamos con un tenedor varias veces para permitir que parte del jugo salga al exterior durante la cocción, evitando que revienten. Así cuando estén cociéndose soltarán las grasa y darán mucho sabor.
Ponemos los chorizos en una cazuela grande y echamos la botella de sidra entera, procurando que cubra los chorizos completamente. Ponemos el fuego al máximo y, cuando rompa a hervir, lo bajamos a un nivel medio-bajo y lo dejamos cocinar durante una media hora aproximadamente. Una vez pasado este tiempo, sacamos los chorizos, los cortamos en rodajas y los servimos en cazuelas o platos hondos con su salsa. Listos para comer.
Al horno o bien al microondas
Aunque un asturiano no lo aprobaría, se puede hacer también al microondas, sólo en caso de falta de tiempo, esfuerzo o necesidad. Cortamos los chorizos en trozos de unos 2 cm de grosor aproximadamente. Los colocamos en una fuente honda apta para microondas donde los chorizos quepan sin amontonarse para que se cocinen bien. Colocamos la tapa del microondas y cocinamos durante un minuto y medio a máxima potencia, 900 W.
Los sacamos del microondas y añadimos la sidra (la mitad de la cantidad que damos en los ingredientes), volvemos a remover y colocamos la tapa de nuevo. Cocinamos durante cinco minutos más a 900 W. Dejamos reposar y listos para servir y disfrutar.
Y por supuesto, chorizos al horno. Precalentamos el horno a 200º C. y pinchamos los chorizos por varios sitios con un cuchillo. Los ponemos enteros en la bandeja de horno y los rociamos con la media botella de sidra. Horneamos con calor arriba y abajo durante unos 20 o 25 minutos, cuando veamos que están bien hechos los sacamos y cortamos. Rociamos con la salsita y a disfrutar.
Bien decirles qué para un chorizo a la sidra perfecto El chorizo que usemos debe ser fresco, nada de curados. Y si ya es chorizo asturiano, mejor que mejor. Cuánto mejor calidad tenga el chorizo, más rico estará el plato final. En alguna ocasión, se puede añadir unas hojas de laurel, aunque es opcional, a mi la verdad, no me gusta mucho, prefiero la preparación más tradicional.
Debemos usar sidra natural para esta receta. Las sidras espumosas y otras variantes no valen para esto. Lo habitual es presentarlo en rodajas y servirlo en cazuelas de barro o de cerámica. Y aunque no creo, si te sobran chorizos, no te deshagas del líquido de cocción, ya que te servirá para volver a calentarlos y disfrutar de ellos como si estuvieran recién hechos. Podemos acompañar este chorizo a la sidra con unas patatas cocidas, aunque con pan y un vaso de sidra ya están de vicio.
17- BACALAO AL PIL PIL
De nuevo los vascos preparando bacalao como los reyes. Esta vez con una salsa verde que es para volverse loco. receta de bacalao al pilpil. El bacalao al pil pil es sin duda uno de los clásicos de la gastronomía vasca originada en el siglo XIX por un comerciante de Bilbao quien tuvo que ingeniárselas para darle preparación de una inusualmente alta cantidad de stock de bacalao.
El bacalao en salazón es uno de los alimentos «en conserva» más antiguos del que se tiene noticia, y tuvo una gran importancia social, permitiendo durante siglos disponer de reservas de proteínas a gran cantidad de la población europea. De hecho, fue alimento crucial para los navegantes españoles en sus viajes a través del Atlántico. Lo que sí queda claro es que está delicioso, pero no debemos comer una gran cantidad pues es un plato de alto contenido calórico. Os dejo con un plato top de cualquier cocinillas que se precie, todo un placer de la cocina vasca.
Recerta Ingredientes:
6 lomos generosos de bacalao desalado
1 Kg. o 1.3 Kg. aproximadamente, para 4 raciones
350 ml. de aceite de oliva virgen extra
4 dientes de ajo
De guarnición: 1 kg. de patatas especiales para cocer
Para el punto de sal opcional, un poco de sal si hiciese falta
Cómo hacer bacalao al pil pil.
La cocina es un arte es el País Vasco. Su gastronomía es extensa y variada, y todos conocemos sus marmitakos, purrusaldas, merluza a la vasca, sus increíbles pintxos y, cómo no, el bacalao al pil pil. El bacalao al pil pil se elabora tan sólo con tres ingredientes, bacalao, aceite y ajo, pudiéndose añadir guindilla si se desea. Gracias al excelente sabor del bacalao y a la presencia de ajos en la salsa no es necesario añadir sal. Espero que os guste esta receta y os animéis con ella en casa. Buen provecho.
Cómo desalar el bacalao
Para desalar los lomos de bacalao primero debemos trocearlos si son muy grandes. Os aconsejo que antes de empezar con la receta os leáis cómo desalar bacalao. Ahí tenéis todos los consejos para que la receta os salga de 10 puntos. Aún así aquí tenéis un pequeño resumen. Normalmente los lomos gruesos son los que se emplean en preparaciones con salsa y cocción más larga por ejemplo en salsa de tomate o a la vizcaína. Las partes más delgadas se usarán para la elaboración al pil-pil como en este caso. Para desalar el bacalao la pieza de pescado tiene que quedar cubierta de agua en abundancia. Las partes gruesas se desalarán durante 48 horas, con cambio de agua cada 6 horas aproximadamente. Las partes más finas se desalarán durante 36 horas, con cambio de agua cada 8 horas. Mientras el pescado se esté desalando debe permanecer a una temperatura entre 6 y 8 º C dentro del frigorífico. Ya que a temperatura ambiente puede fermentar.
Preparación del bacalao al pil pil
Necesitamos una cazuela ancha, de tal forma que podamos colocar todos los trozos de bacalao sin que se monten unos sobre otros. Ponemos la cazuela al fuego con todo el aceite y le añadimos los ajos en láminas. Cocinamos los ajos a fuego bajo, para que no se quemen, hasta que comiencen a dorarse. Tenemos que poner especial cuidado en no pasar demasiado los ajos pues si no quedarán demasiado tostados al final del proceso.
Si es necesario podemos retirarlos y añadirlos al final de la cocción del bacalao. El ajo ayuda a emulsionar la salsa que acompaña al plato junto con el aceite de oliva y las gelatinas propias de este pescado. Cuando los ajos comiencen a dorarse retiramos la cazuela del fuego y dejamos que el aceite se temple. No podemos echar el bacalao en el aceite caliente ya que comenzaría a freírse y no conseguiríamos la salsa pil pil. En cuanto el aceite esté templadito volvemos a poner la cazuela al fuego medio-bajo. Colocamos los lomos de bacalao asegurándonos de ponerlos con la piel para abajo. El bacalao tenemos que confitarlo, es decir, cocerlo a baja temperatura (entre 53-60 grados centígrados). Y mientras movemos la cazuela para crear la salsa, nunca se debe freír. El secreto de esta salsa es el movimiento constante de la cazuela que hará que el pescado previamente desalado suelte la gelatina. Se espese con el aceite y el ajo formando una fina emulsión.
Preparación del pil pil o gupilada
A este efecto de mover con la muñeca se le llama gupilada y es el rito que define «al pil-pil». En realidad podemos decir que lo que estamos haciendo es “batir “ el aceite con el ajo y la gelatina que aporta la piel del bacalao. Hay muchos truquillos entre los amantes de este plato para que salga perfecto. Tenemos los que dicen que el bacalao debe ir con la piel para arriba durante unos cinco minutos. Después se da la vuelta y se hace el pil-pil.
Otros por el contrario mencionan que el bacalao debe estar con la piel. Siempre en contacto para sacarle toda la gelatina y así emulsionar la salsa fácilmente. La verdad es que yo lo he preparado de las dos formas y no he notado una gran diferencia. Si el bacalao es bueno nos va a salir rico seguro. Dependiendo un poco de la cantidad de aceite que estemos utilizando nos llevará más o menos tiempo conseguir la salsa. Y tendremos más o menos cantidad de salsa. Cuando tengamos la salsa casi lograda y si los lomos son gruesos, puede ser necesario que les tengamos que dar la vuelta para que se cocinen por el otro lado.
Emplatado del bacalao al « pil-pil »
Colocamos los lomos de bacalao sobre su piel y cubrimos con un poco de la salsa al pil pil. En mi casa desde que era pequeño se suele servir además con unas patatas gallegas cocidas.Lo servimos bien caliente y con un poco de pan porque la salsa de esta receta es grandiosa. ¡Listo y a chuparse los dedos!
18- PAELLA VALENCIANA
Para muchos, la reina de todas las paellas. Su versión valenciana con pollo y conejo es inigualable. Digno embajador de la comida española en el mundo entero. paella valenciana. La paella, o paella valenciana, como se le conoce fuera de Valencia, es sin lugar a dudas uno de los platos más representativos de la gastronomía española. No se trata de un plato difícil de hacer, aunque es cierto que tiene sus pequeños trucos y peculiaridades.
Aprender a hacer buenas paellas es un proceso entretenido que nos llevará a entender, con la experiencia, los aspectos claves de su elaboración hasta que lleguemos al momento mágico comúnmente llamado “cogerle el punto a la paella” que es ese momento en el que nos sale una paella sorprendente, exquisita y ampliamente felicitada por nuestros comensales. A partir de entonces, esa deliciosa paella se convertirá en nuestra paella y será la que nos representará en el prestigioso club de paellas favoritas… porque todos tenemos una paella favorita y un paellero favorito.
La receta de la auténtica y tradicional paella valenciana que aquí os presentamos tiene un amplio detalle del paso a paso para asegurar un resultado espectacular. Cualquier persona experimentada en la realización de arroces secos, podrá seguir directamente los pasos del “resumen de preparación fácil”, sin embargo, aquellos que comiencen preparando sus primeras paellas, encontrarán en esta receta, una guía con todos los trucos y aspectos clave a considerar para garantizar el éxito en sus primeras paellas.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
400 gramos de Arroz Bomba
1 Kg. de pollo troceado
500 gramos de conejo troceado
200 gramos de judías verdes
100 gramos de garrofó fresco
100 gramos de tomate troceado
6 cucharadas de aceite de oliva
Unas hebras de azafrán
Pimentón rojo molido
Una ramita de romero
Sal
Elaboración de la Paella Valenciana
Vierte el aceite sobre la paella y enciende el fuego. Una vez el aceite esté caliente, añade el conejo y el pollo y sofríelos hasta que adquieran un color dorado. Recuerda darle vueltas a las piezas de carne para que se hagan uniformemente. A continuación, echa las verduras y rehógalas. Ahora vierte el tomate rallado y sofríelo del mismo modo, removiendo constantemente. Ahora es el turno del pimentón. Añádelo y remuévelo apenas un instante, enseguida tienes que verter el agua hasta los remaches de la paella para evitar que se queme. Añade el azafrán, el romero y la sal. Especias receta paella valenciana azafrán
Una vez que el agua rompa a hervir, déjala unos 5 minutos en ebullición con fuego vivo. A continuación, baja a fuego medio y déjala cocer entre 20 y 30 minutos. Aviva el fuego y añade el arroz. La forma tradicional de ponerlo es haciendo una cruz en el agua que está hirviendo y repartirlo de modo uniforme por la superficie del recipiente. Aprovecha ahora para probar y rectificar de sal. Mantén el fuego fuerte durante unos 10 minutos y reduce el fuego a la mitad durante un tiempo parecido hasta que el arroz quede en su punto de cocción.
Cómo cocinar una auténtica Paella Valenciana
Sabemos que no existe especialidad culinaria más popular en el mundo que la paella. Sin embargo, es muy difícil degustar una buena receta en cualquier lugar. En la terreta valoramos con orgullo nuestras señas de identidad, porque la paella es más que una comida: es un sentimiento. Aunque los cocineros se esfuerzan por diferenciar nuestro plato más internacional de las opciones identificadas como ‘arroz con cosas’, resulta hasta cómico ver las tropelías que se cometen no solo en el extranjero, sino en nuestras propias ciudades. ¿Estáis preparados para conocerlas? Para empezar, la paella valenciana es lo que su propio nombre indica: paella. Podemos hacer un arroz con rape y gambas, con costillas de cerdo y pimientos, con perdices o cocochas de bacalao seguramente exquisitos, pero no será una paella.
Regla número dos: el arroz nunca puede estar desnivelado durante el cocinado, ya que se cocerá más por un lado que por otro. Tampoco se remueve. ¿Por qué? Porque no queremos que suelte el almidón y se convierta en una pasta dura. En cuanto al recipiente, utilizaremos la paella, de la cual toma nombre el plato. ¡Los ingredientes son sagrados! Todo valenciano sabe que, junto al arroz, el agua, el aceite de oliva virgen extra, la sal y el azafrán en hebra, los alimentos tradicionales de la paella valenciana son el pollo, el conejo, la bajoqueta o ferradura judía verde plana y el garrofó judía blanca típica de la región.
Además, el tiempo de preparación la define. Una buena paella nunca se termina en menos de cuarenta minutos. Por eso, las variedades de arroz largo tipo Basmati quedan prohibidas. ¡Cuidado con los guisantes! Aunque cuentan con adeptos acérrimos en las cocinas, son el enemigo público de la paella valenciana. ¿Cuál es el problema? Los guisantes no casan con el resto de ingredientes ni con el caldo. En cuanto a la cebolla, de ella también nos olvidamos, pues provoca que se pase el arroz. El chorizo, la morcilla o la butifarra nos gustan para el aperitivo, de acuerdo, pero nunca se los añadiremos a la paella. Lo mismo ocurre con las salchichas. El marisco y los moluscos también generan polémica. Está bien que en nuestra paella destaquen algunas piezas, pero nunca debemos ocultar el arroz.
19- COCHINILLO SEGOVIANO AL HORNO
Este plato tienes que comerlo en Segovia, en alguno de sus tantos restaurantes especializados en servirlo. cochinillo segoviano. Receta de uno de asados más tradicionales y famosos de Castilla. Un asado que mezcla la textura crujiente y tostada de su piel con una carne jugosa que hace las delicias de cualquier invitado o comensal. Dado que en Segovia y Ávila es uno de los platos más famosos en todas las celebraciones importantes. Yo os propongo esta receta como una excelente opción para la comida de Navidad o cualquier otro festivo con los tuyos/as.
Es uno de los platos que triunfa el día de Navidad en el centro de España y en mi casa desde hace muchos años es el plato estrella del día 25 de Diciembre. No sólo es una receta para preparar exclusivamente en ese día. El cabrito al horno con el clásico cordero asado son una de esas comidas o asados familiares de domingo para todo el año. Es una de las recetas de Navidad con más éxito en el blog desde luego, lleva ya 6 años siendo la receta más vista del blog en estas fechas. La tradición manda que agua y sal sean los principales y únicos acompañantes del cochinillo segoviano y que su asado sea en horno de leña. Aunque esta receta tan básica se la vamos a dejar a los maestros segovianos pues es complicado conseguir ese punto que logran ellos.
Recetas Ingredientes:
Cochinillo asado al estilo de Segovia Puedes tachar los ingredientes que ya tienes imprimirlos para crear tu lista de la compra.
Para 6 personas
1 cochinillo entero de 3 semanas de 1,5 kg.
3 dientes de ajo.
100 ml. de vino blanco seco.
200 ml. de agua mineral.
50 gr. de manteca de cerdo.
1 ramillete de tomillo.
6 hojas de laurel.
unas ramas de laurel para hacer la base.
1 cucharadita de sal
Cómo Prepara el Cochinillo asado estilo Segoviano
Precalentaremos el horno a 200º?C. arriba y abajo. Lavaremos y secaremos bien el cochinillo con un paño. Frotaremos el cochinillo con ajo, sazonando el interior con sal y pimienta negra, y lo untaremos con manteca de cerdo. Lo colocaremos en una cazuela de barro, sobre unas ramas de laurel, con la piel para bajo y encima las hierbas aromáticas.
Verteremos el vino blanco y el vaso de agua mineral y lo introduciremos en el horno, durante 30 minutos. Trascurrido ese tiempo, le daremos la vuelta, poniéndolo con la piel hacia arriba y la pincharemos con una aguja, sin que llegue a la carne solo la piel para que no salgan ampollas. Mientras se está asando, lo iremos pintando de vez en cuando con manteca fundida, toda la superficie, hasta que esté bien dorado tardará aproximadamente unos 90 minutos más. Lo presentaremos en la misma cazuela de barro donde se ha cocinado.
20- GAZPACHO ANDALUZ
Cuando llega el verano, llega el gazpacho, y nuevamente los andaluces se destacan en la cocina con esta delicia refrescante. gazpacho. Gazpacho andaluz es una de las recetas de verano más ricas y nutritivas de la cocina española, y especialmente en la época del verano, cuando el calor aprieta, es una receta refrescante y que nos aporta una gran cantidad de vitaminas, minerales y antioxidantes. Debido a la cantidad de hortalizas y verduras que lleva, el gazpacho es un buen aliado para que los niños ingieran estos alimentos, por ejemplo tomándolo en vaso como un zumo. Podéis comenzar con poco vinagre al principio, para que se vayan acostumbrando a este sabor, que les puede resultar más fuerte.
Receta Ingredientes:
Ingredientes del gazpacho
1 kilo de tomates maduros
1 pimiento verde
1 pepino
1 cebolleta o ¼ de cebolla
1 diente de ajo
1 rebanada de pan unos 50 g
1 cucharadita de sal
2 cucharadas de vinagre
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Receta de gazpacho
Lavamos muy bien los tomates y el pimiento ya que los vamos a triturar con piel. Ponemos en el vaso de la batidora o si tenéis un robot de cocina o vaso americano, el pimiento troceado, el tomate troceado, el pepino pelado y troceado, el pan y la cebolleta pelada y en cuartos. Añadimos la sal y el vinagre Trituramos todo durante varios minutos hasta obtener una crema muy fina. Añadimos un poco de aceite de oliva virgen extra y mezclamos de nuevo. En este momento lo podéis servir así o si lo queréis más líquido, añadid agua y mezclad todo de nuevo. Ya sólo queda meterlo en el frigorífico y dejar que se enfríe. Mezclar de nuevo a la hora de servir.
Origen del gazpacho andaluz
En España no necesita ninguna presentación a esta receta, pero como sois muchos los que nos seguís desde otros países, os vamos a explicar brevemente qué es el gazpacho. El gazpacho es una sopa fría con ingredientes como el aceite de oliva, vinagre, pan y hortalizas crudas. Siendo una receta tradicional, hay muchas variantes. Por ejemplo la cebolla es un ingrediente que no todos ponen, lo mismo que el pan. Suele servirse fresco en los meses calurosos de verano.
Origen del gazpacho es desconocido, aunque tradicionalmente se le ha considerado un plato del interior de Andalucía, donde el aceite de oliva y los productos de la huerta son abundantes, y los veranos muy secos y calurosos. Por esta razón se le conoce comúnmente como gazpacho andaluz. Aunque su evolución a lo largo del tiempo ha ido dejando variantes en diferentes zonas de España, como así también en Portugal.
21- CROQUETAS DE BACALAO
Hay muchos tipos de croqueta, las clásicas de jamón, de pollo, de morcilla, incluso de cocido. Pero qué va, las más divertidas son las de bacalao. croquetas. Las croquetas de bacalao son una verdadera delicia, suaves por dentro y con un buen empanado crujiente por fuera, un clásico de las recetas de croquetas. El bacalao es muy típico consumirlo en semana santa pero no entiendo porqué ya que podemos consumirlo durante todo el año, es más, recomiendo hacerlo ya que el precio disminuye muchísimo y es buena opción para meter en tu dieta diaria. No hay comida que se precie en España.
Receta Ingredientes:
Croquetas de Bacalao Caseras
1 litro de leche entera
100 gramos de harina
1 chorrito de aceite de oliva virgen extra
100 gramos de mantequilla
Nuez moscada
250 gramos de bacalao desmigado
Sal
Pimienta
Un par de huevos para rebozar
Pan rallado
Perejil picado es opcional
Preparación de Croquetas de Bacalao
En una sartén ponemos a derretir la mantequilla con un chorrito de aceite de oliva. Rehogamos en la mantequilla derretida la harina. Si queréis que no salgan grumos la podéis pasar por un colador. Eso ayudará. Una vez cocinada la harina agregamos poco a poco la leche. Si añadimos la leche templada o del tiempo también ayudaremos a que no salgan grumos. Debe salir una salsa bechamel suave y no demasiado espesa.
Cocinamos unos 15 minutos. Seguidamente agregamos el bacalao desmigado, nuez moscada, pimienta negra al gusto y rectificamos de sal. Cuidado con la sal porque el bacalao ya aportará bastante. Ponemos en una fuente y dejamos enfriar con un papel film por encima para que no se seque. Cuando esté frío preparamos un plato con huevo batido y pan rallado ya que es hora de rebozar las croquetas. Es hora de darle forma a las croquetas. Cogemos porciones y seguidamente las pasamos por huevo y pan rallado. Las freímos en abundante aceite de oliva y las pasamos a un papel absorbente o papel de cocina para quitar el exceso de aceite. Listas después para servir, y degustar las croquetas de Bacalao.
22- SALMOREJO CORDOBÉS
Deliciosa sopa andaluza que lleva dando vueltas dentro de la gastronomía española desde mucho antes del califato. Es familia del gazpacho. receta de salmorejo cordobés. El origen de esta sopa fría se ha perdido a lo largo de la historia, aunque sí sabemos que las primeras versiones del salmorejo eran de hecho "salmorejo blanco", ya que el tomate no estaba entre sus ingredientes. De hecho, el tomate no apareció en España hasta que Colón los trajo desde América Latina.
Los romanos trajeron a España con ellos trigo y otros subproductos como el pan y una sopa hecha con harina de trigo y agua salada, consumida por legionarios y gente de clase baja. Los romanos también bebían una bebida llamada posca, una mezcla de partes iguales de agua y vinagre, especiada con hierbas, en la que a veces mojaban pan. Este puede ser el origen de esta popular sopa, aunque hay ejemplos más antiguos que datan del periodo anterior a la Hispania romana, cuyos ingredientes eran pan humedecido, ajo y vinagre.
Pero una vez que se importó el tomate a Europa, fue poco a poco ganando aceptación y se convirtió en un ingrediente muy popular en la cocina española. En muchos platos se usa por su intenso color rojo. Esto dio lugar a la evolución natural del salmorejo, y el tomate es ahora uno de sus ingredientes principales, aun que esto ocurrió a principios del siglo XX. El salmorejo es hoy famoso por su color rojo-rosado, lo que ha llevado a un renovado interés por la sopa en algunos de los restaurantes más exclusivos de España. Muchos chefs comienzan a ver las propiedades artísticas de este plato y han comenzado a usarlo como decoración de muchos de sus platos y creaciones.
Receta Ingredientes:
Receta de Salmorejo
1 kilo de tomates
200 gramos de miga de pan del día anterior
250 ml de aceite de oliva
sal y vinagre
un diente de ajo
1 huevo cocido y jamón serrano en virutas opcional
Cómo es la preparación de Salmorejo Cordobés
Añade las migas de pan, el vinagre y el aceite de oliva en un recipiente para que se empape bien Añade los tomates mejor pelados, el diente de ajo y sal. Mézclalo todo hasta que tenga una textura suave y homogénea.. El salmorejo está mejor servido frío, así que enfríalo hasta que alcance la temperatura deseada Cuando lo sirvas en cuencos puedes añadirle unas pocas viorutas de huevo cocido y jamón
23- COCIDO MARAGATO
Este delicioso cocido, típico de León, se sirve en 3 partes: primero la carne, luego los garbanzos y por último, si sobreviviste, la sopa. cocido maragato. El cocido maragato es una receta que procede de la comarca leonesa de la Maragatería . Es famoso en el mundo entero por comerse en el orden inverso a cualquier otro cocido, por su impresionante relleno y sobre todo porque está buenísimo. Invertir el orden es ya de por sí una genialidad maragata, ¿no os parece? Además, “si tiene que sobrar algo, que sobre la sopa” dicen los maragatos de su cocido El cocido maragato, como todo buen cocido, también se presenta en tres tiempos o vuelcos.
Empezamos en primer lugar con la ración, en la que incluye de una generosa variedad de carnes de cerdo, ternera y pollo, morcilla de León y por supuesto acompañadas por el espectacular relleno del cocido. Continuamos con los garbanzos a ser posible de la variedad pico pardal acompañados por repollo y finalizamos con la sopa de fideos o de pan. Origen del cocido maragato Hay varias teorías sobre el origen del cocido maragato. La que más nos convence es que se lo debemos a los arrieros maragatos. El origen de esta tradición se remonta a estos famosos transportistas del noroeste español que desaparecieron con la aparición del tren. Los arrieros maragatos tenían por costumbre comer la carne que portaban en sus viajes y terminar su comida con una sopa caliente en alguna venta del camino.
Recetas Ingredientes:
Ingredientes
1 muslo de pollo
200 gramos de cecina
200 gramos de lacón
150 gramos de tocino
1 pie de cerdo
1 oreja de cerdo
1/2 kilo de garbanzos
150 gramos de panceta
300 gramos de morcillo de ternera
3 chorizos
3 morcillas
1 hueso de jamón
1/2 berza repollo o col
2 patatas
2 dientes de ajo
Aceite vegetal
Pimentón dulce al gusto
Sal al gusto
Agua
Elaboración del Cocido Maragato
Como lo hemos dicho anteriormente, antes de comenzar la preparación de este plato se deben haber remojado los garbanzos durante la noche anterior a su cocción. Antes de utilizarlos, habrá que enjuagarlos con agua fresca. En el caso de las piezas de carnes, ya deben estar bien limpias y listas para su uso. Dicho esto, pasemos a la cocción de los ingredientes para el cocido. Vamos a necesitar una olla de buena tamaño, en la que pondremos a calentar un poco de agua. Una vez caliente, añadiremos el muslo de pollo desgrasado, el lacón previamente remojado, el tocino, el pie y la oreja de cerdo, la panceta, el morcillo, el hueso de jamón. Si hace falta, agregaremos más agua hasta cubrir todos los ingredientes, y entonces dejaremos que se cocinen a fuego bajo, hasta que empiecen a hervir.
En este punto, retiraremos con una cuchara el exceso de grasa que se haya acumulado en la superficie del agua del cocción. Luego, vamos a agregar a la olla los garbanzos que hemos remojado y enjuagado previamente. Al igual que antes, si hace falta agregaremos más agua hasta sobrepasar el nivel de todos los sólidos. Si quieres que la cocción avance más rápido, añade directamente agua caliente. Cuando los ingredientes empiecen a hervir de nuevo, comenzaremos a contar 3 horas y media de tiempo de cocción.
Mientras se cocinan las carnes y los garbanzos, aprovecharemos el tiempo para hacernos cargo de las patatas y la berza. En el caso de la primera, la lavaremos bien y la trocearemos en forma de cintas, con un cuchillo bien afilado sobre una tabla para picar. En el caso de las patatas, las pelaremos y las picaremos en trozos del tamaño de un bocado. Lo siguiente será calentar otra cazuela con agua. Una vez que esté hirviendo, agregaremos en ella la berza picada, con un toque de sal al gusto. Vamos a dejar que se cocine durante 20 minutos. Pasado el tiempo de cocción de la berza, lo escurriremos y lo colocaremos en un recipiente. No hemos de desechar el agua, que irá a la olla de cocción de las carnes y garbanzos, para aportar gusto y compensar el líquido que se ha evaporado.
Cuando le quede media hora de cocción a las carnes y garbanzos, agregaremos las papas picadas, las morcillas y los chorizos. Dejaremos que se cocinen con el resto de los ingredientes, hasta el final del tiempo indicado. Aparte, vamos a pelar los dientes de ajo y picarlos en trocitos menudos. Luego, calentaremos un chorrito de aceite en una sartén, a fuego bajo. Una vez caliente, agregaremos el ajo. Dejaremos que se cocine durante algunos minutos, para que tome un poco de color. Luego lo sazonaremos con un toque de pimentón dulce y una pizca de sal. Acto seguido, añadiremos la berza, mezclaremos todo y dejaremos que se cocine durante algunos minutos más. Probaremos el repollo, corregiremos la sazón si es necesario, y lo dejaremos listo para degustar .
24- CALÇOTADA
Los Calçots son prácticamente una institución en Catalunya. Como cualquier comida hecha al carbón, es maravillosa. Se acompaña de la conocida salsa romesco. Calcotada. Los Calçots Las Cebollas Catalanas Pues básicamente se trata de una cebolla de forma alargada que tiene su epicentro de producción en Tarragona. Los calçots o calsots, son uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía catalana, pero desde hace un tiempo han trascendido más allá, y ya somos cada vez más los que los disfrutamos en otras latitudes. Se cultivan bajo tierra, plantados en surcos de tierra que se “calça” sobre estas cebolletas para mantenerlas tapadas mientras crecen, y de ahí parece que les viene dado el nombre de calçots. Al comerlos, tienen una textura tierna y un sabor dulce. Cuentan que se descubrieron casi por casualidad, cuando un campesino se percató de que esta cebolla blanca, cocinada al fuego y acompañada de una salsa, estaba realmente buena. Lo demás es historia, y el calçot se convirtió en lo que es hoy, un pequeño manjar asequible para todos.
El origen de los calçots es, todavía hoy, una incógnita. "Se dice" que el origen está en Valls Tarragona, aunque recientemente se ha descubierto una pintura en Brigetio Hungría que daría validez a la teoría que en el Imperio Romano ya se consumían. En este punto hablaremos de ambas posibilidades, sin ningún ánimo de generar polémica. Se dice que el descubrimiento de los calçots se debe a un agricultor de Valls apodado "Xat de Benaiges" pronunciado "Chat", quien, a finales del siglo XIX, quemó unas cebollas viejas en el fuego. En vez de tirarlas las peló y probó, descubriendo que su interior era muy dulce y poco fibroso. No hay ninguna documentación que acredite esta historia. Se ha solicitado información de carácter fiable a la Cámara de Comercio de Valls, y a la IGP "Calçot de Valls", y no hemos obtenido ninguna respuesta concluyente. Sin embargo, y gracias al archivo municipal de Valls, sí que disponemos de documentación que acredita la existencia de los calçots en esta población a principios del siglo XX. No así de la existencia del "Xat de Benaiges", una historia que empezó a circular en los años 40 del siglo pasado.
Receta Ingredientes:
1/6 Vichyssoise de calçots
Ingredientes
20 calçots
1 cebolla
2 patatas
1 bote de crema de coco para cocinar
aceite de oliva virgen extra
sal marina
pimienta negra al gusto
agua mineral
cebollino picado
Receta de Vichyssoise calçots
Para limpiar los calçots, cortar los extremos. Hacer un corte vertical y retirar la primera capa del calçot. Lavar bien con agua y cortar en rodajas. Pelar y cortar la cebolla en cuadrados pequeños. Pelar y cortar las patatas en trozos.
Añadir un chorro de aceite en una olla y sofreír la cebolla unos 7 minutos hasta que esté tierna. Añadir la patata y los calçots y saltear 4 minutos más. Agregar agua hasta cubrir las verduras y cocer unos 10 minutos. Después, añadir la crema de coco y dejar cocer 5 minutos más. Detener el fuego y triturar hasta conseguir una textura suave y homogénea. Dejar enfriar y servir la crema fría con cebollino picado.
Los calçots son un alimento con un contenido muy alto de agua y fibra y, por ello, su aporte energético es muy bajo. Además, también contienen minerales como el potasio y el fósforo, vitaminas como la B9 y son ricos en derivados del azufre, unos componentes beneficiosos para el hígado, con propiedades antisépticas y que ayudan a eliminar productos nocivos del organismo como, por ejemplo, los metales pesados. En la cocina los podemos preparar de muchas maneras: salteados, al horno, al vapor… Cocciones que potenciarán su textura tierna y que aportarán un sabor suave. Además, son mucho más saludables que las barbacoas.
25- SOPA DE AJO CASTELLANA
La sopa de ajo es sencilla y deliciosa. Es un plato muy económico de preparar, hecho a base de pan, huevos, ajo y caldo o agua. como hacer sopa de ajo. La sopa castellana o sopa de ajo, es uno de esos platos tradicionales de la cocina española que sienta muy bien cuando el tiempo empeora. Esta receta es ideal para el invierno o cualquier ocasión en la que quieras entrar en calor y disfrutar de un buen plato de sopa. Con pocos ingredientes y todos ellos muy básicos prepararemos una deliciosa y reconfortante sopa castellana increíble! Es una receta de aprovechamiento en toda regla, ya que utilizaremos el pan que se nos quedó duro el día anterior, junto con un poco de chorizo, jamón y ajo.
Receta Ingredientes:
INGREDIENTES
1,5 litros de caldo de pollo o agua
50 gr chorizo en dados
50 gr jamón serrano en dados
4 dientes de ajo
1 cucharada de pimentón dulce
1-2 hojas de laurel
rebanadas de pan de pueblo duro del día anterior
4 huevos uno por persona
sal
aceite de oliva virgen
Cómo preparar sopa de ajo castellana
Pelar y cortar los ajos en láminas no muy finas. En un poco de aceite de oliva virgen 2-3 cucharadas caliente, sofreír los ajos hasta que queden un poco dorados. Añadir el pan cortado, según su tamaño necesitarás como 2-3 rebanadas por comensal, y tostar junto con los ajos. De este modo el pan absorberá todo su sabor. Remover un poco. A continuación, agregar el jamón y el chorizo cortado en dados gruesos. Remover y sofreír 1-2 minutos. Echar el laurel, y después el pimentón fuera del fuego. Remover. En este momento, vertemos el caldo de pollo y dejamos cocer 15 minutos. Antes de servir, y con la sopa aún caliente, escalfaremos dentro de ella, los huevos, uno por comensal y dejaremos cocer 5 minutos más. La clara debe quedar cocida y la yema líquida por dentro. Servir la sopa bien caliente con un huevo escalfado por encima. Enriqueceremos nuestra sopa con caldo de pollo en vez de agua solamente, pero si no quieres una sopa tan intensa de sabor, puedes optar por añadir la mitad de caldo de pollo y la mitad de agua. En el último momento, escalfaremos en el sopa caliente un par de huevos, para completar este estupendo plato. Para degustar esta estupenda sopa de ajo tradicional española
26- CORDERO LECHAL AL HORNO
El cordero es alimento de dioses. Cualquier manera de prepararlo es magnífica. El cordero lechal, o sea muy jovencito hecho al horno, acompañado con algunas patatas es…indescriptible. cordero lechal. La paletilla de cordero lechal al horno es un plato muy equilibrado, ya que no lleva apenas aceite y el horneado es la mejor técnica para que esta carne tan tierna quede muy jugosa y crujiente por fuera. Le hemos hecho una guarnición clásica de patatas panaderas con cebolla roja, ajo y un buen chorro de vino blanco, no necesita más para acompañar al cordero! La primavera es la época de mayor producción de carne de cordero, y cuando la encontrarás en su punto óptimo y a mejor precio. Aunque la puedes comprar en el mercado todo el año, pero es en esta estación cuando su sabor es más suave y sabroso.
La receta del lechazo asado es tradicional de la cocina castellana. Se suele preparar para fiestas o como un plato especial los fines de semana. Lo típico es ir a comer lechazo a las bodegas, por ejemplo, pero con esta receta podremos disfrutar de un buen lechazo asado en casa. Llamamos lechazo o cordero lechal al cordero que sólo ha tomado leche de la madre y aún está sin destetar. Se suelen cocinar en hornos de leña en cazuelas de barro, lo que le da un gusto muy especial. Como vallisoletana que soy he tenido la suerte de comer lechazo en muchos sitios en mi ciudad, aunque si tuviera que decantarme por uno de ellos ese sería las bodegas de Fuensaldaña. Es un lugar mágico: un conjunto de bodegas, excavadas hacia el siglo XIII, donde se guardaba en origen vino y otros alimentos para conservarlos. Desde 1969 son diferentes restaurantes los que tienen estas bodegas que disponen de salones-comedor para el disfrute de los comensales. Se suelen servir platos tradicionales de cocina castellana además de embutidos, quesos y productos de la zona. Lo más tradicional es su lechazo asado y el vino de bodega.
Receta Ingredientes:
1 paletilla de cordero lechal de 600 gr
1-2 dientes de ajo
Sal y pimienta negra molida
Aceite de Oliva Virgen Extra
Ingredientes con Patatas Panaderas
4-5 patatas en rodajas de 1/2 cm
3 dientes de ajo
1/2 cebolla roja
Un buen chorreón de vino blanco
1/2 vaso de agua 125 ml
Sal y pimienta negra molida
Aceite de Oliva Virgen Extra
La Preparación de Cordero Lechal
Preparamos primero la paletilla de cordero, frotándole por encima con los ajos y salpimentado después. Reservamos. En una fuente honda para horno, hacemos una cama de patatas cortadas en rodajas, encima la cebolla en juliana y los dientes de ajo en láminas gruesas. Salpimentamos. Vertemos el vino blanco por encima y un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra . Colocamos encima de las patatas nuestra paletilla con la parte inferior hacia arriba y añadimos aceite de oliva virgen extra un poco por ambas caras.
Una vez listo, precalentamos el horno a 240 º durante 20 minutos con calor arriba y abajo. Horneamos a 240 º durante 45 minutos con calor arriba y abajo, a media altura y hasta que la superficie de la paletilla esté dorada. A los 30 minutos de cocción añadimos el agua por encima del cordero. A los 45 minutos de cocción, damos la vuelta a la paletilla colocando la parte superior hacia arriba, y vertemos por encima un poco de su propio jugo que haya soltado. Seguimos el horneado a 240 º otros 20-30 minutos más, hasta conseguir un buen dorado. La textura por encima debe quedar crujiente y el interior tierno y jugoso listo para degustar . El cordero es uno de los alimentos más gustosos y exquisitos de nuestra gastronomía tradicional, por ser una carne muy tierna y jugosa; y también por su alto poder nutritivo, fuente de proteínas, Zinc y vitaminas del grupo B.
27- CALDO GALLEGO
Esta deliciosa sopa suele prepararse con berzas, repollos o grelos. En algunos casos le ponen algo de chorizo gallego o panceta o ambas. receta de caldo gallego. El Caldo gallego es el mejor antídoto contra el frío que se emplea en Galicia desde hace muchas generaciones, siendo uno de los platos más típicos de nuestra gastronomía. La receta variará según lo que se disponga en cada casa. Hay algo característicos no imprescindible, se puede hacer con repollo, berzas.. y son los “Grelos”, verdura típica de esta región y que sorprendentemente he visto a la venta en una tienda de comestibles de un pequeño pueblo francés y que di a pensar sería propiedad de un gallego emigrado.
Los caldos con legumbres, verduras y carnes son recetas muy antiguas, ya en la prehistoria se preparaban guisos con agua, vegetales y huesos de animales. En todos los países del mundo tienen recetas similares y en España en cada zona existe un cocido diferente como el madrileño o el montañés. El pote gallego tomó este nombre gracias al recipiente donde se cocina. Durante siglos el caldo gallego, junto al lacón y los grelos fueron alimentos de subsistencia para muchas familias. Los grelos son una verdura de la familia de los nabos que florecen en invierno, los brotes o hojas son lo que se llama grelos, protagonistas de muchos guisos gallegos. De estas verduras se aprovecha todo, desde la raíz para dar de comer a los animales, y las hojas y tallos para cocinar. Cuando no había grelos se usaban berzas, repollo o calabaza. El unto es un ingrediente característico de estos caldos, grasa de cerdo, pero se puede sustituir por un trocito de tocino si la receta pide 40 g pues esta cantidad de tocino.
Receta Ingredientes:
1 kg de grelos
4 litros de agua
350 gr. de panceta salada
50 gr. de unto
250 gr. de habas a remojo del día anterior
600 gr. de patatas
Sal
Aceite de Oliva
Preparación de Caldo Gallego.
Si la panceta está muy salada debes ponerla a remojo la noche anterior y cambiarle el agua al menos una vez. Vierte el agua en una olla y añade la panceta, y las habas, cuece a fuego medio durante aproximadamente media hora. Comprueba el punto de sal por si la panceta aún estuviese muy salada y hubiese salado el agua y añade sal. Retira el unto . Cuece unos 20 minutos.
El caldo gallego es con diferencia uno de los platos de la gastronomía gallega que tradicionalmente más se ha consumido durante generaciones. Hoy en día un buen plato de caldo gallego para los días de frío es un auténtico manjar, pero hace no tantos años era la comida de todos los días en muchos hogares y por eso, aún a día de hoy, no es tan apreciado por muchas personas de generaciones anteriores.
28- PULPO A LA GALLEGA
Una de las mayores obras de arte que tienen los gallegos. Inigualable dentro de la comida española. Pulpo, patatas, pimentón y mucho aceite de oliva. pulpo a la gallega. Cómo preparar pulpo a la gallega. Es un buen comienzo para esta nueva receta de pulpo, quien no haya probado el pulpo a la gallega está perdiéndose unos de los platos más representativos nuestra gastronomía. El pulpo a la gallega tradicionalmente se elabora cociendo el pulpo en una olla de cobre una vez que se ha limpiado. Hay muchas formas de cocerlo y podéis encontrar en la red numerosos consejos para que quede tierno y en su punto, unos ciertos y otros no tanto.
Receta Ingredientes:
1 pulpo de 2 a 3 kg.
1 kg de patatas gallegas
Sal gruesa al gusto
Pimentón dulce o picante
o mixto, depende del gusto de cada uno
Aceite de oliva virgen extra
Agua
Preparación de Pulpo a la Gallega
Limpiar el Pulpo
Lo primero es limpiar el pulpo eliminando las vísceras; para ello le damos la vuelta a la cabeza y retiramos todo el interior, y con las tijeras cortamos la boca o pico. Después enjuagamos las patas, una a una, bajo el grifo de agua. Una vez limpio lo congelamos entre 48 y 72 horas. Con este truco lograremos que el pulpo no quede duro. Lo descongelamos y continuamos con el proceso. Todos estos pasos podemos evitarlos si compramos el pulpo congelado.
Cocer el Pulpo
Ponemos una olla grande con agua a hervir sin agregar sal Cuando comience a hervir, cogemos el pulpo por la cabeza e introducimos las patas unos segundos, sacamos y repetimos la operación tres o cuatro veces. Hemos «asustado» al pulpo para que no se le desprenda la piel durante la cocción. Metemos el pulpo en el agua debe estar totalmente sumergido y tapamos. El tiempo de cocción dependerá del tamaño del animal, el nuestro que pesaba 1 kilo y medio, con 25 minutos estaba tierno, lo cual comprobamos con una brocheta o palillo. Dejamos otros 20 minutos, ya sin fuego.
Preparación de las patatas
Ponemos a hervir agua en otra cazuela, esta vez con sal. Cuando hierva echamos las patatas con cáscara, previamente las lavamos muy bien con un cepillo. El tiempo de cocción depende del tamaño, hay que pincharlas con una brocheta para ver si están tiernas. Cuando estén hechas escurrimos y dejamos entibiar para poder pelar. Pelamos y cortamos en rodajas.
Presentar el pulpo a la gallega
Pulpo a la gallega cómo se prepara Colocamos las rodajas de patatas en un plato de madera Cortamos el pulpo con las tijeras por encima Espolvoreamos con pimentón, podéis ponerlo dulce, añadir un poco de picante, sal gruesa y un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra. Se suele servir templado, en plato de madera y tomar con palillos, ¿os animáis a hacer en casa este Pulpo a la gallega? A continuación os dejamos los trucos para preparar esta receta de pulpo a la gallega y que sea un completo agrado de los comensales.
29- EMPANADA GALLEGA
Otro clásico de la cocina gallega. Suelen estar rellenas de atún. Si buscas bien, las puedes conseguir de sardinas o pulpo, y por favor, ¡pruébalas! empanada gallega. Esta receta está hecha para todos los que se preguntan cómo hacer empanada gallega sin pasar horas y horas en la cocina. Por eso pensamos en una explicación de manera detallada, poniendo atención sobre todo en lo que algunos piensan más complicado, que es preparar la masa para empanada gallega. Estás aquí: Inicio / Recetas saladas / Aperitivos y tapas / Cómo hacer empanada gallega tradicional Cómo hacer empanada gallega tradicional Empanada gallega tradicional La empanada gallega es una de las joyas de nuestra gastronomía.
Una receta de origen humilde que, cuando está correctamente elaborada y con ingredientes de calidad, puede considerarse todo un bocado gourmet. Aunque existen multitud de versiones, a cual más deliciosa, la empanada gallega tradicional suele estar rellena de atún y pimientos. Esta es la receta que hoy quiero compartir contigo. Hacer empanada gallega casera es mucho más fácil de lo que parece, aunque es cierto que hay que cogerle el punto. No obstante, partiendo de una masa elaborada con algo de paciencia y un buen relleno tenemos el éxito prácticamente asegurado. Y, por supuesto, la satisfacción de haber preparado un riquísimo plato tradicional con nuestras propias manos.
Receta Ingredientes
500 gr de harina
25 gr de levadura fresca de panadería
160 ml de agua
50 ml de vino blanco
1 pizca de sal
Aceite del sofrito
1/2 kilo de cebollas
350 gr de atún escurrido
4 cucharadas de tomate frito
Pimentón dulce
Aceite de oliva virgen extra
1 huevo
La Masa de Empanada Tradicional Gallega
Cómo hacer masa de empanada gallega es el meollo de esta preparación. Lo más importante que hay que saber, es que tradicionalmente la harina que se utiliza es la harina de fuerza, para lograr una mayor consistencia que con la harina de trigo común la que se consigue en supermercados. La diferencia entre ambas es la concentración de gluten. Como la harina de fuerza cuenta con más gluten, necesita más agua para preparar la masa.
La Elaboración de la Masa de Empanada
En un recipiente, verter la levadura con el agua, y mover hasta que la primera se disuelva. Dejar reposar un momento. Mientras tanto, en otro recipiente, verter la harina y la sal, y mover para mezclar. Hacer un hoyo en el medio de la harina, y añadir el agua con la levadura. Lo que sigue es mezclar y mezclar con las manos, hasta obtener una pasta homogénea No es obligatorio hacer este paso en un recipiente. También se puede pasar la harina directamente a una mesa o superficie de trabajo, o para los amantes de la tecnología, hacerse la vida fácil con una batidora eléctrica. A esa pasta de textura uniforme habrá que sumarle el aceite. De nuevo, hay que amasar y amasar, hasta que la grasa esté bien integrada y se llegue al punto en el que no se quede pegada a las manos.
Ahora vamos a acomodar esta masa para un tiempo de reposo. Hay que ponerla sobre un recipiente engrasado, taparla con un trapo, y dejarla así durante una hora. Pasada esa hora de reposo, la masa de la empanada debería haber aumentado considerablemente su tamaño, gracias al efecto de la levadura. Ahora sólo hay que dividirla en dos partes iguales: una para la capa de arriba de la empanada, y otra para la parte de abajo. Acomodar la masa de una de las mitades sobre una mesa o superficie para amasar. Estirar con un rodillo hasta lograr un grosor uniforme. Ahora necesitamos la bandeja en la que se va a hornear la empanada. Hay que engrasarla, espolvorearla con un poco de harina, y acomodarle encima la masa que viene de aplanarse con el rodillo. Con un tenedor, hacer agujeros en esta masa, para evitar que se formen bolsas de aire con el calor. Cuando el guiso esté listo más abajo te explico cómo hacerlo, habrá que esparcirlo sobre esa capa de masa.
El procedimiento de extendido con el rodillo se repetirá para la otra mitad de la masa. Con ella se cubrirá la primera parte, una vez acomodado el guiso de relleno. Hay que doblar los extremos de la capa de la parte inferior, para cerrar el conjunto, al estilo de una gran empanada. Hacer agujeros con un tenedor, esta vez en la capa de masa superior. Nos queda un ingrediente por utilizar: el huevo. Con un pincel de cocina, vamos a usarlo para “pintar la masa”, antes de meter la empanada al horno. Meter la empanada al horno precalentado por 40 minutos, a 180 grados centígrados.
Empanada Gallega de Atún
La receta de empanada gallega de atún es una consentida de las fiestas y reuniones de Galicia. También es común encontrarla en bares y restaurantes en toda España a modo de ración o incluso como tapa al pedir alguna bebida. En época de cuaresma se vuelve muy popular entre los creyentes, ya que sustituye perfectamente cualquier carne roja. Cómo hacer empanada tradicional gallega de atún usando conserva de este pescado. ¿Así, o más fácil?
Ingredientes:
Atún en conserva: 400 gramos.
Cebollas: dos piezas.
Tomate frito: 150 gramos.
Huevo: una pieza.
Pimiento verde: una pieza.
Pimentón dulce: 2 cucharadas.
Preparación del relleno:
Poner a hervir agua en una cacerola pequeña.
Una vez el agua hirviendo, sumergir el huevo y dejarlo cocer por diez minutos cuando se termine el tiempo, apartar y reservar el huevo. Mientras tanto, pelar las cebollas y cortarlas en cubos. Lavar el pimiento, retirar las semillas, la cabeza y las partes blancas internas. Cortar en tiras delgadas. En un sartén, verter un chorro de aceite, y pochar la cebolla. Esperar dos minutos desde que ésta comience a cocerse y sumar el pimiento cortado, con una pizca de sal. Cuando la cebolla empiece a verse transparente, agregar el tomate frito y el pimiento dulce. Remover todo para mezclar. Abrir las conservas de atún y escurrir bien (pero de verdad, muy bien) el pescado. Agregar el atún desmigajado al sartén. Mezclar con el resto y dejar cocinar por 8 minutos, a fuego bajo.
Durante este tiempo, aprovechar para retirar la cáscara del huevo reservado, y cortarlo en rodajas o en cubos. Una vez pasados los ocho minutos, apagar el guiso y distribuirlo sobre la primera mitad de la masa, que ya está extendida sobre su bandeja. Antes de cubrir el relleno con la segunda mitad de la masa, distribuir los pedazos de huevo cocido sobre el atún. Si has probado alguna vez una empanada gallega auténtica, seguramente hayas comprobado que las que se fabrican de manera industrial no tienen nada que ver. Para que no tengas más morriña voy a explicarte paso a paso cómo hacer masa para empanada de manera fácil y cómo preparar un relleno de empanada para chuparse los dedos.
30- HORNAZO DE SALAMANCA
El hornazo es un invento genial. Es una especie de pastel o empanada muy típico de Salamanca que se rellena con jamón, chorizo, lomo y demás cosas deliciosas que tanto nos gusta a todos. hornazo de salamanca. El hornazo de Salamanca, uno de los productos más famosos y típicos de la gastronomía salmantina, es una empanada que se prepara con una sencilla masa casera y que, como no podía ser de otra manera, está rellena de productos de la tierra: filetes de cerdo y buen embutido. Además, el hornazo de Salamanca tiene un día en el que es el principal protagonista, el Lunes de Aguas, que se celebra en la ciudad el lunes siguiente al Lunes de Pascua. En ese día, los salmantinos salen al campo acompañados de familiares y amigos para compartir una merienda en la que, por supuesto, no puede faltar un buen trozo de hornazo.
Receta Ingredientes:
Tiempo de preparación: 1 hora y 10 minutos
Tiempo de cocción: 50 minutos
Tiempo total: 2 horas
Raciones: 6
Categoría: plato principal
Tipo de cocina: salmantina
Calorías: 277 kcal por cada 100 g
Ingredientes del hornazo de Salamanca para 6 personas
Para la masa:
1 kg de harina de trigo
450 ml de agua tibia
2 cucharaditas de sal
25 g de levadura fresca
2 cucharadas de Aceite
2 cucharadas de pimentón dulce
Para el relleno:
360 g de lomo de cerdo adobado 8 filetes
90 g de jamón serrano 6 lonchas
150 g de chorizo de salamanca 12 rodajas
100 g de manteca de cerdo
4 huevos duros
1 huevo fresco
El Hornazo de Salamanca
Primero de todo hacemos la masa del hornazo. Diluimos la levadura fresca en el agua tibia. A continuación, separamos los ingredientes secos de los húmedos. Por un lado la harina, la sal y el pimentón y por otro lado el agua tibia con la levadura, la manteca de cerdo y el AOVE. Juntamos las 2 mezclas y removemos todo muy bien. Para acabar, sacamos la masa, la volcamos en una base enharinada y acabamos de amasarla con las manos. Verás que gracias al pimentón te quedará con un toque rojizo. Dejamos reposar la masa en un bol tapado con papel film transparente hasta que doble su volumen o 45 minutos aproximadamente. La masa debe estar en una zona sin corrientes de aire, por ejemplo, dentro del horno apagado.
Cortamos la masa en 3 porciones iguales. Una servirá para la base, otra para cubrir nuestro hornazo y la restante para hacer el clásico enrejado que identifica este plato. La masa del hornazo dividida en tres partes Precalentamos el horno a 190 ºC. Mientras, estiramos con un rodillo la masa que servirá de base, siendo esta de unos 3 mm de grosor aproximadamente. Para que nos salga lo más rectangular posible, la estiramos sobre un papel de horno y con un cuchillo le cortamos la masa sobrante. Este proceso lo haremos con las 3 bolas de masa. Masa del hornazo estirada y cortada Llega el momento de darle vida a nuestro hornazo. Para ello, ponemos los ingredientes en el siguiente orden: En primer lugar, las doce rodajas de nuestro chorizo de Salamanca.
La masa del hornazo con chorizo
En segundo lugar, los ocho filetes de lomo adobado. Masa del hornazo con el lomo adobado Seguidamente, lo cubrimos con las lonchas de jamón. Masa del hornazo con el jamón Para acabar añadimos la capa de huevo cocido. Masa del hornazo con el huevo cocido Una vez puesto todo el relleno, lo pasamos a una bandeja de horno. Después cubrimos el hornazo con la otra masa estirada. Para ello nos será de gran utilidad enrollarla en un rodillo para desenrollarla posteriormente encima. Una vez colocada, cortamos los excesos de masa.
Cubriendo el hornazo con otra masa y un rodillo
Para acabar de decorar nuestro hornazo, le damos el toque característico: el enrejado. Pasamos el rodillo de rombos por la última masa estirada. Asegúrate de que esté bien cortada. Si no tenemos rodillo no pasa nada. Los rombos se pueden hacer con un cuchillo o simplemente cortando a tiras la masa.
Rodillo de rombos sobre la masa Una vez hecha la forma, la colocamos sobre el hornazo y la estiramos hacia los lados para que se puedan ir viendo los rombos del enrejado. Cortamos nuevamente los excesos de masa. Sellamos los bordes del hornazo y lo pintamos con huevo para que cuando salga del horno esté bien dorado. Enrejado sobre el hornazo Pintando el hornazo con huevo Una vez pintado con el huevo, lo ponemos en el horno a 190 ºC durante 35 o 40 minutos o hasta que esté bien dorado. Cuando se acabe el tiempo, tendremos listo nuestro hornazo para poder disfrutar de él.
El Hornazo Horneado
La preparación y elaboración paso a paso
Hacemos la masa del hornazo y la dejamos reposar hasta que doble su volumen Cortamos la masa en 3 partes iguales Las estiramos y las cortamos en forma rectangular Encima de la primera masa colocamos el chorizo, el lomo adobado, el jamón y el huevo cocido Extendemos la segunda masa encima de todo Hacemos el enrejado de rombos en la tercera masa con un rodillo o un cuchillo Colocamos el enrejado sobre la masa Cortamos el exceso de masa, sellamos los bordes y lo pintamos con huevo Horneamos a 190 grados durante 40 minutos o hasta que esté bien dorado
El hornazo de Salamanca es una preparación muy típica de esa ciudad que se consume el lunes de aguas, el siguiente lunes a la semana santa. En Castilla y León también se hacen otras recetas. Esta se trata de una masa de pan de engrasada y un relleno de lomo, chorizo y otros ingredientes varios, depende de la región van variando.
31- CREMA CATALANA
Un postre delicioso y sencilla que, como su nombre lo indica, es típico de Catalunya. Está hecho a base de yema de huevo y azúcar. crema catalana. La crema catalana es uno de los postres más tradicionales y populares de la gastronomía de Catalunya. Su popularidad es tal, que hoy en día se ha extendido por todo el país e, incluso, otras regiones del mundo, por lo que encontramos distintas versiones casi por todo el planeta. Este rico postre consiste en una crema pastelera más fina que la habitual, cubierta de azúcar quemado que aporta el toque crujiente y dulce que tanto lo caracteriza.
Aunque actualmente encontramos muchas versiones de la receta de crema catalana original, en Recetas Gratis vamos a compartir la forma tradicional de elaborarla, la de toda la vida, para que puedas disfrutar de todo su sabor siempre que quieras. Así pues, los ingredientes de la crema catalana básicos y que nunca pueden faltar en la receta original son: leche, huevos, maicena y azúcar. El resto de ingredientes, como limón, naranja o esencia de vainilla son opcionales porque únicamente se usan para agregar sabor. Además de los ingredientes, el punto de la cocción es otra de las claves a tener en cuenta a la hora de hacer una buena crema catalana.
Receta Ingredientes:
Cómo preparar la crema catalana tradicional 4 raciones
500 ml de leche normalmente se utiliza leche entera, pero
la hemos preparado también con leche semidesnatada
y está igualmente riquísima y cremosa.
1 rama de canela.
La piel de medio limón.
La piel de media naranja.
4 yemas de huevo.
15 gr de maicena.
60 gr de azúcar más 1-2 cucharadas soperas
por ración para caramelizar por encima.
Cómo es la receta de crema catalana tradicional.
Quítale la piel a la naranja y al limón pero solo la parte más superficial de forma que no arrastre parte blanca, solo debe ser naranja o amarilla respectivamente. La parte blanca amarga y por eso no nos interesa. En un cazo a fuego medio pon la leche junto con la rama de canela y la piel de la naranja y la piel del limón. Justo antes de que empiece a hervir verás que empieza a haber burbujitas pequeñas en la superficie y quizás un poco de telo propio de la leche, o si tienes un termómetro antes de que llegue a 100ºC, retira el cazo del fuego. Mientras, en un bol pon las yemas de huevo junto con el azúcar y la maicena y bátelo todo con unas varillas. Verás que al principio la mezcla es un poco seca, pero si sigues batiendo enérgicamente poco a poco se volverá cremosa y finalmente tendrá un aspecto bastante homogéneo, que es lo que buscamos. Vierte en el bol la leche infusionada poco a poco y haciéndola pasar por un colador para que se queden en él las pieles de los cítricos y la rama de canela. Remueve la mezcla.
Receta crema catalana casera
De nuevo vierte la mezcla en el cazo que habías utilizado y ponlo a fuego bajo mientras remueves sin parar para que no se te pegue a la vez que se va espesando. Ten paciencia porque tarda unos minutos, finalmente verás que se empieza a espesar casi de golpe. Cuando el aspecto sea como el de nuestra fotografía en el que los surcos de las varillas se empiezan a notar apártala del fuego, ¡ya está lista! Repártela en los moldes o recipientes en los que la vayas a servir, lo más tradicional es servirla en cazuelitas de barro como éstas pero si no tienes no pasa nada. Si no te queda muy lisa por arriba puedes alisarla con el reverso de una cuchara. Cuando esté fría puedes introducir los recipientes en la nevera para que repose al menos 4 horas, aunque personalmente me gusta prepararla de un día para otro y así reposa toda la noche en la nevera. Justo antes de servirla esparce azúcar por encima, la cantidad es al gusto pero te recomiendo entre una y dos cucharadas soperas. Carameliza el azúcar con ayuda de un soplete y ya la tendrás lista para servir
Tiempo: 20 minutos, y al menos 4 horas de reposo y enfriado
Dificultad: fácil
Sirve y degusta:
Recuerda caramelizar el azúcar justo antes de servir la crema catalana para que llegue crujiente y perfecto a la mesa. Podrás conservarla 2-3 días en la nevera sin problemas. Lo mejor de esta receta, además del sutil sabor a canela y cítricos, es el contraste de texturas de la crema y la capa crujiente de azúcar. La forma de comerla es partiendo esa capa con la cuchara dándole unos golpes y en cada cucharada llevar a la boca crema junto con capa crujiente de azúcar, una delicia de auténtico… ¡escándalo!
Receta tradicional de crema catalana con su azúcar quemada Variaciones de la receta de crema catalana tradicional. Una de las pocas variaciones que existen es utilizar solo piel de naranja o solo de limón. También se puede modificar la cantidad de azúcar de la crema, en este caso y como la capa crujiente compensa he decidido ponerle poquito azúcar de forma que queda una crema de sabor suave y aromático, pero puedes utilizar la cantidad de azúcar que prefieras.
Puedes preparar la crema catalana con antelación ya que te puede aguantar 2-3 días en la nevera, pero recuerda quemar el azúcar siempre justo antes de servirla para que llegue crujiente a la mesa. Recuerda elaborar la receta siempre con fuego medio e incluso bajo porque, aunque de esta forma tarda un poco más, te aseguras que no se pega al cazo y queda perfecta de textura y sin grumos.
32- BOQUERONES FRITOS
Un clásico de los bares españoles. En muchos casos te los ponen gratis cuando pides una caña. Échales un chorro de limón y disfrútalos. boquerones fritos Los boquerones fritos son una de las mejores formas de preparar los boquerones junto con los boquerones en vinagre, seguro que muchos de vosotros estáis conmigo. Se pueden preparar de muchas maneras, boquerones al horno, al vapor, encurtidos etc… pero la mejor para mi es esta.
Antes de ponernos a consumir boquerones es muy importante congelarlos previamente 48 horas mínimo. Esto es debido al anisaki. Con este periodo de congelación se destruye al posible “bichito” y podemos comerlos con tranquilidad ya que el boquerón suele venir siempre con bastante anisaki.
Limpiar los boquerones. Empieza quitándoles la cabeza y las tripas. La espina central a mi me gusta bastante pero hay personas que les gusta quitarla. Déjalos en agua fría con hielo para que suelten toda la sangre posible. Elimina el exceso de harina. Un paso importante a la hora de enharinar y freír los boquerones es quitar todo resto de harina para que quede una capa muy fina y crujiente a la hora de freír los boquerones. Usa abundante aceite de girasol. Para los fritos siempre digo que el aceite de girasol va mejor porque aguanta más temperatura y fríe mejor los alimentos. Tenemos una especie de miedo a usar el aceite de girasol y no tiene absolutamente nada de malo, simplemente es diferente al de oliva. Retira el exceso de aceite. También es de gran importancia usar un papel de cocina para que absorba cuando vayamos a freír los boquerones.
Receta Ingredientes:
1 kg de boquerones pequeños
Sal
Harina
Aceite de girasol o de oliva
Es por tanto un alimento muy recomendable para deportistas por sus proteínas, y para niños en etapa de crecimiento. La temporada óptima de pesca del boquerón o anchoa va de abril hasta septiembre. En el Cantábrico su mejor temporada es durante los meses de abril y mayo, y en el Mediterráneo va de mayo a septiembre, de ahí que sean uno de los platos estrella en los chiringuitos de playa en época veraniega. Un plato tradicional estos boquerones fritos, que a nosotros también nos gusta comer en casa de vez en cuando ¿te animas?
Preparación de Boquerones Fritos
Limpiar bien los boquerones, empezando por quitar la cabeza con unas tijeras, después las tripas y abriendo los boquerones por la mitad para retirar la espina central. Lavar con agua fría. Deben quedar los boquerones limpios y abiertos en forma de libro.
Pelar y picar el ajo.
Lavar, secar y picar bien menudo el perejil fresco. Colocar los boquerones en un plato, salar al gusto. Echar encima el ajo y el perejil picados y el zumo de limón. Mezclar y dejar los boquerones bien cubiertos del aliño. Tapar el plato con film transparente, y dejar reposar en el frigorífico durante al menos 1 hora. Yo los he dejado toda una noche, porque nos gusta que los boquerones tengan un sabor potente de limón. Enharinar uno por uno los boquerones, y colocar en un plato. Puedes dejarle el ajo y el perejil que queda pegado al boquerón o no.
Calentar abundante aceite a fuego fuerte y freír los boquerones en tandas de pocas unidades, hasta que estén un poco dorados, aprox. 1-2 minutos. Bajar a fuego medio, cuando empieces a freír, para que el aceite no esté demasiado caliente y no salpique. Retirar y escurrir en un papel absorbente. Servir recién hechos decorados con gajos de limón y perejil fresco. Si aún no has probado los boquerones fritos al limón, te recomiendo que los prepares, a los niños también les encantará. Se comen de un bocado, porque además no llevan espinas y saben de maravilla.
33- MARMITAKO DE ATÚN
El marmitako es un plato de pescadores del país vasco hecho con atún, patatas y en algunos casos pan. Todo lo que necesitas para recargarte de energías luego de un largo día de faena. marmitako de atún. La receta de marmitako de atún es un plato típico del norte de España. Esta receta de pescado consiste en un guiso con patatas, pimiento, cebolla y tomate junto a un pescado, tradicionalmente el atún blanco. El nombre de marmitako o marmita viene dado por el recipiente donde se cocinaba este guiso. La marmita es una olla de metal con tapa. En ella se ponían las verduras junto al pescado recién sacado del mar y se cocinaba. Este guiso es muy apreciado porque se prepara con pescado azul, ya sea atún o bonito. El pescado azul es rico en Omega 3, muy beneficioso para el corazón actuando sobre la tensión arterial y la circulación en general.
Recetas Ingredientes:
500 gr. de Atún o Bonito
1 Litro de Caldo de Pescado
1 Kg. Patatas
1/2 Cebolla
1 Pimiento Verde
2 Dientes de Ajo
4 Cucharadas de Tomate Triturado
1 Cucharadita de Pimentón
1 Cucharadita de Pimiento Choricero Opcional
200 ml. de Vino Blanco
Aceite de Oliva VE
Sal
marmitako de atún
Dificultad: Fácil
Tiempo total
1 h
Elaboración
10 m
Cocción
50 m
Reposo
5 m
Preparación de Marmitako de Atún
Picar la cebolla y el ajo fino, trocear el lavado pimiento en cubos, sin las semillas, y pelar, despepitar y picar el tomate. Lavar y pelar las patatas, y ponerlas enteras a remojo en agua fría. Calentar un fondo de aceite en una olla o cazuela y pochar la cebolla con un poco de sal a fuego lento hasta que se empiece a caramelizar. Añadir el pimiento, el ajo, el tomate, la guindilla y la pulpa del pimiento choricero. Sofreír todo unos minutos. Cascar las patatas en trozos medianos y añadirlas con el pimentón y un poco de sal. Remover y regar con el vino.
Cuando se evapore el alcohol, cubrir con caldo o agua. Llevar a ebullición, bajar el fuego, tapar y dejar cocer durante al menos 30 minutos. Ajustaremos el tiempo según nos guste el punto de las patatas y el nivel de caldo. Si lo queremos más espeso, podemos machacar alguna patata o dejar que cueza destapado con algo más de brío.
Cortar el atún sin espinas ni piel en tacos de un par de centímetros y añadirlo a la olla al final de la cocción. Tapar y dejar a fuego mínimo, o directamente apagado, durante unos pocos minutos, lo justo para que el atún se cocine. Es importante no sobre cocerlo, sobre todo si vamos a recalentar el guiso después. Servir con perejil fresco.
La receta de marmitako tradicional se prepara con bonito del Norte, que es un pescado que se pesca en verano. De ahí que, a pesar de ser un guiso de pescado, se coma en verano. Pero como hemos visto, no es pecado mortal prepararlo con otros pescados: marmitako de atún como hemos hecho nosotros, o con bacalao, salmón, etc.
La cantidad de caldo es la que necesitéis para cubrir los ingredientes, entre 1 litro y 1 ½ litro. Un buen caldo de pescado es fundamental. Si podéis, preparad un caldo casero, podéis hacer una buena cantidad y tenerlo congelado. Aquí os dejamos la receta caldo de pescado casero Si os gusta el picante y no lo comerán los niños, podéis añadir 2 guindillas.
34- KOKOTXAS DE BACALAO EN SALSA VERDE
Las kokotxas o cocochas, son posiblemente la parte más deliciosa de cualquier pescado. Es esa carne que está entre las branquias y la cabeza del animal. Los vascos, como genios que son, las preparan maravillosamente de muchas formas, destacándose la receta en salsa verde. cazuela con cocochas de bacalao. En temporada de bacalao y ya se empieza a notar por el mundo bloguero la cantidad de recetas con este maravilloso pescado que se están haciendo. Yo hoy os traigo una de las preferidas de mi padre, las cocochas o kokotxas de bacalao en salsa verde. Son muy sencillas de hacer ya que lo que tiene algo de misterio es la salsa, pensad que si seguid los pasos que os digo os saldrá a la perfección. Os recomiendo usar caldo de pescado casero, pero si no tenéis podéis usar cualquier pastilla de caldo de pescado o caldo de los que vienen en brick ya que no todo el mundo tiene a mano caldo casero solo los frikis cocinillas como yo jejeje Por otra parte, es recomendable quitar la piel dura que tienen las cocochas antes de cocerlas ya que luego son muy incómodas a la hora de comer, es un poco lioso pero ya veréis como quitando las la gente las come mucho más cómodamente.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
½ kg de cocochas de bacalao frescas o desaladas
2 dientes de ajo grandes
1 cucharada de harina de trigo
1 cebolla blanca
1 taza de vino blanco seco
1 y 1/2 taza de caldo de pescado
1 guindilla
Un manojo de perejil fresco
Aceite de oliva
Sal al gusto opcional
Elaboración paso a paso
Para comenzar esta receta, las cocochas deben estar limpias. Recuerda que al principio de esta nota dejamos en claro que si se trata de cocochas saladas, primero habrá que seguir el procedimiento para desalarlas. En cualquier caso, tendremos que retirar las barbas y la piel de esta parte del bacalao aunque hay algunos cocineros que prefieren no quitar esta última). De momento, dejaremos de lado las cocochas de bacalao y nos ocuparemos de los dientes de ajo. Vamos a pelarlos y luego, los picaremos en trocitos muy menudos. Haremos lo mismo con la cebolla: la picaremos en trocitos pequeños. También lavaremos bien el perejil yo además lo remojo en agua con un chorro de vinagre, durante por lo menos cinco minutos. Posteriormente, lo escurriremos y picaremos las hojas muy finamente. Entonces, lo reservaremos. Luego, lavaremos la guindilla y la picaremos en cintas. En un cazo tradicional, una cacerola o sartén antiadherente, vamos a calentar un buen chorro de aceite de oliva. Allí vamos a cocinar los ajos, la cebolla y la guindilla. Sin embargo, haremos esto a fuego medio-bajo para que no se vaya a dorar el ajo. Simplemente, lo cocinaremos durante un par de minutos.
Para continuar, vamos a agregar la harina a la preparación y a mezclar bien. Luego, vamos a incorporar las cocochas que hemos limpiado previamente. Dejaremos que se cocinen en el aceite, a fuego bajo, durante otro par de minutos. Haremos esto removiendo frecuentemente y muy delicadamente los ingredientes, con ayuda de una cuchara de cocina o simplemente, removiendo el cazo. Enseguida, vamos a agregar el perejil y el vino. Mezclaremos bien todo de nuevo, muy delicadamente y dejaremos que el alcohol se evapore durante un par de minutos. Posteriormente, verteremos el caldo de pescado. Mezclaremos bien con el resto de la preparación, dejaremos que se caliente durante unos cinco minutos más. Ahora vamos a probar la salsa y corregir la sazón con un poco de sal, si hace falta. Es particularmente importante prestar atención a este paso, si hemos utilizado kokotxas frescas y no saladas. Eso es todo. Las cocochas de bacalao ya están listas para servirse.
35- ARROZ DEL SENYORET
Tradicional receta de arroz de origen valenciano en la cual el marisco está limpio y picado en trozos pequeños para que el comensal no tengo que ensuciarse las manos mientras come, de ahí su nombre, era un arroz para «señoritos». sartén paellera con arroz del senyoret. Hay muchas variedades de arroces en el mundo, grano corto, grano largo, vaporizado, basmati, tailandés... pero dentro de estas variedades la favorita de los maestros paelleros es el arroz de grano medio, de unos 5mm de largo.
Pero no te pienses que esto de las variedades de los arroces es tan sencillo... dentro del grano medio hay un montón de variedades. Recuerda que las proporciones de agua o caldo dependen totalmente de tipo de arroz que se utilice. Tipo Senia: esta es la variedad que nosotros utilizamos más a menudo. Nos gusta porque el arroz absorbe muy bien los sabores y porque se necesita menos cantidad de caldo para prepararlo, unas 3 partes de caldo por parte de arroz.
Como contra, destacamos que es fácil que nos pasemos con el punto de cocción, necesita unos 17 minutos para estar en su punto. Tipo Bomba: tiene como pro que aguanta mas la cocción y es más difícil que nos pasemos de su punto óptimo, que se logra a los 18 minutos aproximadamente. Como punto negativo, absorbe menos el sabor que la variedad Senia. Utilizamos para este arroz unas 4 partes y media de caldo por parte de arroz. Tipo Albufera: es el que vamos a utilizar en esta receta y está a medio camino entre las otras dos variedades que hemos mencionado, ya que aguanta como el arroz Bomba y absorbe bastante sabor, como el Senia. Está listo en 18 minutos y utilizaremos una proporción de 4 partes de caldo por parte de arroz.
Receta Ingredientes:
180 gr de arroz variedad Albufera.
600 -700 gr de fumet de pescado (lo mediremos en volumen respecto al volumen de arroz).
1 cebolla pequeña o media grande.
1 diente de ajo.
12 gambas arroceras.
Media sepia.
Media cola de rape, también se puede utilizar bacalao.
Media cucharada de pimentón.
Azafrán.
60 gr de tomate triturado.
Aceite de oliva virgen extra.
Preparación de arroz senyoret
Poner en una olla dos litros de agua con un poco de sal y añadir la cabeza de merluza, los huesos de mero y rape y/o la morralla de pescado. Llevar a ebullición a fuego suave y cocinar durante aproximadamente 15 o 20 minutos desde que arranque. Colar el pescado y así obtendremos el caldo. Poner un chorro de aceite en la paella, esperar a que se caliente y sofreír las gambas o langostinos. Sacar, pelar las gambas y reservar. Triturar las cabezas y las pieles con un poco de caldo del fumet, colar y devolver este concentrado de sabor e intensidad a la olla del caldo. Sofreír la sepia, el calamar y el rape, previamente cortados en trozos de, aproximadamente dos o tres centímetros. Añadir la cebolla picada muy fina y cocinar hasta que esté bastante hecha. Añadir entonces el tomate rallado y el pimentón dulce. Cuando todo esté bien sofrito añadir el arroz, que debe impregnarse bien de todos los ingredientes y quedar ligeramente transparente (nacarado). Si es necesario, añadir un poco más de aceite. Añadir también en este paso el azafrán.
Añadir 1’2 litros de fumet y dejar hervir a fuego vivo durante unos cinco minutos. Probar de sal, y si es necesario, rectificar. A continuación, bajar a fuego lento -sin que deje de hervir- hasta que el arroz absorba todo el caldo. Cuando esté listo, añadir por encima las gambas rayadas peladas que habíamos reservado para adornar y dejar cinco minutos cubierto con papel de plata para que el arroz repose un poco. En la receta de arroz del señoret, tendremos en cuenta que todos sus ingredientes estén pelados. Respetando esta indicación podéis añadir cualquier otro ingrediente que os apetezca, como por ejemplo: mero o corvina. Podéis aderezar el arroz del senyoret a la hora de servir con un poco de ajoaceite o alioli casero, será suficiente con 1 cucharada en cada plato. La sal es a gusto del consumidor, probad mientras cocináis el arroz al senyoret por si debéis echar o no sal. Servir y disfrutar de un exquisito arroz de senyoret.
36- PISTO MANCHEGO
El pisto se hace con vegetales pochados de temporada. Es común que te lo sirvan con un huevo frito encima como plato único de comida. receta pisto manchego. La receta de pisto manchego, todo un clásico de la gastronomía española. Se trata de una fritada de verduras de la huerta. La base de éste pisto siempre debe ser tomate y pimiento y se le suele poner ajo, cebolla y calabacín, todo cortado en trozos pequeños, en dados, cocinado a fuego suave hasta que el tomate esté bien frito.
El pisto manchego no tiene por qué llevar mucho aceite, por lo que resulta un plato muy saludable y con pocas calorías, perfecto para que toda la familia consuma verduras. Lo mejor es que se puede servir de acompañamiento de carnes o pescados, aunque realmente el pisto de verduras como está mejor es con un huevo frito y un buen trozo de pan. Se nos hace la boca agua sólo de imaginarnos esa yema mezclada con el pisto.
Receta Ingredientes:
INGREDIENTES
2 Cebolla
2 Calabacín
2 Pimiento verde
1 Pimiento rojo
2 Tomates
Aceite de oliva
2 dientes de Ajo
1 hojas de Laurel
Sal
Cómo preparar un Pisto Manchego
Para hacer este pisto manchego tradicional comenzaremos por preparar las verduras. Comenzamos por la cebolla. La pelamos y la picamos en brunoise fina. Lavamos los pimientos verde y rojo, les retiramos el tallo y las pepitas y los picamos también en brunoise fina. Acercamos una cazuela amplia al fuego con un chorro de aceite de oliva virgen extra y pochamos la cebolla y los pimientos a fuego suave. Añadimos el ajo entero y sin pelar con un cortey el laurel. Lavamos el calabacín, le retiramos los extremos y lo picamos en dados menudos o bien en rodajas finas.
Cuando la cebolla y los pimientos hayan comenzado a ablandarse un poco, pasados unos 5 o 7 minutos, incorporamos el calabacín y ponemos a punto de sal. Después de otros 5 minutos, incorporamos el tomate picado y dejamos que se haga todo el conjunto. Cuando la verdura esté bien, bien pochada, probamos y rectificamos de sal si fuera necesario. Recuerda que el secreto de un buen pisto manchego tradicional está en hacerlo sin prisa, a fuego muy muy suave durante unos 40 minutos aproximadamente. Antes de servir, retira el ajo y el laurel.
Es este un plato que se suele consumir tanto frío como caliente, acompañado, mayormente, de huevos fritos y de un buen pedazo de pan, a ser posible, pan casero. Pero también lo podéis emplear para servirlo junto a un filete de carne o pescado a la plancha, mezclarlo con un poco de arroz o pasta, como relleno para una empanada, o como cobertura de una deliciosa pizza. Por sus ingredientes, el pisto puedes cocinarlo durante los meses de verano pero realmente es un plato que puedes comer todo el año ya que es una fuente de vitaminas y nutrientes para nuestra salud.
37- ARROZ CON CONEJO Y CARACOLES
Una deliciosa receta murciana que se asemeja a las famosas paellas. Aunque el conejo y los caracoles son los principales ingredientes es importante que el arroz sea el correcto: el de calasparra. arroz con conejo y caracoles.
El arroz con conejo y caracoles es un plato especial murciano, lleno de sabor y texturas que encantan al paladar. Para que la receta sea exitosa, hay que asegurarse de la calidad y frescura de los ingredientes. Los comensales quedarán gratamente sorprendidos al probar el primer bocado ¡Es toda una delicia! Este tipo de arroces tiene la posibilidad de cocinarse más seco o más caldoso, a gusto de los comensales.
La combinación de caracoles y conejo, aunque parezca descabellada, no lo es. Este plato lleva preparándose hace siglos, es uno de los preferidos en toda la región noroeste de España. El arroz que se cultiva en esa zona también es especial. La fusión de ingredientes es fabulosa. El arroz con conejo y caracoles es muy sencillo de hacer en casa si se sigue el paso a paso.
Receta Ingredientes:
Para 4-5 personas / Tiempo de preparación 90 minutos
700 grs. de conejo sobre ¾ partes del conejo
medio pimiento rojo
una cabeza de ajos
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta negra
Romero fresco
Azafrán en hebras
Un puñado de garbanzos
Un puñado de caracoles serranos
160 gramos de arroz
2 litros y medio de caldo
tomate maduro rallado
Preparación de Arroz con Conejo y Caracoles
Calentar el aceite en una sartén y sofreír las tiras de pimiento y la cabeza de ajos (pelada y con un corte alrededor. Dorar y reservar. A continuación, sofreír el conejo troceado con una pizca de sal hasta que esté dorado. Cuando se haya dorado, pasarlo a una olla que previamente habremos puesto con el agua a hervir reserva el aceite en la sartén. Añadir también los caracoles previamente “engañados”. En el aceite que hemos reservado en la sartén, sofreír el tomate rallado, añadir el pimentón y remover ligeramente. Verter el contenido en la olla y dejar que hierva todo durante 40 minutos.
Pasado el tiempo de cocción, verter el contenido de la olla, al recipiente de la paella. Esperar a que vuelva a hervir. Añadir el arroz remover ligeramente para repartir por todo. Echar el azafrán, el perejil picado y rectificar de sal. Colocar en el centro la cabeza de ajos y disponer las tiras de pimiento. Cocer durante veinte minutos. Los primeros diez minutos cocer a fuego alto, y después bajar el fuego a medio-bajo durante diez minutos más.
Apagar el fuego y dejar reposar tapado cinco minutos. Para “engañar” los caracoles hay que introducirlos previamente muy bien lavados en un cazo con agua templada, e ir calentando muy poco a poco el agua. Esta agua se puede añadir para cocer el conejo. Para que una vez cocinado quede una capa fina de arroz, el recipiente de la paella donde se cocine, debe tener las dimensiones adecuadas. La cantidad de líquido que añadamos al recipiente de la paella para cocinar el arroz, nunca debe sobrepasar los remaches o tornillos de las asas. Durante el último minuto de la cocción, podemos subir la intensidad del fuego para que quede ligeramente tostadito por bajo, lo que se llama el “socarrao o socarrat”. Durante la cocción podemos variar la intensidad del fuego, según veamos la cantidad de caldo que va quedando servir y disfrutar.
38- BACALAO AL AJOARRIERO
Bacalao cocinado en una cazuela de barro con bastante pimientos, tomates y ajo. En algunos hogares le agregan gambas o cigalas como extra. receta bacalao al ajoarriero. Con este mismo nombre, dos recetas diferentes: ya la tenemos liada de nuevo. Porque depende de dónde hables de “ajoarriero” la gente puede entender que se trata de este guiso con verduras -sobre todo en el País Vasco o Navarra- o de un untable a base de bacalao, patata, ajo y aceite, también conocido como atascaburras o ajo mortero primo hermano de la brandada si te acercas a Cuenca o Murcia. Se trata de dos dignísimas y sabrosas recetas de vigilia y las queremos a ambas por igual, pero hoy vamos a preparar la primera.
Este bacalao al ajo arriero es relativamente sencillo de rastrear, pues los arrieros fueron un pueblo leonés, procedente de la comarca de la maragatería que fueron famosos desde la edad media hasta la proliferación del ferrocarril por ser unos transportistas de productos por la cornisa cantábrica hacia el interior peninsular. Y qué mejor que con otros ingredientes que aguantaban el paso de tiempo bastante bien, ajo, sal y pimentón. Pues finalmente hicieron de la necesidad virtud, y hoy podemos disfrutar de esta receta buenísima.
Receta Ingredientes:
Para 4 personas o más si es como aperitivo
600 g de bacalao
6 dientes de ajo
½ guindilla o al gusto
500 g de tomate pelado en daditos puede ser una buena conserva
300 g de cebollas 2 medianas
4 pimientos del piquillo
Sal
Una hoja de laurel
Aceite de oliva virgen
Cómo preparamos el bacalao ajoarriero
Lo primero que tenemos que hacer es picar bien la cebolla y el pimiento verde, lo ideal es picarlo en cubitos pequeños. Cortamos el pimiento morrón a tiras y picamos los dientes de ajo en láminas finas. Pelamos los tomates y los rallamos. En una cazuela ponemos a calentar a fuego medio un buen chorrito de aceite de oliva y sofreímos los ajos laminados durante un par de minutos, removiendo para que impregnen al aceite de su sabor. Añadimos la cebolla y el pimiento verde y salteamos durante un par de minutos, teniendo especial cuidado de que no se queme.
Agregamos el bacalao cortado en trozos no muy grandes, también se puede hacer con el bacalao previamente desmenuzado. Dejamos cocinar durante 3-4 minutos removiendo de vez en cuando. Añadimos ahora el pimiento morrón junto con los tomates rallados, mezclamos todo bien y cocinamos durante 15-20 minutos. En el caso de que veamos que se queda sin líquido, bajamos a fuego medio-bajo y añadimos un poco de agua. Pasado el tiempo indicado, solo queda rectificar el punto de sal si es necesario, retirar del fuego y servirlo directamente a la mesa con unas ramitas de perejil fresco como decoración.
39- ARROZ A BANDA
Este delicioso arroz valenciano hecho con caldo de pescado era originalmente un plato de pescadores, quienes aprovechaban las sobras de pescado para hacer un caldo que luego usaban para preparar este arroz, arroz a banda para comer. El arroz a banda es originario de Alicante, y sus ingredientes principales son arroz, pescado y azafrán. Aunque su origen es mucho más temprano, los griegos, tras aprender a usar el fuego para cocinar pescado y adquirir azafrán de Oriente Medio, y una vez inventado el caldero, ya tenían preparados similares.
Dicha mezcla se cita incluso en la mitología griega en la Ilíada, cuando Afrodita y Hefesto se casaron. No fue un matrimonio feliz, pues Hefesto era un hombre muy celoso y Afrodita era una mujer libre que entregaba sus afectos a quien ella desease. Para ganar algo de libertad a ratos, Afrodita le daba a su marido un plato de azafrán y pescado, el cual tenía efectos soporíferos y le hacía dormir profundamente. De vuelta en España, los pescadores de Alicante habían estado mezclando pescado, ajo, aceite de oliva, azafrán y perejil en sus ollas y calderos desde hacía siglos. El caldo que elaboraban se llamaba 'caldero', pues recibía el nombre del recipiente donde se cocinaba. Esto quiere decir que el arroz a banda es una versión de esto. Este plato apareció tan pronto como se empezó a consumir arroz en España tras introducirlo en el país.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
400 gramos de arroz puede ser redondo o bomba
1 litro de fumet de pescado
Una sepia mediana
350 gramos de gambas ya peladas
2 tomates rojos grandes
3 dientes de ajo
1 cebolla blanca
1 cucharadita de pimentón dulce
Azafrán o colorante para alimentos
Aceite vegetal
Sal al gusto
Pimienta molida al gusto
Preparación de Arroz a Banda
Para comenzar, dejaremos listos los mariscos que vamos a utilizar. La sepia debe estar bien limpia, para que entonces la piquemos en cuadritos. En el caso de las gambas, si por alguna razón no están ya peladas, este es el momento de ponernos a ello.
Luego nos ocuparemos de las verduras. Lavaremos bien los tomates y luego los rallaremos. La decisión de conservar o no la piel, depende de cada cocinero. En el caso de los dientes de ajo, los pelaremos y los picaremos menudamente. Si cuentas con un triturador en casa, puedes triturarlos en lugar de pelarlos. En el caso de la cebolla, la pelaremos y la picaremos en cubitos muy pequeños. Luego, agregaremos un chorro generoso de aceite en una paella y lo calentaremos a fuego medio-bajo.
Cuando el aceite esté caliente, agregaremos el calamar picado. Dejaremos que se dore alrededor de 5 minutos, removiendo con frecuencia y cuidando que no se vaya a quemar. Pasado este tiempo, incorporaremos la cebolla y el ajo. Cocinaremos 5 minutos más, removiendo con frecuencia.
Lo siguiente será agregar el tomate rallado. Mezclaremos con los ingredientes que ya están en la paella. Lo esparciremos por toda la superficie para que se vaya cocinando de manera uniforme. Dejaremos que se cocine hasta que pierda la mayor parte del líquido. Luego sazonaremos con sal y pimienta al gusto, además del pimentón. Enseguida, incorporaremos el arroz, mezclaremos bien todo y dejaremos que se cocine por un par de minutos más.
Pasados los dos minutos, verteremos el caldo de pescado. Enseguida agregaremos un toque de azafrán o de colorante, para darle un poco de color a nuestro plato. También mezclaremos todo y probaremos el caldo para verificar la sazón. Si hace falta, la corregiremos con un poco más de sal.
Ahora vamos a llevar el fuego a medio, y dejaremos que el arroz se cocine durante 10 minutos. El objetivo es que el líquido se evapore y los sabores se concentren pero hay que tener cuidado que el arroz no se seque completamente.
Pasado este tiempo, incorporaremos las gambas, llevaremos el fuego al mínimo y dejaremos que el arroz se termine de cocinar. Ahora sí, esperamos hasta que se seque todo el caldo y el grano de arroz esté en su punto, lo que nos tomará alrededor de 15 minutos, o un poquito más dependiendo de la potencia de la cocina, el espesor de la base de la paella, entre otros factores. Cuando se termine el tiempo de cocción, apaga el fuego y deja que el arroz repose durante algunos minutos, antes de servirlo.
40-TERNASCO DE ARAGÓN CON PATATAS
El ternasco es un cordero joven y como todo cordero joven su carne es alucinante. En Aragón tiene denominación de origen y se come de mil formas, todas maravillosas. Pero como siempre digo: mientras más sencillo, mejor, cómelo asado con patatas. Es majestuoso, ternasco de Aragón. Platos típicos, esta receta de ternasco de Aragón asado con patatas se merece un premio. Podemos probarlo en primera persona en alguno de sus restaurantes, una buena excusa para viajar a Aragón o poner rumbo a la carnicería de confianza más cercana. La carne procedente de los pastos de esta comunidad autónoma es excepcional, un simple ternasco asado con patatas al horno es un manjar, qué podemos disfrutar en casa. Solo necesitas apostar por esta carne de cordero para cocinar un increíble ternasco de Aragón asado con patatas, el resultado es impresionante.
Receta Ingredientes:
Paletilla de ternasco
1 cabeza de ajos
Perejil
Aceite de oliva virgen extra
Patatas
Sal
Manteca de cerdo
Aceite de oliva
Zumo de limón
Preparación de Ternasco de Aragón
Pon el horno a calentar a 200°C.
Pela algunos dientes de ajo y pártelos por la mitad.
Lava las patatas y quítales la piel. Luego córtalas en rodajas finas y cubre con ellas la bandeja de horno en el que vayas a hacer el asado. Reparte el ajo picado por encima de las patatas y sazona con sal al gusto y con un chorro generoso de aceite de oliva o en su defecto zumo de limón o vino blanco.
Unta las paletilla de ternera con aceite de oliva y sal, hazle un par de pequeños cortes a la carne y colócalas en la bandeja sobre las patatas. Pela y pica un par de ajos más y colócalos en los cortes para que la carne adquiera sabor. Mete la carne en el horno durante 25 o 30 minutos y vigílala cada poco tiempo. Cuando veas que la carne empieza a tostarse, dale la vuelta a las paletillas para que se asen por el otro lado.
Pasado el tiempo indicado, abre el horno y riega la carne con abundante agua pero sin llegar a cubrir las patatas. Vuelve a cerrar el horno y, tras 15 minutos, baja la temperatura a 160°C. Deja la carne en el horno hasta que compruebes que está en su punto. Riega el ternasco cuando el líquido se evapore tantas veces como sea necesario.
Haz una majada poniendo un par de ajos picados, perejil fresco, un poco de aceite de oliva y sal en un mortero y mezcla. Cuando la carne esté crujiente por fuera y tierna por dentro sácala del horno y sírvela regada con el aceite de perejil y ajo. Servimos el cordero Ternasco de Aragón recién salido del horno acompañado de las patatas asadas y por ejemplo, unos pimientos acompañados con un poco del aceite de la majada en el fondo del plato. Y por supuesto, servir con un buen vino aragonés.
41- FABADA ASTURIANA
El plato estrella de Asturias. Un potaje poderoso donde las fabas, esa alubia blanca gigante tan famosa, es la protagonista, fabada asturiana. Se trata de un plato ideal para comer en invierno, elaborado con legumbres y productos del cerdo. Su origen no se remonta muy atrás ya que no hay documentación de este plato hasta finales del siglo XIX, popularizándose en el s. XX.
Dentro de los ingredientes de la fabada, hay que destacar la Faba Asturiana, con denominación específica desde 1990, y registrada como indicación geográfica protegida desde 1996. Sin duda es el alimento más conocido de los producidos en el Principado de Asturias.
Una de las recetas españolas más famosas en el mundo. Sin duda, también una de las más deliciosas. Su nombre hace referencia al nombre con el que en España suele llamarse a los frijoles blancos especiales que se usan en la receta: los fabes. Una auténtica Fabada Asturiana se hace lógicamente con embutido asturiano compango chorizos, morcillas, panceta y lacón.
La característica fundamental del compango es que se ahúma confiriéndole al embutido un aroma inconfundible. Fuera de Asturias se pude encontrar envasado en la zonas refrigeradas de los supermercados. Si no los encuentras puedes usar otros embutidos de calidad aunque ya no te quedará la fabada con el sabor tradicional ahumado. En este caso te aconsejo que uses pimentón de la Vera que está ahumado y así intentamos compensar la perdida de sabor a humado del embutido.
Receta Ingredientes:
Ingredientes
500 g de fabes
250 g de panceta curada asturiana
2 chorizos asturianos
2 morcillas asturianas
Agua
200 g de hueso de jamón
Sal al gusto
3 hebras de azafrán
Elaboración paso a paso
Vamos a comenzar con el paso que toma más tiempo, pero que irónicamente es el más fácil aunque toda la receta es fácil): el remojo de las fabes. Lo ideal es dejarlas remojando toda la noche, así que les buscaremos una buena cacerola o recipiente grande, donde quepan con el agua, sin problemas.
Como para la receta tenemos que usar lacón o panceta, es probable que necesitemos desalarlo, según el producto que hayamos adquirido. Luego de pasada la noche, ya podremos continuar con la preparación de la fabada. Es conveniente enjuagar las fabes al sacarlas del remojo, y asegurarse de que no quede ningún residuo colado entre los granos, o de eliminar cualquier grano que no tenga buen aspecto.
Luego vamos a preparar nuestros ingredientes para la cocción. Vamos a pelar los dos dientes de ajo, y también la cebolla. Depositaremos estos ingredientes en una olla grande, con un buen chorro de aceite de oliva, y añadiremos las fabes y la hoja de laurel. Luego llenaremos la olla con agua, hasta sobrepasar el nivel de los sólidos, por aproximadamente un par de dedos de líquido.
Acto seguido, pondremos la cacerola a calentar. La idea es dejar que la preparación rompa a hervir, y entonces agregar un chorro de agua fría a la olla, para que la fabada retome la cocción normal. En el momento en el que la preparación vuelva a romper a hervor, agregaremos nuevamente un chorro de agua fría para contenerla. Haremos esto incluso una tercera vez. Una vez contenida la ebullición por tercera ocasión, será el momento de agregar "el compango" o las carnes, a la cocción.
Luego, la olla se dejará en el fuego durante unas tres horas. Sin embargo, no hay que olvidarse de nuestra preparación. Es necesario venir a supervisarla con cierta frecuencia, para asegurarse de que no se quede sin líquido. Si eso pasa, hay que rehidratarla con más agua. También hay que cuidar que la intensidad del fuego esté entre media y baja, para que el líquido no se evapore demasiado rápido, y podremos aprovechar para, de vez en cuando, retirar con una cuchara la grasa que irán soltando los embutidos mientras se cocinan.
Cuando ya vaya a terminarse el tiempo de cocción, vamos a probar las alubias. Si hace falta, hay que corregir la sazón con sal. En caso de añadir este último ingrediente, hay que revolver bien los granos antes de apagar la cocina. Los amantes de receta tradicional de fabada asturiana, dejan un buen tiempo de reposo después de retirar este potaje del fuego. Con frecuencia, este tiempo suele ser de otra noche completa, y en principio, contribuye a que el plato tome una consistencia más espesa. También es posible aplastar unos cuantos fabes con un tenedor o contra un lado de la olla, para espesar el plato. Evidentemente, después de dejar reposar la fabada, habrá que recalentarla. Para servirla, lo más común es disponer los granos en un plato hondo, por persona, y al lado servir una parte de las carnes.
42- COCHINILLO FRITO EXTREMEÑO
Cerdo frito picado en trozos y adobado. Perfecto para comérselo con las manos viendo televisión, cochinillo frito extremeño. Uno de los platos más representativos de Nuestra tierra extremeña es el cochifrito; que no es otra cosa qué cochinillo adobado y frito. Aprovechando que estoy en mi pueblo, donde los cochinillos abundan y están tan buenos, he preparado este sencillo plato con una carne de primera calidad como la que tenemos aquí.
El secreto del cochifrito es el adobo, tenemos que dejar la carne cortada en trozos pequeños, macerando en el, toda la noche para que absorba todos los sabores. Después se fríe en abundante aceite y no hay más. Como veis sencillo y riquísimo. Revolviendo entre antiguos cacharros he encontrado una torreznera, donde he puesto a escurrir la fritada de carne, como antiguamente lo hacían nuestras abuelas .Era un artículo de cocina muy practico, que servía para escurrir chorizos, morcillas, torreznos.
Receta Ingredientes:
1 Kg. de cochinillo
6 dientes de ajo
2 cucharadita de pimentón de la Vera dulce
1/2 cucharadita de romero
1/2 cucharadita de tomillo
1/2 cucharadita de albahaca
2 vasos de vino de pitarra
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Cómo preparar el Cochinillo Frito Extremeño
Para hacer esta receta, necesitamos usar trozos o porciones de forma cuadrada de cocinillo de unos tres cm de lado. Podéis pedirle al carnicero que os lo corte o hacerlo vosotros mismos pues el cochinillo lechal es muy tierno y se corta sin dificultad.
El nombre del cochinillo cochifrito o cuchifrito podría derivar de las dos técnicas que se utilizan para la elaboración de la receta. Se trata de cocer y después freír las porciones de cochinillo. Del "cocido y frito" deriva cocifrito y de ahí cochifrito o cuchifrito. Para hacerlo ponemos una cacerola con agua abundante y sal y cocemos en ella los trozos de cochinillo durante 30 minutos. Durante la cocción se formarán algunas espumas que retiramos, dejando cocer la carne el tiempo indicado. Después ponemos una sartén -o la misma cacerola escurrida y bien secada- con aceite de oliva y lo ponemos al fuego hasta que tenga alta temperatura. Entonces freímos los trozos por tandas y dejamos que se hagan hasta que esté bien dorado y crujiente.
43- COCIDO MONTAÑÉS
Este es un cocido sin garbanzos, lleva alubias blancas y eso sí, tiene chorizo, costilla, morcilla y tocino. Es típico de Cantabria y ayuda mucho en el clima frío de las montañas, cocido montañés. Esta receta que te traemos a continuación es un plato ideal para consumir en invierno, el cocido montañés es una receta típica española siendo este un plato tradicional de la región de Cantabria, destaca por ser un plato con muchas proteínas y fácil de hacer, aunque su preparación no es tan rápida suele ser muy consumido en los hogares españoles.
De las recetas cántabras quizás esta es la que más se conoce de su cocina regional. El cocido montañés es un plato de cuchara contundente y muy completo, ideal para los meses de invierno aunque también se puede disfrutar durante todo el año pues las temperaturas de la comunidad lo permiten. La particularidad de este cocido es la utilización de la berza, una hortaliza que crece en la comunidad y que es insustituible para hacer este plato tan tradicional. Se hace con costilla, oreja, panceta o papada, morcilla y chorizo.
Receta Ingredientes:
500 g de Garbanzo
200 g de Morcillo de ternera.
200 g de Panceta adobada.
4 chorizos.
200 g de Tocino blanco salado.
1 hueso de Jamón curado.
½ Oreja de cerdo.
½ Manita de cerdo.
½ Repollo
100 ml AOVE.
10 g sal.
150 g de fideos.
Cómo Preparar Cocido Montañés
Antes que nada debemos preparar todos los ingredientes para nuestro cocido montañés. Debemos colocar las alubias en reposo desde el día anterior, un mínimo de unas 12 horas deben estar en remojo. Luego antes de cocinarlas las escurrimos bien
Las alubias las colocaremos en una cazuela de buen tamaño junto con la cebolla cortada en trozos pequeños, también a esto el pimiento troceado, la panceta adobada, las costillas y el chorizo. A todo esto le agregaremos agua suficiente hasta que quede medianamente cubierto. Lo ideal sería que el agua sobrepase a las alubias unos 4 dedos.
Al tener todos los ingredientes en la cazuela, ponemos a calentar a fuego medio y una vez empiece a hervir, llegados a este punto iremos removiendo todo para que se integren los ingredientes, se le añade un poco de sal y en caso de quererlo también pimienta negra recién molida. Cada vez que se le forme espuma en la superficie debemos retirarla y remover. Esto lo dejamos cocinar 1 hora 30 minutos aproximadamente.
En caso de que se seque el agua iremos añadiendo más. Mientras se cocinan estos ingredientes iremos pelando las papas y cortándolas en trozos medianos. También cortamos las hojas de berza así como también la morcilla, esta última si se desea se puede dejar entera.
Cuando haya pasado la hora y media agregaremos a nuestro cocido el resto de los ingredientes. Removemos, añadimos un poco más de sal junto a 2 cucharadas de pimentón dulce y dejamos que todo se cocine por unos 40 minutos. Debemos remover ocasionalmente.
Luego de pasar estos últimos 40 minutos verificamos que nuestros ingredientes estén tiernos, en caso de requerir más tiempo se puede dejar otros 15 minutos. Una vez pasado el tiempo ya tendríamos nuestro cocido montañés listo para servir.
44- MERLUZA EN SALSA VERDE
Plato común en el País Vasco. La salsa está hecha a base de ajo, perejil y aceite de oliva. Se le suele poner huevo duro por encima y algunos espárragos como acompañante, merluza en salsa verde. La merluza en salsa verde es un clásico de la cocina española, específicamente de la cocina vasca. Hoy vamos a aprender cómo preparar esta receta cargada de sabores marinos, de pescado y de mariscos, además de inesperadamente fácil, y accesible para el bolsillo. Si tuviera que escoger una de las recetas de pescado y marisco de la gastronomía vasca no sabría elegir entre una buena merluza a la vasca, un guiso de merluza, merluza a la Koskera o la que os presento hoy, merluza en salsa verde. Aunque otras recetas como la merluza a la marinera, la merluza al horno o el famoso Bacalao al Pil-pil no desmerecen ni una miga. Estoy profundamente enamorado de ambas, y además son mis peixes preferidos.
La receta que os presento hoy no es la clásica que inventó Doña Plácida de Larrea en mayo de 1723. Os sorprenderá que tenga fecha exacta… resulta que hay registro escrito de la receta y de quién la cocinó. En una carta a una amiga Doña Plácida comentaba cómo había guisado la merluza, en salsa con abundantes perejil y adornándola con espárragos de Tudela, chirlas y una docena de gordos cangrejos pescados en aguas del Ibaizabal. Merluza guisada y servida en cazuela de barro. Las modificaciones vinieron después, los guipuzcoanos cambiaron chirlas y cangrejos por almejas y le añadieron huevo duro. Así que os dejo con la receta de merluza a la guipuzcoana sin almejas, rica está, y si la queréis con almejas… más rica todavía. Lo importante es que la merluza sea de calidad y los ingredientes a tu gusto.
Receta Ingredientes:
4 lomos de merluza
12 almejas
4 dientes de ajo
½ vaso de aceite de oliva virgen extra
1 cucharada de perejil picado
½ vaso de vino blanco vasco
½ litro de caldo de pescado
100 gr de guisantes cocidos
12 espárragos cocidos
Sal
Cómo preparar la Merluza en Salsa Verde
Primero salpimentamos las rodajas de merluza por ambas caras. Ponemos a calentar una sartén amplia a fuego medio-alto con 3 cucharadas de aceite de oliva. Cuando el aceite coja temperatura, añadimos los dientes de ajo previamente pelados y picados finamente.
Rehogamos los ajos hasta que comience a ponerse doradito. Añadimos la harina y continuamos rehogando durante un minuto más para que dore un poco y pierda el sabor a crudo. Vertemos el vino blanco, el caldo de pescado y agregamos una cucharada colmada de perejil fresco recién picado.
Removemos hasta que todos los ingredientes queden perfectamente integrados. Esperamos a que el caldo comience a hervir y contamos 2-3 minutos más para que el alcohol se evapore y comience a espesar la salsa. Añadimos las rodajas de merluza y meneamos un poco la sartén para que se asiente dentro de la salsa.
Tapamos la sartén y cocinamos durante 5-6 minutos más. Transcurrido ese tiempo, retiramos la tapa y comprobamos si la salsa ya ha espesado, retiramos del fuego y ya tenemos la merluza en salsa verde lista para servir a la mesa.
Las modificaciones vinieron después, los guipuzcoanos cambiaron chirlas y cangrejos por almejas y le añadieron huevo duro. Así que os dejo con la receta de merluza a la guipuzcoana sin almejas, rica está, y si la queréis con almejas… más rica todavía. Lo importante es que la merluza sea de calidad y los ingredientes a tu gusto.
45- ESCALIVADA
Plato típico en Cataluña, pero también en Aragón y Valencia. Se prepara con tomates, pimientos, cebollas y berenjenas. Se asan, se pican en tiras, se les quita la piel y semillas y se condimentan con aceite de oliva y sal, escalivada. La escalivada es una receta tradicional de cocina de algunas regiones en la zona levantina española, como por ejemplo la Comunidad Valenciana, Cataluña o Murcia.
Este fantástico plato consta de verduras asadas al horno o a la parrilla, tales como pimientos, berenjenas, cebollas y tomates, todas ellas aliñadas con un poco de ajo picado y aceite de oliva virgen extra. Generalmente la escalivada se suele servir fría, por lo que se convierte en una opción perfecta para la época calurosa de verano. Aunque es cierto que no apetece encender el horno los días de intenso calor, el resultado de este delicioso plato, sin duda merece la pena.
Receta Ingredientes:
2 pimientos rojos
2 pimientos verdes
2 berenjenas
2 tomates grandes
1 cebolla grande
2 dientes de ajo opcional
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Cómo preparar Escalivada
Comenzaremos por precalentar el horno a 160 grados. Luego, aprovecharemos el tiempo que el horno toma en calentarse, para lavar y preparar los vegetales. El primero será la berenjena. La pelaremos y la cortaremos en cintas gruesas. Después de cortar la berenjena, prepararemos la placa del horno para la cocción de los vegetales. Yo prefiero cubrirla de papel aluminio. Sin embargo, hay cocineros que simplemente la engrasan.
Luego, colocaremos las tiras de berenjena en un bol, las regaremos con un hilo de aceite, y salpimentaremos al gusto. Mezclaremos todo muy bien, para que los trozos de berenjena se engrasen y sazonen de manera uniforme, y entonces los colocaremos sobre la placa para horno. Acomodaremos las cintas de berenjena en una sola capa sobre la placa, para que se cocinen de manera uniforme. Las meteremos al horno justo en el medio y regresaremos a ocuparnos de los otros vegetales. Ahora lavaremos los pimientos. Retiraremos la cabeza, los abriremos y quitaremos las semillas y las partes blancas internas. Luego, cortaremos la piel en tiras.
En el caso de la cebolla, la pelaremos y luego la picaremos en juliana. Al igual que hicimos con la berenjena anteriormente, colocaremos la cebolla y los pimientos en un bol, los bañaremos con un hilo de aceite y salpimentaremos al gusto. Entonces, mezclaremos bien todo. Para continuar, abriremos el horno y acomodaremos los pimientos y cebollas en la placa, en una sola capa, y los dejaremos cocinándose con las berenjenas.
Ahora pasaremos a encargarnos de los calabacines. Los lavaremos bien y los cortaremos en tiras. Salpimentaremos y las llevarnos al horno con los otros vegetales. A partir de este punto hay que vigilar los vegetales con frecuencia. Es esencial que no se vayan a tostar. Dejaremos que se cocinen alrededor de 30 minutos. Mientras esto ocurre, pelaremos los dientes de ajo.
Picaremos cada diente en trocitos lo más menudos posibles y los reservaremos. Cuando se termine el tiempo de cocción de la escalivada, sacaremos los vegetales del horno y también recuperaremos el jugo. Acomodaremos todo en un recipiente, y espolvorearemos con el ajo que hemos picado previamente. También sazonaremos con un hilo de aceite de oliva distribuido sobre la preparación. Prueba el plato para verificar la sazón y si hiciera falta, corrige con más sal y/o pimienta.
46- CONEJO EN SALMOREJO
Uno de los platos más famosos de la cocina canaria. Lo común es acompañarlo con papas arrugadas, también canarias, conejo salmorejo. El conejo en salmorejo es una comida típica de las islas canarias que se ha vuelto muy popular en varias partes del mundo como África o España, posee distintas variaciones de la receta original esparcidas en todo el mundo, siendo consumido en mayor medida durante los meses fríos del año.
La receta de conejo en salmorejo es de las más típicas de la cocina de las Islas Canarias. Una de las primeras cosas que hay que saber es que no hay que confundir la salsa conocida como salmorejo, con el famoso salmorejo andaluz. Ambas son cosas muy diferentes. El salmorejo canario es una salsa elaborada con ajo, pimienta picona, pimiento, agua, aceite y sal. Esta mezcla se utiliza para marinar la carne de conejo antes de cocinarla.
Toma en cuenta que la receta de conejo en salmorejo canaria es diferente a otra receta que existe en la cocina aragonesa. En síntesis, el cambio más importante es que una lleva cebolla, y la otra no. Mucho se ha discutido sobre si uno de estos platos tiene que ver con el origen del otro, pero a nosotros lo que nos interesa es que ambas recetas son deliciosas, aunque hoy nos concentraremos en la más sureña.
Receta Ingredientes:
1 conejo limpio y troceado de unos 2 kg. aprox.
750 ml de vino blanco
250 ml. de vinagre de vino tinto
1 cabeza de ajos unos 15 dientes de ajo aprox.
1 hoja de laurel
1 pimienta picona
1 cucharada de cominos molidos
1 cucharada de pimentón dulce
1 cucharada de tomillo y otra de orégano. Si tenéis
la posibilidad de emplearlos fresco, mucho mejor.
Sal gorda 50 g. aprox.
600 ml. de aceite de oliva virgen extra suave
originariamente se empleaba manteca
Si vemos que se queda sin líquido, agua opcional
Cómo Preparar Conejo en Salmorejo.
Lo primero que tienes que hacer para empezar a cocinar es pelar los dientes de ajo y colocarlos en el mortero junto al pimiento, el chorizo, la cayena y el resto de las especias citadas. Hecho esto, machaca todos los ingredientes hasta que quede una pasta, vierte un poco de vino blanco y mezcla todo.
Ahora, corta el conejo en trozos, o también puedes pedirlo con anterioridad en la carnicera y ahorrarte este paso. Cabe aclarar, muchas personas prefieren cazar el conejo y prepararlo por ellos mismos, pero lo mejor será que lo consigas ya listo para que cumpla con las medidas sanitarias apropiadas y no arriesgarte a sufrir alguna enfermedad, en caso de hacerlo mal. Continúa colocando la carne dentro de un bol, agrega el majado que ya habías preparado antes y mezcla, de manera que el conejo quede impregnado. Después añade las hojas de laurel, mete el recipiente en la nevera y déjalo, como mínimo, unas 12 horas.
Una vez pasado el tiempo establecido, añade un vaso de aceite a una sartén y ponlo a calentar en la cocina, para luego incorporar los pedazos de conejo en tandas y dejar que se doren. Guarda el majado que quede en el recipiente para hacer una salsa más adelante. Cuando hayas retirado todos los trozos de conejo, pon una cazuela al fuego y añade los trozos de conejo frito, el aceite usado en el sartén y, por encima, el majado que sobró de la maceración de la carne. Lo primordial es que el conejo quede completamente cubierto, por lo que vierte agua de ser necesario. Para finalizar, cocina el conejo en la cazuela por unos 40 minutos y ve agregando agua cada que se vaya quedando seco, rectifica la sal y el picante de ser necesario y en el momento que el conejo quede tierno apaga la cocina y sirve.
47- LENTEJAS CON CHORIZO
Las lentejas están muy presentes en la gastronomía española. Cada región tiene su manera de prepararlas. Una de las recetas más deliciosas es la versión con chorizo, receta de lentejas con chorizo. Quizá uno de las recetas más populares en la gastronomía española, sin duda esas son las lentejas. Principalmente ahora que hace un poco más de frío, se antojan más unas buenas lentejas calientes, acompañadas de verduras o de chorizo, el cual es mucho más popular que cualquier otra cosa en España. Otra de las razones por las que aman este platillo, es porque resulta ser muy sencillo de preparar y se puede guardar para varios días.
Que ricas están siempre unas buenas lentejas y aunque muchos lo consideren un plato de invierno, o para el frío, lo cierto es que son tan tradicionales en España que podemos comerlas en cualquier momento sin importar pasar o no calor una vez hemos acabado un buen plato de este manjar. Además, lo mejor de todo es que son muy fáciles de hacer tal y como te explicamos a continuación, con este post dedicado a Cómo hacer lentejas tradicionales españolas.
Receta Ingredientes.
500 gr de lentejas
1 cabeza de ajo entera y algunos dientes extra
2 cebollas
3 tomates
1 pimiento verde
1/2 pimiento rojo
2 zanahorias
chorizo
morcilla
tocino
pimentón dulce
sal y pimienta
perejil
2 hojas de laurel
aceite y agua
Cómo preparar Lentejas con Chorizo
Preparando las verduras. Pelamos la cebolla, el diente de ajo y la zanahoria. Lavamos los trozos de pimientos verde y rojo. Seguidamente cortaremos todas las verduras en trocitos pequeños. Ponemos a calentar en una cazuela dos cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-bajo. Agregamos toda la verdura que tenemos cortada y añadimos una pizca de sal. Pochamos la verdura durante 5-6 minutos y removiendo de vez en cuando hasta que quede bien tierna.
Cómo cocinar lentejas con chorizo
Cuando la verdura esté lista, agregamos las lentejas a la cazuela y rehogamos durante un minuto. Ahora añadimos el tomate frito y rehogamos durante un par de minutos. Vertemos el caldo de verdura hasta cubrir las lentejas unos 3 dedos por encima de ellas. Dejamos durante 45 minutos, contando a partir de que comience a hervir el caldo. Removemos las lentejas de vez en cuando durante su cocción y si vemos que hace falta un poco más de caldo se lo añadiremos.
En una sartén a parte, freímos los chorizos a fuego medio durante 3-4 minutos hasta que queden doraditos. Cuando falten 5 minutos para completar el tiempo de cocción de las lentejas, añadimos los chorizos a la cazuela, removemos un poco y dejamos que se cuezan con las lentejas. Antes de retirar las lentejas con chorizo del fuego, rectificamos el punto de sal si es necesario y servimos bien calentitas a la mesa, emplatadas con un chorizo para cada comensal.
48- DUELOS Y QUEBRANTOS
Huevos, tocineta, y chorizo. Este es un plato histórico, y no lo digo en broma, Miguel de Cervantes lo menciona en la primera página del Quijote, duelos y quebrantos, deliciosa comida española. El Quijote del gran escritor español Miguel de Cervantes, solo hay que leer la primera para encontrar la referencia "Duelos y quebrantos los sábados" en la que hace referencia a la receta que vamos a preparar a continuación. Un plato histórico y tradicional de la gastronomía manchega al que puede también añadirse sesos de cerdo al gusto. Un revuelto delicioso y reconfortante que debe acompañarse de un buen pan.
«En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda.»
Receta Ingredientes:
duelos y quebrantos para 4 personas
5 huevos
120 g de chorizo
120 g de tocino
1 cebolla o cebolleta
3 ajos
120 g de sesos de cerdo opcional
Aceite de Oliva Virgen Extra
Perejil para decorar
Cómo preparar este plato tradicional de Miguel de Cervantes
En un cazo encallaremos los sesos y con un poco de manteca los saltearemos. En una sartén echaremos un chorro de aceite de oliva de forma que sólo cubra el fondo de la misma, y en ella freiremos el tocino y el jamón en trozos. Batimos y salpimentamos los huevos y lo añadimos a todo lo anterior. Nuestra sugerencia es servir con unos tostones de pan frito.
Empieza la receta de duelos y quebrantos cortando la panceta en tiras medianas y también el chorizo en trozos pequeños. Coge una sartén amplia, añade un poco de aceite y coloca la panceta cortada, dórala a fuego fuerte. Cuando esté dorada retírala. En la misma sartén añade un poco de aceite si hace falta, incorpora el chorizo y cuando esté cocinado, apaga el fuego.
Se puede utilizar la misma sartén donde has salteado el tocino y el chorizo, pero si no quieres que adquiera un gusto muy fuerte, utiliza otra sartén, colócala y añade la panceta y el chorizo. Coloca los huevos en un plato y añade un poco de sal, ten en cuenta que el chorizo aporta mucho sabor. Rompe los huevos y colócalos en un plato.
Añade los huevos encima del chorizo y la panceta, debes tener el fuego suave para que se vayan cuajando los huevos y los ingredientes adquieran sabor. Remueve los huevos hasta que consigas la consistencia deseada. Lo ideal es que queden unos huevos revueltos cremosos. ¡Ya casi está lista la receta de duelos y quebrantos!
Cuando estén los huevos a vuestro gusto, retíralos enseguida de la sartén porque si no se siguen cocinando. Sirve enseguida con unos buenos trozos de hogaza de pan de pueblo. Sirve este plato en cazuelas de barro junto con un buen vasito de vino. ¡Listos y a disfrutar! Cuéntanos en los comentarios qué te ha parecido este plato de Don Quijote.
49- CHURROS CON CHOCOLATE
Esta delicia es perfecta para desayunar, o merendar, o para las madrugadas luego de andar de fiesta. Lo ideal es que el chocolate sea oscuro y esté espeso, churros tradicionales. Si pensamos en un buen desayuno seguro que se nos ocurren un montón de opciones posibles, ya sean dulces o saladas, clásicas o más innovadoras, pero casi con toda seguridad en ese listad no faltará esta receta tan tradicional como deliciosa y que solemos tomar para hacer un poco más especial el desayuno o incluso como merienda, postre o cuando hemos trasnochado.
En esta receta explico cómo hacer churros con chocolate a la taza, todo casero y con el sabor y la textura que necesitan. Los churros, bien crujientes por fuera y tiernos por dentro, los preparo teniendo algunos detalles en cuenta y trucos que os cuento más abajo para que no queden nada aceitosos y no resulten pesados.
En cuanto al chocolate a la taza, olvídate de los preparados en polvo y prepáralo con un buen chocolate negro en tableta, leche y un truquito para espesarlo (en casa nos gusta bien espeso), ideal para mojar los churros y disfrutar al máximo de esta combinación tan nuestra. Yo opino que es ideal en cualquier época del año, solo que en invierno lo del chocolate calentito apetece especialmente y en verano suelo dejar que se enfríe un poco.
Receta Ingredientes:
Para los churros:
250 ml de agua.
150 gr de harina de trigo.
Una pizca de sal.
1 cucharadita de postre de mantequilla unos 10 gr.
Abundante aceite para freír, puedes utilizar uno de oliva suave
o de semillas o girasol, yo he necesitado 1/2 litro.
Azúcar para espolvorear por encima.
Para el chocolate a la taza casero:
250 ml de leche.
100 gr de chocolate negro en tableta.
10 gr de harina de maíz o maicena.
Cómo Preparar este delicioso Plato de Churros con Chocolate
Vamos a empezar esta deliciosa receta de churros de chocolate. Antes de empezar, quiero recalcar que es una receta en la cual usamos aceite caliente y puede ser peligroso tener niños cerca. Dicho esto, vamos a ponernos manos a la masa. Empezamos mezclando la harina junto con los polvos para hornear.
Cuando lo tengamos listo lo reservamos. Por otro lado ponemos en un cazo el agua a hervir. Cuando empiece a hervir, añadimos la harina de golpe y con ayuda de una espátula, lo removemos enérgicamente. Cuando veamos que empieza a ligar la masa, añadimos el cacao en polvo amargo y mezclamos hasta que ya no podamos más. Seguidamente añadimos el huevo y con ayuda de una batidora de varillas, lo batimos hasta que nos quede una masa sin grumos y densa.
Ahora cogemos una churrera, y la vamos a rellenar. Lo mejor es hacer esta receta con churrera, puesto que al ser a presión evitamos que quede aire dentro de la masa y que se produzcan pequeñas explosiones al freírlos. He probado muchas churreras y ninguna me había dado buen resultado, pero si sois churreros como yo, os la recomiendo sin duda. Una vez tengamos la churrera rellena, tapamos con el dedo el orificio de salida de la masa y con la otra mano, rodamos la parte superior para que se prense la masa. Cuando notemos presión en el dedo, lo levantaremos y veremos que la masa sale por si sola. Eso quiere decir que la masa ya no tiene aire y que es segura usarla.
Ahora solo nos queda dar forma a nuestra masa, yo voy a darles forma de lacito, pero podéis darle la forma que queráis. Seguidamente, hay dos opciones, freírlos directamente o congelarlos 15 minutos y después freírlos. Yo personalmente prefiero congelarlos, ya que así al freírlos no pierden la forma y son más fáciles de manipular. Los freiremos un minutito por cada lado, aquí tened en cuenta de que estamos usando aceite caliente y que puede ser peligroso, por lo que os recomiendo que tapéis la cacerola mientras se fríen. Cuando los tengamos fritos, los vamos a ir dejando sobre un plato con una hoja de papel de cocina para que absorba el aceite sobrante. Y como toque final, a mi me encanta rebozarlos en azúcar, pero podéis comerlos como más os gusten.
Para aromatizar un poco los churros puedes incluir ralladura de naranja o de limón, un poco de canela o esencia de vainilla o incluso unas gotitas de aroma de azahar a la harina para que al mezclarla con el agua se integre bien. También puedes aromatizar el propio chocolate, por ejemplo añadiendo piel de naranja a la leche mientras la estamos calentando o un palito de canela, y en cuanto hierva dejar la leche reposar 30 minutos para que coja bien los sabores. Después retira la piel o la rama y empieza la receta con normalidad, llevando la leche a ebullición.
50- PATATAS A LA IMPORTANCIA
Patatas que primero se rebozan y fríen y luego se cuecen en una cazuela de barro con un caldo especiado. Como muchas otras recetas españolas, si le pones chorizo, mejor, cazuela de barro con patatas a la importancia. Estas patatas a la importancia están buenísimas, quedan las patatas tiernas y muy sabrosas. La receta se realiza en dos fases, primero una fritura y después un guiso, pero ambas muy fáciles y el resultado bien merece la pena. El toque más especial lo aporta un majado de varios ingredientes entre los que se incluye el azafrán, que aporta un aroma y también un color fantástico al plato. Yo no soy muy aficionada a las frituras pero siempre digo que si hay que hacerla para esta receta no hay otra opción, que se haga bien, así que más abajo os dejo los trucos para freír las patatas perfectamente y que queden con una costra finita y nada aceitosas. Al guisarlas después terminan de cocinarse y quedan tiernas y súper ricas, ideales como guarnición de carnes y pescados pero sobre todo como plato principal.
Receta Ingredientes:
3 patatas de tamaño medio o 2 grandes.
Harina de trigo.
2 huevos.
1 cebolla grande o 2 más pequeñas.
3 dientes de ajo.
Unas ramas de perejil fresco.
Unas hebras de azafrán, 5 o 6.
100 ml de vino blanco.
Agua o caldo de pollo, la cantidad que
necesites para cubrir las patatas.
Abundante aceite para freír y sal.
Cómo preparar este plato
Comenzamos lavando las patatas y cortándolas en rodajas. A mi me gusta dejarles la piel pero podéis pelar las patatas igualmente. Las cortaremos de un grosor de 1 o 2 cm. Salpimentamos las patatas y las pasamos por harina y por los huevos batidos. Tenemos que quitar bien el exceso de harina para que no se queden pegotes. Ahora tenemos que freír las patatas a fuego medio en abundante aceite de oliva un minuto por cada lado. Las pasamos a un papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
Pochamos a fuego suave la cebolla con un majado de los ajos y un poco de perejil. Lo dejamos muy lento durante unos 15 minutos hasta que quede blandita. Incorporamos una cucharadita de harina y rehogamos para quitarle el sabor a crudo. Agregamos el vino blanco y las patatas. Dejamos que se evapore el alcohol. Cubrimos con el caldo de pollo casero y ponemos unas hebras de azafrán. Dejamos cocinar a fuego lento durante 20 minutos. Yo lo tuve 30 minutos porque necesitó más tiempo. Comprobareis que las patatas están listas cuando las pinchemos y estén blanditas las rodajas de patatas. Servimos con perejil picado por encima.
51- UN CHULETÓN DE ÁVILA
Este corte de carne es fabuloso. suave, jugoso y…gigante. Pero no te equivoques, el chuletón de Ávila debe acompañarse con patatas fritas y algo de ensalada, nada más, chuletón de Ávila El chuletón de Ávila o de ternera avileña es el plato más típico de la cocina tradicional abulense. Saber cocinarlo no es complicado, pero requiere empeño y tener en cuenta una serie de recomendaciones. Y lo más importante: contar con una buena materia prima. ¡Y en Carnicerías Sastre tenemos la mejor! La gastronomía de Castilla y León. Es muy variada de norte a sur, y de este a oeste. Hoy nos vamos a detener en la zona sur. Más en concreto en la Sierra de Gredos, donde nos enseñaron a preparar un riquísimo chuletón de Ávila.
Aunque nos gustaría decir que existe un gran secreto, pero, el secreto es muy simple, la buena calidad de la carne. Nosotros hemos tenido suerte de encontrar una carnicería especializada en carnes abulenses de Navalonguilla, una pequeña localidad de la zona sur de Gredos. Este tipo de cocina tradicional que está recuperando en los últimos tiempos, terreno frente a la explotada cocina de autor, recupera el espíritu de la gastronomía tradicional española, y más concretamente de la abulense. Un buen ejemplo de la cocina de producto es posiblemente el plato estrella de la gastronomía de Ávila, el Chuletón de Ávila, un producto de una calidad tan contrastada, que con el simple aderezo de aceite y sal te transportarán en tu propia casa.
Receta Ingredientes:
Chuletón de Buey de Ávila 750grs/persona
Sal gorda
Aceite
Guarnición:
Patatas
Pimientos
La Carne al Punto de Preparación
Poco hecha: Para presentar la carne así debes cocinarla durante poco tiempo a una temperatura muy alta. El interior estará templado, aunque sin cocinar. Sangrante: El interior de la carne quedará rojo. Es el clásico “vuelta y vuelta”. Al tacto tiene que estar muy blanda y jugosa. Tendrá un tono leve rosado que rodeará un centro rojo. Al punto: Esta forma de degustar el chuletón de Ávila es la que más “adeptos” tiene. Se consigue con un cocinado más lento y con una temperatura más baja en la sartén, plancha o parrilla. Quedará tostada por fuera y rosada por dentro pero, no sangrará. Muy hecha: Requiere de un cocinado muy lento. Si la presionamos, notaremos que está muy dura porque ha perdido todos sus jugos y hasta su sabor final.
Cómo preparar este plato de Chuletón de Ávila
Un buen chuletón tiene que ser siempre gordito. Para que este en su punto deberá estar tostado por fuera y rosado por dentro. De todas formas podremos jugar con el tiempo para que nos quede a nuestro gusto. Es aconsejable no cocinarlo directamente sacado del frigorífico cuando la carne esta muy fría, lo mejor es que se encuentre a temperatura ambiente. Si se hace en una parrilla de metal, si queréis echar aceite hacerlo pero muy poco. Si utilizáis plancha que este muy caliente. Y simplemente echar sal gorda y ponerlo sobre la superficie caliente, solamente dar una vuelta por cada lado, sin marearlo, dejando más o menos tiempo según el gusto. Sacar y emplatar, tapar con un paño un minuto para que se impregne en su propio jugo. Como guarnición hemos empleado en esta ocasión unas patatas panadera y unos pimientos. Y ahora unos buenos cubiertos y a disfrutar de esta magnifica carne.
52- OLLA PODRIDA
La olla podrida es un cocido tradicional de Burgos hecho con alubias rojas y diferentes partes del cerdo, además de chorizo, morcilla y verdura. Es una receta contundente, perfecta para el invierno. Que su nombre no te asuste: el nombre viene de «olla podrida»… de «poder», es un plato poderoso, olla podrida. La olla podrida es un plato que tiene origen en Castilla. Como todos los platos tradicionales de nuestra cultura gastronómica, admite variedades dependiendo de la zona donde se cocine. Como todo guiso que se tercie, gana intensidad si se elabora la víspera. Es una receta consistente que remonta su historia a la Edad Media y su nombre, que puede crear confusión, deriva de la originaria “olla podrida” que hacía referencia al poder energético de este maravilloso y tradicional plato cocinado a fuego lento.
La olla podrida de Burgos se cree que es el origen de los cocidos actuales. Los amantes de los platos de cuchara, entre los que me encuentro, vamos a estar de enhorabuena. Os voy a enseñar a preparar una olla podrida u olla "poderida" que es como se llamaba en la antiguédad. Se supone que era un plato de los "poderosos" mientras la gente pobre debía conformarse con platos más humildes. Luego el paso del tiempo nos ha llevado a la nomenclatura actual seguramente por la deformación habitual del lenguaje que tiende a buscar formas más fáciles de pronunciar las palabras, como es el caso. Se trata de un potaje de alubias espectacular bien acompañadas con carne de cerdo, carne de cordero, verduras y hortalizas. Podéis haceros una idea del sabor que tendrá semejante guiso, que se puede aprovechar para hacer en invierno, cuando los platos de cuchara entran fenomenal. Que no te asuste su nombre, la olla podrida es un delicioso plato tradicional de la cocina castellana, de Burgos para ser más precisos, con mucha pero mucha historia. Se trata de un guiso hecho con alubias rojas y diferentes carnes. Por supuesto, es un plato contundente, de esos que te dejan inactivo durante un buen rato.
Receta Ingredientes:
300 g de alubias
1 morcilla de Burgos
300 g de costilla adobada
1 chorizo
1 panceta
1 cebolla
1 puerro
1 pata adobadas de cerdo
1 oreja adobada de cerdo
1 zanahoria
1 pimiento verde
Para el relleno
2 huevos
Pan rallado
Ajo en polvo
sal
perejil
Tocino
Cómo Preparar Plato de Olla Podrida
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 3 horas
Tiempo total: 3 horas y 15 minutos
Raciones: 4
Categoría: plato principal
Tipo de cocina: castellana
Calorías: 617 kcal por ración
Dejar en remojo las carnes adobadas durante 12 horas.
Poner la alubia en agua fría, añadir media cebolla y dos dientes de ajo, tapar y hervir a fuego suave durante un par de horas. En una olla rápida, cocer durante media hora la panceta, las costillas, las manitas y la oreja adobadas. Reservar y añadir el caldo a las alubias. Para hacer el relleno, batir los huevos, añadir la miga de pan, un poco de ajo picado, un poco de perejil y tocino frito y picado. Mezclar todos y freír.
Mientras se hace, enrollar en la sartén como si fuera una tortilla redondeada cilíndrica. Reservar. Cuando falten 10 un minutos para que las alubias estén cocidas, freír un par de ajos cortados en láminas. Cuando esté dorado, añadir el pimentón. Sumar el aceite, los ajos y el pimentón, el chorizo y la morcilla a las alubias. Servir las alubias en plato hondo con una piparras y las carnes y el relleno en un plato aparte.
53- OLLA DE TRIGO ALMERIENSE
Cocido tradicional de Almería, que se prepara con garbanzos, cerdo tocino, oreja…, algunas piezas de pollo, patatas, trigo y muchos hinojos, olla de trigo almeriense. En los campos de Vera, en las Tierras de la Baria, los griegos y romanos no solamente buscaban la plata, sino también los granos de oro de aquellas espigas que hacían de los campos, un mar amarillo al mecerse con el viento. Para los griegos el cerdo era un manjar, y los espartanos elaboraban un bodrio hecho de carne y sangre que sería un antepasado de las morcillas. Las siguientes generaciones aportaron más materias primas y nosotros, con la gracia natural de esta tierra, hemos ido poniendo cosas en el puchero hasta conseguir la Olla de Trigo Almeriense.
Receta Ingredientes:
Ingredientes para 4 comensales:
un puñado de garbanzos por persona
150 gr. de trigo
un manojo de hinojo fresco
un rosco de morcilla de cebolla
un espinazo de cerdo salado
costillas saladas
un trozo de tocino
1 hueso de manteca
1 hueso de jamón
3 patatas medianas
Cómo preparar Olla de trigo Almeriense
Poner en remojo los garbanzos y cocer el trigo con un pimiento seco y una cabeza de ajos, un día antes de hacer el potaje. Colar el trigo, quitar el pimiento y los ajos y tapar hasta el día siguiente. Antes limpiar el trigo con las manos y soplar para que suelte la cascarilla. Poner en una olla todas las carnes y huesos menos la morcilla.
Cuando empiece a hervir, echamos los garbanzos. Cuando los garbanzos estén tiernos, sacamos la “pringue” y agregamos el trigo y los hinojos picaditos, dejamos cocer unos 15 minutos. Echamos las patatas y el rosco de morcilla si a todos los comensales les gusta la morcilla, la podéis cortar para que se suelte y así le dará más sabor.
Probáis de sal por si le hiciese falta, ya que con el espinazo y costillas saladas es suficiente. Normalmente se sirve el trigo en el plato y la pringe a parte, pero en la última cocción podemos echar toda la pringue y que se liguen todos los sabores. Hay quien pone a hervir por la noche anterior el trigo solo, durante una media hora, después lo aparta del fuego, lo tapa y lo abriga, para que siga hinchándose. Otros utilizan en lugar de judías, unos garbanzos, pero como la solemos hacer por esta parte de Almería es así.
54- MENUDO GITANO CALLOS A LA ANDALUZA
Este delicioso plato no es apto para el verano. Lo ideal es comerlo luego de bien entrado el otoño, cuando el cuerpo empiece a necesitar calorías de más, menudo gitano. La gastronomía de Cádiz se ha visto influenciada por diversas culturas gracias a su puerto marítimo, en donde desembarcaron inmigrantes de todo el mundo. El menudo gaditano tiene un poco de aquí y allá, pero su principal característica es la utilización de los restos de carne vacuna generalmente callos, a los que se los llama menudos.
Es un plato que si está bien hecho, es exquisito. Debe estar impecable, en cuanto a limpieza. También es verdad que o gusta mucho o nada. En Andalucía, se prepara en casi todos los bares de tapas, pero a veces es incomible. Tenemos una lista de los buenos y en los que no se deben pedir jamás... A nosotros nos encanta, pero en cantidades pequeñas, ya que en general todo lo de "casquería" es un poco pesado para el estómago. Por eso hay que comerlo solo de vez en cuando. Pero ahora con los fríos invernales vienen divinamente.
Antes de que se inventara el refrigerador, la carne se transportaba bien salada. Los despojos eran la única fuente de proteínas que podían comprar las clases más bajas, que los preparaban en guisos muy condimentados y picantes. Actualmente son un manjar especial para los días de invierno, cuando apetecen comidas suculentas, calóricas, que den energía suficiente para hacer frente al frío intenso.
Receta Ingredientes:
1 kg de menudo de cerdo o ternera limpio
Una cucharada de pimiento molido
1 punta de pimentón picante
Un vaso de vino blanco
Un chorrito de aceite de oliva
1 cebolla mediana
5 ó 6 dientes de ajo
1 pimiento verde
Laurel, perejil, sal
1 trozo de chorizo de guiso,
50 gr de jamón serrano en taquitos opcional
1 trozo pequeño de tocino de papada opcional
1 manita de cerdo limpia opcional
Cómo preparar menudo Gitano Callos a la Andaluza
Aunque compres los callos bien limpios siempre es bueno darle un buen repaso en casa para quedarnos tranquilos. Yo lo que hago es enjuagar bien bajo el grifo los callos y el trozo de pata. Luego los pongo en un cacharro con abundante agua, exprimo medio limón y deja durante 1 hora en remojo con el medio limón dentro. A continuación tiro el agua, y vuelvo a poner en remojo con el medio limón restante durante otra hora. Si vas corto de tiempo añade todo el limón de una vez y deja el tiempo que puedas.
Ahora ponemos los callos y el trozo de pata en una olla y los cubrimos con agua. Ponemos a fuego fuerte y cuando hierva el agua dejamos a fuego medio durante 10 minutos. Luego escurrimos los callos tirando toda el agua no la conserves. Ahora ya están los callos listos para cocinar. Pon los callos y el trozo de pata de nuevo en la olla, vuelve a cubrir con agua con un litro será suficiente. Añade el pimentón, la cucharada pequeña de sal, la cebolla con los clavos en grano clavados en ella, la zanahoria pelada, el tomate con un par de pinchazos para que no reviente, la manteca de cerdo y la hoja de laurel. Deja al fuego hasta que los callos estén tiernos unos 40 minutos en olla express o alrededor de 2 horas en olla normal a fuego medio alto.
Cuando los callos estén tiernos añade los garbanzos, el chorizo cortado en trocitos o rodajitas y el jamón a taquitos. Deja a fuego medio hasta que estén blandos los garbanzos no te pongo tiempo porque variará mucho dependiendo del tipo de garbanzo y de la dureza del agua. Cuando los garbanzos estén casi tiernos pon en un mortero los ajos pelados, la pimienta de cayena y la hierba buena picada y machaca bien. Añade este majado a los garbanzos e incorpora también las especias para el menudo. Remueve el potaje y deja a fuego medio bajo al menos 20 minutos para que los sabores se mezclen y el potaje coja cuerpo. Prueba de sal y si hace falta puedes añadir un poco más de sal o incluso de especias.
Si te quieres comer un Menudo de categoría lo que tienes que hacer es guardar el potaje en el frigorífico hasta el día siguiente y verás la diferencia en cuanto a sabor, te prometo que no tiene nada que ver. Si no puedes aguantar más sirve ya mismo y fuera de la cocina, pero no te olvides del pan.
55- TURRÓN DE JIJONA
El turrón blando de jijona es un clásico navideño. Lo mejor de todo es que puedes aprender a hacerlo siguiendo el link de arriba, cómo-hacer-turrón-blando-casero-jijona. Desde tiempo inmemorial los jijonencos han usado lo que les brinda su tierra. Campos cubiertos de almendros y panales de miel donde abundan el romero, el espliego y el tomillo. La dulce confitura dejó de llamarse simplemente turrón para, desde hace ya más de cinco siglos, llamarla Jijona y Turrón de Alicante. Para que el turrón pueda quedar al amparo de la Indicación Geográfica Protegida debe seguir unos rigurosos y ancestrales procesos de elaboración. De las cocinas familiares se ha desarrollado una industria que ha ido creciendo sólida hasta nuestros días. La tierra de Jijona es eso, la raíz profunda de una cultura vinculada al turrón donde un pueblo, Jijona, como un gran árbol, ha sabido cultivarla, desarrollarla y difundirla.
Nuestra gastronomía atesora multitud de dulces navideños tradicionales por todas las regiones y pueblos, y entrar a debatir cuál es mejor sería absurdo. Pero no podemos negar que los turrones de Alicante son clásicos imbatibles, con el turrón de Jijona o "blando" quizá e Curiosamente, con los mismos ingredientes se obtienen dos productos tan distintos como son el turrón duro y el blando, que pueden dar lugar a debates pasionales en defensa de uno u otro. El turrón blando es uno de los más típicos junto al duro, también como conocidos como Jijona blando y Alicante duro cuando tienen el sello de denominación de origen. Posiblemente sea el turrón más difícil de imitar debido a la maquinaria exclusiva que se utiliza para ello, los conocidos "boixets". Es por eso que te traemos la receta definitiva para poder hacer turrón en casa.
Receta Ingredientes:
Almendra molida 300 g Miel clara 200 g Azúcar 50 g Canela molida opcional 2 g Ralladura de limón opcional Sal 1 pizca 1 g Clara de huevo pasteurizada 30 g
Cómo hacer turrón de Jijona o turrón blando
Dificultad: Fácil Tiempo total 45 m Elaboración 15 m Cocción 30 m Reposo 6 h
Cómo preparar Turrón
Con todos los ingredientes listos en el mármol de la cocina, ya podemos empezar a elaborar nuestro auténtico turrón de Jijona, una de las joyas dulces de nuestro país. Lo más importante es que estará hecho de forma totalmente artesana. En primer lugar nos encontramos con una tarea un poco difícil; debemos moler las almendras en casa, podemos evitar dicha tarea comprando directamente la almendra totalmente molida, si el producto es de calidad no afectara en ningún caso que ya esté molida. Por otro lado si deseamos moler nosotros mismos las almendras; podemos utilizar una trituradora; debemos verter las almendras repeladas y tostadas en la trituradora en pequeñas dosis, de esa forma evitaremos que las almendras se aceiten, y por lo tanto pierdan calidad y propiedades para nuestro turrón artesano.
sirvent-turrón-jijona-artesano Una vez tengamos hecho esto, vertemos en una sartén la miel y el azúcar; lo deberemos calentar a fuego medio y removerlo con una cuchara de palo, hasta que los ingredientes se homogenicen; el azúcar y la miel deberían haber formado una buena mezcla bien espesa después de todo el proceso. Sacaremos la sartén del fuego y le verteremos la clara de huevo, ya batida; lo removeremos todo junto; si veremos a simple vista que surgen grumos, deberemos continuar removiendo. Sabremos que la masa esta lista cuando no haya grumos y la mezcla será de un color muy claro.
listo para finalizar nuestro turrón de Jijona artesano.
Ya tenemos una buena mezcla lista, así que es hora de verterle las almendras ya molidas; de esa forma uniremos todos los ingredientes, y quedarán bien homogenizados. La mezcla la pondremos en un molde, o varios, dependiendo de la cantidad que hayamos hecho. El siguiente paso; lo haremos de forma totalmente artesanal; se trata de utilizar dos moldes iguales; uno ya contiene toda la masa; el otro servirá para colocarlo encima del molde lleno, con peso, el único objetivo es prensar la masa del futuro turrón. Simplemente con este proceso de prensado y totalmente auténtico, deberemos esperar unas cinco o seis horas para poder disfrutar de nuestro auténtico turrón de Jijona artesano.
56- ATASCABURRAS
Plato de invierno, de días de nieve. Se hace con bacalao, patatas, aceite de oliva, ajo, nueces y huevo duro. Aquí tienes una receta bien explicada para prepararlo, atascaburras. El atascaburras o ajo mortero, es una receta tradicional manchega que se suele comer en invierno, justo cuando caen las primeras nieves del año. Un plato humilde de nombre más que sugerente que consiste en un puré de bacalao con patatas. Se prepara a lo largo y ancho de Castilla La Mancha y es un plato de ingredientes sencillos pero muy nutritivo y energético, de ahí su nombre. Se cuenta que lo inventaron unos pastores hambrientos en un día de frío en la sierra, y al comerlo afirmaron que «harta hasta a las burras«. Aunque esta su origen esta en la cocina tradicional judía que ha pasado a la cocina tradicional manchega a través de los judíos conversos, como otras muchas recetas de nuestro país.
Receta Ingredientes:
Para 4 personas Bacalao desalado
350 g Patata de tamaño medio 4 Laurel 1Diente de ajo 3 Ñora 3
Aceite de oliva virgen extra
Perejil Huevo 4 Nueces Pimentón dulce Nueces Sal
Dificultad: Fácil Tiempo total 50 m Elaboración 10 m Cocción 40 m
Preparación de Atascaburras
Cocemos las patatas en agua con sal, las pelamos mientras siguen calientes y las pasamos a una bandeja o bol de servicio. Machacamos el ajo sin el germen central en el mortero o lo pasamos por un triturador de ajos. Lo añadimos a la patata caliente y vamos mezclando mientras con una espumadera o un tenedor trituramos las patatas. Se añade también poco a poco el aceite de oliva y se sigue mezclando hasta que quede como un puré espeso. Yo no lo trituro tanto porque me gusta que queden trocitos de patata, hazlo a tu gusto. Incorporamos el bacalao desmenuzado y la cebolleta y mezclamos bien. Servimos templado con los huevos duros troceados y una nueces coronando el plato. A mi me gusta poner también unas pasas porque van muy bien con el bacalao.
57- LACÓN CON GRELOS
Famosísimo y delicioso plato de la gastronomía gallega hecho con lacón cerdo, chorizo, patatas y grelos. Probarlo una vez es enamorarse para siempre, lacón con grelos. La cocina tradicional gallega es fundamentalmente una cocina de producto y, como tal, su base es un producto de calidad y platos de elaboración sencilla. En este caso para hacer un buen lacón con grelos vamos a conseguir un buen lacón salado, si es casero mucho mejor, y si tenemos que comprarlo nos aseguraremos de hacerlo en nuestra carnicería de confianza. Lo mismo ocurre con los chorizos. Patata gallega y grelos de la zona de Ordes, próxima a Santiago, que con las heladas que soportan, hace que sean tiernos y sabrosos como ninguno.
Los productos típicos con los que se elabora. En algunas la diferencia no es mucha, pero en otras ocasiones como en ésta receta se nota en cada uno de los ingredientes. Esta receta de lacón con grelos es tradicional gallega y, por ello, va repleta de riquísimos ingredientes gallegos en los que siempre destaca su calidad. El clásico lacón salado, los riquísimos grelos que bien se pueden sustituir por berza si no están en temporada, las famosas patatas gallegas y los deliciosos chorizos ahumados gallegos. De todos ellos, quizás el lacón y los grelos o berza son insustituibles, y partiendo de eso siempre que puedo intento conseguir patata gallega suelo comprarla por internet y también chorizos gallegos. Personalmente pienso que no hay que renunciar a una receta así aunque no tengamos los ingredientes más «auténticos», y podemos seguirla y prepararla con los que tengamos más a mano.
Receta Ingredientes:
Tiempo de preparación: 10 minutos Tiempo de cocción: 3 horas Tiempo total: 3 horas y 10 minutos Raciones: 4 Categoría: plato principal Tipo de cocina: gallega Calorías: 1624 kcal por ración Ingredientes del lacón con grelos para 4 personas 1 kg de lacón salado 1 manojo de grelos 1 kg 4 patatas 3 chorizos gallegos especiales para cocer.
Cómo preparar Lacón con Grelos
Pon la carne en una olla, , cubrir con agua fría y dejar cocinar a fuego medio. Cuánto tiempo debe cocer. Depende de la olla que utilices, si es una olla rápida a partir de los 15 minutos desde que suba la válvula hay que empezar a comprobar. Ponemos la olla debajo del grifo para bajar la presión o dejamos que se baje sola, abrimos la olla y vemos como va la carne, retiramos aquellas partes como costilla, etc. que ya estén cocidas, y continuamos cociendo el resto hasta que esté en su punto. Yo me he comprado una olla grande y cuezo en olla tradicional el tiempo necesario. una hora y media aprox.
Probamos el caldo y vemos si necesita sal y se la añadimos. Una vez tenemos cocinada la carne la retiramos para una fuente .Tapamos la carne con papel de aluminio y guardamos en el horno encendido a 30º o 40º para que se mantenga caliente. En el caldo limpio que nos ha quedado de cocer la carne continuaremos el resto de la elaboración, probamos el caldo para ver cuanta sal debemos añadir antes de proseguir. Este es el momento de guardar parte del caldo para hacer filloas. Añadimos los grelos bien limpios y por encima de estos, las patatas enteras y los chorizos. Subimos el fuego y dejamos cocer en olla a presión 15 minutos desde que suba la válvula y en olla tradicional unos 35 minutos. Comprobamos el punto de cocción pinchando una patata con un brocheta, en cuanto estén las patatas la verdura estará en su punto. Servimos caliente y regamos con un chorrito de aceite de oliva virgen.
58- ARROZ CON COSTRA
Otra plato de la comunidad valenciana hecho a base de arroz. En este caso con salchichas y chorizo. Luego de la cocción se le pone huevo por encima y se hornea para que se cocine y se haga la «costra», arroz con costra. El arroz con costra, arròs amb costra en valenciano, es un plato típico de la zona sur de Alicante. Se trata de un arroz seco que se elabora con diferentes carnes y embutidos y que tiene la particularidad de terminarse al horno, con una capa de huevo batido por encima que al cuajar forma la costra. De ahí ese nombre tan particular.
El arroz es más que un producto distintivo de la Comunidad Valenciana. Es una forma de vida para todos sus habitantes, que han logrado alzar recetas de todo tipo con este ingrediente principal a lo largo de la historia. Desde platos de arroz con marisco a recetas de la tierra con verduras. Una riqueza inigualable. Así, en cada rincón del territorio valenciano encontramos una variedad arrocera diferente, habiendo algunas con mayor peso mediático como el arroz con acelgas valenciano, la paella valenciana o el arroz al senyoret, entre un sinfín de tipos.
Receta Ingredientes:
Tiempo de preparación: 10 minutos Tiempo de cocción: 55 minutos Tiempo total: 1 hora y 10 minutos Raciones: 6 Categoría: plato principal Tipo de cocina: valenciana Calorías: 163 kcal por cada 100 g
Ingredientes del arroz con costra al horno para 6 personas
300 g de conejo para guisar 400 g de pollo para guisar 150 g de butifarra negra 150 g de butifarra blanca 125 g de longaniza blanca 125 g de longaniza roja 200 g de tomate triturado 400 g de arroz bomba 1,2 litros de caldo de carne o de puchero Unas hebras de azafrán 100 g de garbanzos cocidos 6 huevos camperos Ralladura de limón Perejil fresco Aceite de oliva virgen extra Sal
Preparación de Arroz con Costra
Cortamos el embutido longaniza roja y blanca, botifarrón y blanquet en trozos de bocado. Las doramos en una cazuela con un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Cocinamos durante 7 minutos a fuego medio y reservamos. En la misma cazuela incorporamos el pollo troceado. Lo cocinamos durante 10 minutos por todos sus lados. También se podría hacer con conejo, sustituyendo al pollo.
Incorporamos el tomate triturado y seguimos cocinando 5 minutos más. Añadimos el embutido que tenemos reservado. Agregamos también los garbanzos cocidos e integramos bien. Vertemos el arroz en la cazuela y lo rehogamos, con el resto de ingredientes, durante 2 minutos antes de cubrirlo con el caldo, una pizca generosa de sal recordad que el embutido es salado, no os paséis y el azafrán. Es necesario que el caldo esté caliente en el momento de incorporarlo. Cocinamos el arroz a fuego medio durante 10 minutos, debe de quedar un poco meloso, incluso con un poco de caldo de más.
Horneado del arroz con costra
Batimos los huevos bien, que espumeen un poco. Opcionalmente se le puede añadir un toque de ralladura de limón y nuez moscada, pero va al gusto de cada casa. Cubrimos el arroz con los huevos batidos, salamos y espolvoreamos con perejil fresco troceado. Con el horno previamente caliente a 220º C introducimos la cazuela y horneamos el arroz 10 minutos más. Se verá como el huevo sube y se forma una costra doradita. Retiramos la cazuela del horno y servimos.
59- PERCEBES GALLEGOS
Los percebes se deben comer cocidos con sal y más nada. No te dejes llevar por su apariencia extraterrestre, su carne es deliciosa, percebes. La receta de percebes a la gallega es típica de esta región del norte de España. Los percebes son crustáceos que crecen sobre las rocas que se encuentran en el mar, específicamente en donde baten las olas. Se pueden distinguir dos tipos: los de sol y los de sombra. Estos últimos son más alargados y contienen mucha agua en su interior, lo que provoca que, al abrirlos, salpiquen mucho. Por ello, se recomiendan los percebes de sol, aunque el sabor de ambos es similar. En Galicia, las mejores zonas de percebes son Cedeira y la ría de Corme, donde se celebran los “percebes do Roncudo”.
Si bien es cierto que suele ser un marisco prohibitivo por su precio, en verano y debido a que las condiciones climáticas son más propicias para su recogida, se pueden encontrar en el mercado a un precio más normal y nos podemos dar un capricho. De todas formas, si tuvieseis ocasión de ver como se baten sin piedad las olas sobre los percebeiros, os parecerían muy baratos porque la vida no tiene precio y muchos percebeiros y percebeiras han perdido la suya recogiendo percebes. Realmente son imágenes que dan escalofríos. Los percebes son alimentos del mar con propiedades nutricionales. Aportan selenio al organismo que ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. También contienen vitamina B12, cuyo beneficio repercute en el buen funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro. Además, esta valiosa vitamina refuerza significativamente el sistema inmunológico.
Receta Ingredientes:
1 kg Percebes
2 litros Agua
150 grs Sal
1 hoja Laurel
Preparación de los Percebes
Percebes. La calidad puede variar bastante y lo ideal es conseguir percebes gallegos, aunque suelen ser los menos económicos. Esta receta la puedes preparar con cualquier tipo de percebes, te quedarán estupendos. Agua. Como guía, para unos 500 gr de percebes necesitaremos entre 2 y 3 litros de agua para que puedan quedar cubiertos mientras se cuecen.
Sal. Hay que añadir 60 gr de sal gruesa por cada litro de agua.
1 hoja de laurel opcional.
La receta de percebes cocidos perfectos:
En una olla amplia vierte el agua con la correspondiente cantidad de sal y la hoja de laurel y ponla a fuego alto para que hierva. Cuando el agua esté hirviendo echa los percebes y tapa la olla con su tapadera. Al echarlos verás que ha parado de hervir el agua. Cuando vuelva a hervir y borbotear es el momento de sacarlos con una espumadera. Ponlos en un plato y, para que se mantengan calientes y lleguen a la mesa al menos tibios, lo ideal es que los tapes con un paño
Cómo se comen los percebes
Deberás coger con una mano su uña y con la otra intenta cortar la piel que los recubre justo a continuación de la uña del percebe para hacerlo lo más sencillo es hacerlo con la uña de tu propio pulgar. A continuación retuerce la piel para que se desprenda de la uña y tira de dicha uña hacia arriba para descubrir el percebe. Con un poco de práctica conseguirás hacerlo con cuidado de no salpicar aunque no siempre se consigue!, ya que en su interior se aloja líquido que a veces es más y otras menos, y suele salir disparado a presión cuando abres el percebe.
El interior de la uña también se puede comer. Para ello puedes utilizar tus propios dedos hasta conseguir abrir la uña por la abertura superior que tiene y que suele tener un color rojo. En su interior encontrarás un poco de carne junto con unos pelillos que suelen estar crujientes, así que si la textura no te molesta te recomiendo comerlo porque está tan rico como el propio cuerpo del percebe. Eso sí, si al abrir está lleno de arena mejor deséchalo, pero en muchas ocasiones está totalmente limpio y, además de rico, cruje un poquito en la boca y es una sensación que o te encanta o te desagrada, pero te recomiendo probarla.
60- ARROZ VIUDO, Y SU VERSIÓN CON GARBANZOS LLAMADO “ARROZ DE ESCRIBANO”
El arroz viudo es algo tan simple como una paella vegetariana. A la versión con garbanzos la llaman «arroz de escribano», arroz viudo. El arroz con verduras es otro de los platos que no pueden faltar en las mesas de nuestro territorio. Es una receta que no sólo destaca por su sencillez, sino además por ser realmente barato. Sin embargo, debemos avisar que no se trata en absoluto de la típica paella valenciana, y que no encontraremos en este plato ninguna traza de marisco o carne, como suele ser bastante habitual. De hecho, el nombre popular que posee esta receta es el de arroz viudo. Sus ingredientes se centran en los de origen vegetal, es decir, verduras y hortalizas como la cebolla, los tomates, los pimientos o las setas. Como podéis observar, estamos hablando de un plato muy humilde y que, por cierto, procede directamente de la cocina española, en concreto de la murciana.
Receta Ingredientes:
200 gr de arroz bomba
½ pimiento rojo y ½ pimiento verde
1 puerro
½ calabacín
100 gr de setas
25 gr de judías verdes
2 dientes de ajo
200 gr de tomate triturado
1 cucharadita de pimentón y unas hebras de azafrán
1 cucharada de carne de pimiento
25 gr de guisantes
Unas ramas de brócoli
400 mililitros de caldo de verduras
Aceite de oliva
Sal
Preparación de Arroz Viudo
Pelamos los dientes de ajo y los picamos lo mejor posible. Si tenéis un machaca-ajos, os quedará una pasta perfecta que se deshará en la cocción, al final de la preparación solo se notará el sabor. Reservamos. Picamos las setas, cebollas y los pimientos verde y rojo muy finos para que se deshagan en la cocción. Es importante que no se note su textura pero sí el sabor que le dan al arroz. Escaldamos los tomates, quitamos la piel y los rallamos. Si no tenéis con qué rallarlos, bastará con que los cortéis en dados muy pequeñitos. Reservamos.
Añadimos el aceite de oliva virgen extra a la cazuela.
Cuando el aceite esté caliente sofreímos las cebollas y los pimientos unos 5 minutos a fuego medio-fuerte, siempre removiendo cuidadosamente. Añadimos el ajo y las setas, removiendo para evitar que se nos queme. Cocinamos a fuego medio con el resto de las verduras unos 10 minutos. Salpimentamos y añadimos la mitad de las hebras de azafrán el resto las añadiremos con el caldo. Juntamos muy bien con las verduras. Vertemos el vaso de vino blanco y el tomate cuando la verdura anterior ya está pochada para que no se quemen los ingredientes. Dejamos que reduzca el líquido y el alcohol del vino hasta que empiece a pegarse a la cazuela o paella. Es hora de añadir los guisantes, los repartimos por toda la cazuela. Probamos de sal, por si es necesario añadir más.
Preparación de Arroz con Verduras
Echamos el arroz y removemos todo con suavidad para que se impregne bien del guiso y absorba el sabor. Dejamos durante 2-3 minutos más a fuego medio removiendo con una cuchara de madera o espátula para que no se pegue. Para lograr un buen arroz meloso, debemos calcular bien el agua necesaria. Así el arroz continua absorbiendo caldo una vez apagado el fuego. El punto final de este tipo de arroces no debe ser ni muy seco, ni caldoso.
Las medidas de líquido exactas son 2 partes y medio de caldo por cada 1 de arroz. Aún así si observamos que el arroz está un poco duro, pero la cazuela se está quedando sin líquido suficiente, le vamos añadiendo poco a poco más agua hasta que quede en su punto. Mezclamos el azafrán reservado con algo de caldo. Una vez que el arroz haya absorbido todo el sabor del guiso añadimos el caldo en la cazuela. Subimos la temperatura al máximo hasta que empiece a hervir y acto seguido lo bajamos a la mitad. Se tiene que hacer poco a poco (dura unos 16 minutos aproximadamente). Rectificamos líquido con agua y vamos probando el arroz. Apartamos del fuego y dejamos reposar 5 minutos.
61- FABES CON ALMEJAS
Delicioso plato asturiano que usa la «faba» el mismo grano de la famosa fabada como ingrediente principal junto a una buena porción de almejas. Una exquisitez con sabor a mar, plato de fabes con almejas. Delicioso plato asturiano que usa la «faba» el mismo grano de la famosa fabada como ingrediente principal junto a una buena porción de almejas. Una exquisitez con sabor a mar plato de fabes con almejas.
Las Fabes con almejas es uno de los platos que, junto con la fabada asturiana, son bandera de la gastronomía asturiana. Se trata de un plato de cuchara elaborado con las fabes o fabas y las almejas o amasueles como ingredientes principales. Todo cocinado a fuego lento, al chup-chup en una olla de barro aunque yo las he cocinado en olla rápida para ahorrar tiempo y os aseguro que son un manjar de dioses. Cómo saben estos asturianos.
Receta Ingredientes:
500 g de fabes de la Granja
1 k de almejas gallegas a ser posible
1 cebolla
3 dientes de ajo
Medio pimiento verde
1 chorro generoso de aceite de oliva virgen extra para la cocción de las fabas
1 cucharada tipo postre de pimentón dulce de la Vera
5 hebras de azafrán
2 l. de caldo fumet de pescado y marisco o agua si no tenéis
Para el sofrito de las almejas: 20 ml. de aceite de oliva virgen extra
1 diente de ajo
1 cayena o guindilla pequeña al gusto y opcional
Medio vaso de vino blanco 125 ml.
Sal al gusto
Preparación de Fabes con Almejas
La noche anterior o por lo menos 4 horas antes pon las almejas en un bol con agua y sal para que suelten arenillas que siempre traen. Refrigera hasta el momento de utilizar. He utilizado alubias frescas que compré en verano y tenía en el congelador, así que no he necesitado remojarlas, pero si las que utilizas son secas, debes ponerlas a remojo el día anterior con 12 horas de remojo es suficiente Escurre las fabes si las has tenido a remojo y vuélcalas en una olla con agua limpia suficiente. dos dedos por encima de las propias fabes
Envuelve en un saquito de cocer legumbres las cebollas, los dientes de ajo con piel, el puerro cortado en dos o tres trozos , las zanahorias y la hoja de laurel, ata bien el saquito y añade a la olla y pon al fuego. De momento no vamos a sazonar porque las fabes se cocinan mejor sin sal y con menos riesgo de que se rompan. Deja cocer a fuego medio-bajo durante una hora, retira la bolsita con las verduras, añade un poco de sal a la olla y continúa la cocción unos 45 minutos más o hasta que veas que están tiernas. Cuenta el tiempo de cocción desde que empiecen a hervir.
Mientras aplasta ligeramente los dientes de ajo para recuperar la pulpa y tira la piel, añádela al vaso de la batidora, incorpora las cebollas, los puerros y las zanahorias y tritura. Incorpora la mezcla a la olla de las fabas, añade una pizca de sal , el azafrán y mezcla haciendo movimiento de vaivén con la olla pero procura no introducir ningún artilugio porque se romperán las fabes y si tienes que usar alguno, que sea siempre de madera. La salsa ahora está espesita, comprueba si las fabas están en su punto y apaga el fuego.
Pon una olla al fuego un diente de ajo pelado con un poquito de aceite, saltea brevemente, agrega medio vaso devino, añade las almejas escurridas deberás sacarlas del bol con una espumadera para que las arenillas queden abajo, sube el fuego y en el momento en el que se abran, retira la olla. Deja unas cuantas almejas enteras para emplatar y al resto retírale la carne y añádela a la olla. Cuela el caldo de haber cocido las almejas y se lo añades a la olla, será muy poquito, así que no hay riesgo de que quede muy caldoso, en cuyo caso, eso siempre tiene arreglo, pones unas cuantas fabes en el vaso de la batidora, un poquito de caldo y trituras, lo añades a la olla y con eso espesará. Pon en un vaso de robot 3 cucharadas de aceite de oliva y hojitas de perejil cortadas con una tijera, tritura.
Presentar
Pon 2 cucharones colmados de fabes en cada plato, 2 o 3 almejas enteras y con una cucharita vierte un poquito de aceite de perejil. Sirve caliente.
62- SOPA MORUNA DE MARISCO
Es un plato almeriense que está directamente relacionado con la sopa marroquí llamada «harira». Se hace con lentejas o garbanzos o con ambas, y carne de cordero. Delicia como ninguna otra, sopa moruna. La sopa moruna de Almería está directamente relacionada con la tradicional sopa marroquí harira. Típica del Valle del Almanzora en Almería, donde se da esta sopa moruna de marisco su origen radica sin duda en la gran presencia de la cultura musulmana en la zona, cuyos lazos y vestigios pueden aun verse en recetas como esta y en monumentos como la bella Alcazaba de Almería.
Este plato de cuchara es conocido como “harira” o “jarera” en el mundo árabe, otro plato procedente de la cocina del Magreb, que se ha extendido a todo el norte de África, gran parte de Europa y posiblemente a tierras más lejanas. Esto debido a la importancia de probar sopa moruna de marisco, de este plato para la cultura árabe, ya que suele ser consumido al final de Ramadán, para indicar el fin de la ayuna.
El Ramadán es un tiempo muy sagrado para todos los musulmanes, por lo que al final del mismo y para romper su ayuna, se reúnen en familia con este plato, que equilibra el estómago, además de dar los nutrientes y las proteínas que han faltado durante dicho tiempo. Este caldo se acostumbra a ser acompañado por arroz, garbanzos, pastas, dátiles y chuparquia, con marisco, una delicadeza marroquí de pasta de hojaldre rellena o bañada en miel, que se usa para mojar en el caldo.
Receta Ingredientes:
100 gr. de lentejas o garbanzos 50 gr. de cada si lo hacemos con ambos
100 gr. de carne de cordero o de ternera troceada y algún hueso
1 cebolla mediana pelada y cortada a trocitos pequeños
1⁄2 kg. de tomate
100 gr. de Gambas o Langostinos
1 cucharadita de Cúrcuma
1 cucharadita de Canela de Ceylan molida
1 cucharadita de Jengibre molido
1⁄2 cucharada de Pimienta negra Tellichelly molida
3 hebras de Azafrán
1 ramillete de perejil picado 100 g y de cilantro fresco y picado 20 g
2 cucharadas soperas de harina
1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen
1.5 lt. de agua
Sal al gusto
Preparación de la Sopa Moruna
Para preparar la sopa moruna, picar en primer lugar el cordero en cubos pequeños. Salar y añadir en una cacerola con un buen chorro caliente a temperatura muy fuerte. Saltear hasta que se dore. Una vez que la carne esté dorada, añadir la cebolla muy picada y el ajo para dejarlos sofreír. Seguidamente, añadir el tomate triturado y el tomate concentrado. Dejar cocinar todo durante aproximadamente 15 minutos.
Tras acabar, echar el apio finamente picado así como el cilantro y el perejil recién picados también. Toda la mezcla debe de estar bien cocinada y con los sabores bien concentrados. Añadir el caldo de pollo, las especias, la sal, el azúcar y el limón. Dejar cocinar todo a fuego medio-alto durante 1 hora. Probar de sazón una vez transcurrido el tiempo y rectificar si es necesario, sobre todo si está demasiado ácido, para lo que deberá añadirse un poco más de azúcar.
Aun así hay que tener en cuenta que una ligera acidez es una de las señas de identidad de este plato. Pasado el tiempo de la cocción, añadir las legumbres cocidas y dejar cocinar 10 minutos para que se integren bien. Por último añadir los fideos para que cuezan durante 3 minutos más si son finos. ¡Y ya está lista la sopa moruna! No queda más que servir con cilantro y perejil picados por encima antes de comer. Un plato reconfortante y con todos los ingredientes necesarios para alimentar el cuerpo y la mente.
63- TRUCHA A LA NAVARRA
Pescado frito, relleno con jamón o panceta. Algunos maravillosos seres humanos lo rellenan con jamón serrano y por eso, tienen el cielo garantizado, trucha navarra. La trucha con jamón es un plato emblemático de la cocina española, especialmente popular en zonas como Navarra, donde este pescado de río es especialmente abundante. Se trata de una sencilla y muy popular receta de la gastronomía navarra, donde la trucha en este caso, se rellena de migas o lonchas de jamón y se fríe en la sartén. En versiones menos tradicionales, se emplea bacón o panceta en lugar del jamón para rellenar las truchas, o según qué preparación, se envuelven en lonchas de jamón sujetadas con palillos de dientes.
Receta Ingredientes:
truchas Arco Iris enteras y limpias o trucha común
4 lonchas de jamón ibérico de cebo
500 gr de patatas pequeñas
6 dientes de ajo
perejil fresco picado
vinagre de vino blanco
harina de freír
sal
aceite de oliva suave
Preparación de Trucha a la Navarra
Estirar los lomos de trucha limpios y desespinados y hacer con ellos un rollito. Envolver cada rollito con una loncha de jamón. No hace falta salar el pescado, porque el jamón aportará la sal necesaria. En una sartén con un poco de aceite dorar la trucha, que luego se acabará en el horno, a temperatura media. Para la salsa Licuar los pimientos del piquillo con la salsa de tomate y un poco de caldo de pescado, ligar a fuego lento con un poco de Maizena. Dar el punto de sal a la salsa y pasarla por un colador fino. Para la guarnición. Con tres pimientos: rojo, verde , y amarillo, preparar la piperada: saltear los pimientos picados con un poco de aceite. También se puede acompañar el pescado unas bolitas de patata confitadas, es decir, cocidas en aceite. Para presentar el plato poner un poco de salsa y los pimientos en una fuente.
Colocar las patatas y sobre ellas, la trucha.
La trucha a la Navarra tiene la peculiaridad de cocinarse frita rellena de jamón o con éste envuelto. Para hacer la trucha a la Navarra fácil y cómodamente, es interesante contar con filetes de trucha ya cortados que podamos usar para atrapar el jamón como si tratara del pan de un bocadillo. Pondremos, por tanto, las dos lonchas de jamón entre filete y filete de trucha, y sujetaremos con tres palillos de madera esta especie de sándwiches de pescado a modo de pan y jamón serrano como relleno. Hecho esto, salpimentaremos la carne de la trucha por el exterior el jamón ya aportará sabor de sobra al interior, y sumergiremos la trucha a la Navarra en una sartén o freidora con aceite muy caliente, hasta que el pescado esté doradito por fuera y bien hecho por dentro. Servir la trucha a la Navarra preferiblemente acompañada de una ensalada, de unos tomates Cherry, o de cualquier otra cosa que aporte frescura.
64- OREJA DE CERDO A LA PLANCHA
Un plato típico de las tabernas. Generalmente te las hacen al ajillo. Ideales para acompañar con una cañita, oreja de cerdo. Este aperitivo de oreja de cerdo, que se puede consumir simplemente salteado a la plancha con ajo y perejil, o con una tradicional salsa picante, te enamorará y seguro que cuando aprendas a hacer esta receta lo probarás más de una vez en casa. Nosotros te vamos a explicar la receta paso a paso, cociendo la oreja tanto en olla tradicional como en olla express, adobándola luego, y con su tradicional salsa picante.
Receta Ingredientes:
2 orejas de cerdo troceadas
2 hojas de laurel
3 dientes de ajo
4 cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra
1 cucharada de pimentón dulce
Agua
Sal
Preparación de Orejas de Cerdo
Lo primero que hacemos es sacar la oreja del envase y ver el tamaño que tienen los trozos. Como a mi me parecía que los trozos eran un poco grandes, los volví a cortar para que tardará menos tiempo en hacerse y se cocinará bien por todos los lados. El siguiente paso es echar en la sartén un chorrito de aceite, tampoco mucho, porque luego la oreja va a soltar bastante grasa, y los ajos laminados. Una vez que están doraditos los sacamos de la sartén y le añadimos la oreja. Hay que remover constantemente para que no se pegue.
Mientras tanto vamos haciendo un majado con los ajos, una cucharadita de café de pimentón dulce, la sal, el perejil y un chorro de aceite de oliva virgen extra. Cuando veamos que la oreja está casi cocinada le añadimos este majado y le damos varias vueltas para que se impregne todo. La dejamos unos minutos más para que la carne coja todos los sabores y ya está lista para servir. Veréis que textura más melosa os ha quedado y qué rico está este aperitivo.
65- PAPAS ARRUGADAS CON MOJO CANARIO
Papas cocinadas con mucha sal, preferiblemente marina, y acompañadas con el famoso mojo picón canario hecho a base de pimiento, ajo, comino y cilantro, papas arrugadas. Las patatas son uno de esos ingredientes que no pueden faltar en nuestra cocina, ya que nos permiten preparar un sinfín de recetas como por ejemplo patatas asadas al horno, patatas cocidas, entre otras, que son perfectas como guarnición o como aperitivo. Hoy vamos a preparar unas deliciosas papas arrugadas con mojo picón, un aperitivo muy popular de la cocina canaria, en cuanto a las patatas o papas que se utilizan para esta receta, están las papas antiguas o las papa bonita, pero como son muy difíciles de conseguir si no te encuentras en las islas canarias podemos utilizar otro tipo de patatas como las de guarnición que venden en supermercados como es el caso de la receta de hoy.
Para preparar estas papas arrugadas, se utiliza una técnica de cocción especial que verás al detalle en el paso a paso, donde la papa toma una textura arrugada y con una piel cubierta de sal que es exquisita. Papas canarias. Esta receta con patatas al estilo canario es más un truco para prepararlas y que te salgan perfectas, casi como si estuvieses en el propio Tenerife. La cocina de Tenerife es una gastronomía basada en los productos que ofrece el entorno. Pues a los isleños siempre les ha tocado sacarle buen partido a los alimentos que les rodean. Encontraréis buenos pucheros como las garbanzas canarias o el puchero canario con su tradicional piña millo o maíz. El pulpo al estilo canario que hacen en la mayoría de los guachinches me encanta, pero sin duda me quedo con las papas arrugás. Los guachinches son locales que encontraréis en Tenerife, donde como si de un furancho gallego se tratase podéis degustar el vino de casa. Al igual que los gallegos se vende el vino casero que el agricultor quiere dar salida, acompañado por su cocina más tradicional.
Receta Ingredientes:
4 pimientos rojos secos ñora o chiles si quieres que pique
1-2 rebanadas de pan blanco duro
5 dientes de ajo pelados
1/2 cucharadita de comino molido
2 -3 cucharadas de vinagre de vino tinto
1/2 cucharadita de sal gruesa
100-150 ml de aceite de oliva virgen extra
60 ml de agua o caldo de pollo
1/4 cucharadita de pimentón opcional
Preparación de las Papas Arrugas con mojo Canario
Lava las patatas, pero no las peles. Corta las rebanadas de pan en dados y reserva. Vierte un litro y medio de agua en una cazuela. Cuando esté caliente, añade la sal gorda y las patatas y deja cocer durante 25 minutos. Cuando las pinches y estén tiernas, estarán listas. Pela los dientes de ajo, y en una sartén fríe. Luego reserva. Una vez listas las patatas, retira el agua de la cazuela, sécalas, añade sal y pimienta al gusto, menea la cazuela y verás como empiezan a arrugarse. El proceso tarda unos 4 minutos. Luego, reserva las patatas en un plato. En la misma sartén de freír los ajos, fríe el pan. En el vaso de la batidora, añade los ajos, el pan, el aceite de la sartén, el comino, el pimentón, sal y pimienta al gusto, y un poco de agua. Tritura un poco. Añade los pimientos, el vinagre y un poquito más de aceite. Tritura hasta obtener una salsa homogénea.
66- HUEVOS CARLISTAS
Este plato data del siglo 19 y es un huevo frito ligeramente para que la yema quede líquida en el medio, luego lo pasan por salsa bechamel, se empaniza y se vuelve a freír. ¿No es maravilloso ?huevos carlistas. Pocos alimentos hay tan versátiles como el huevo, que pueden ser un plato en sí mismos o el ingrediente perfecto para resaltar el sabor y la potencia de cualquier otro. La receta que hoy os traemos es la de los huevos encapotados, un híbrido a medio camino entre el huevo frito y la croqueta que quizá ha dejado de hacerse tan a menudo en los hogares españoles como se hacía hace un par de décadas, pero que siempre está bien recordar.
La receta, que consta de un huevo que recibe una fritura corta, se recubre con bechamel y posteriormente se empana se parece a los huevos a la villaroy. Sin embargo estas dos recetas se diferencian en que los huevos encapotados solo están recubiertos por la bechamel y en el caso de la villaroy la crema tiene además queso
Además, aunque durante cierto tiempo estuvo denostado, el huevo, por su alto contenido en proteínas se ha convertido en un alimento muy saludable que puede consumirse hasta cuatro veces a la semana. No obstante, como todo lo que implica investigación científica, y más en el caso de la nutrición, hay estudios en marcha que pueden ir variando esta visión. Los huevos carlistas, conocidos también como huevos a la Navarra, tienen una larga tradición. Se cree que su origen se encuentra en la época carlista a la que se refiere su nombre, es decir, durante el último cuarto del siglo XIX, porque los colores del plato recordaban a la bandera de este bando. Sin embargo, es posible que existiesen ya con anterioridad y que recibiesen este nombre tras el conflicto. También se les conoce como huevos encapotados o cubiertos, por la cobertura que llevan alrededor tras su elaboración.
Receta Ingredientes:
6 Huevos frescos
30 grs. de mantequilla
50 grs. de harina
0.5 litro de leche
100 grs. de miga de pan rallado y seca
Medio limón
Perejil
Nuez moscada
pimienta
Aceite para freír
sal
Preparación de Huevos Carlista a la Navarra
En una sartén, freír 4 huevos en aceite y mantequilla a partes iguales y dejarlos enfriar un poco. Preparar una salsa bechamel derritiendo en un cazo los 30 grs. de mantequilla y añadiendo la harina, removiendo constantemente con una espátula de madera y dejarla cocer un poco. Antes de que tome color la harina, añadir la leche poco a poco, hasta que se espese; salpimentar y añadir un poco de ralladura de nuez moscada.
Retirarla del fuego y mezclarle 2 yemas de huevo desleídas en un poco de zumo de limón. Untar con un poco de aceite una fuente, extender una cucharada de bechamel y poner un huevo frito encima; luego cubrir el huevo con otra cucharada o dos de bechamel; debe quedar el huevo completamente cubierto y dejar enfriar. A continuación, empanarlos, pasándolos primero por la miga de pan rallada, luego por huevo batido y otra vez por la miga de pan rallado. Seguidamente, freírlos en abundante aceite caliente, que queden doraditos. Servirlos en una fuente acompañados de perejil frito.
Preparción de aderezos de Salsas
Prepara la besamel
Tuesta la harina en la mantequilla. Vierte la leche caliente poco a poco, removiendo, y hierve hasta que espese. Salpimienta, cuece 2 minutos más y pasa la besamel a un bol para que se temple.
Prepara la besamel
Casca 8 huevos en una sartén con aceite y fríelos, procurando que la yema quede líquida. Luego, retíralos con la espumadera para que escurran bien la grasa y recórtalos para que queden redondos. Bate los huevos restantes con una pizca de sal. Forma el huevo encapotado, Pon pan rallado en un plato, añade besamel, un huevo y más besamel y pan. Repite la operación con el resto y déjalos en la nevera unas horas.
Fríe de nuevo y sirve
Transcurrido el tiempo indicado, rebózalos y fríelos en aceite bien caliente. Sírvelos con los pimientos. Besamel. Es importante que la besamel te quede sin grumos. Mezcla la mantequilla con la harina hasta formar el roux. Luego, agrega la leche caliente, poco a poco, y ve removiendo hasta que la salsa espese.
Freír los Huevos
Huevos. Para que te queden redondos y no tener que recortar la clara, coloca un aro repostería sobre la sartén y cocínalos así. Si decides freír los huevos de manera tradicional, una vez los tengas hechos, no tires la puntilla sobrante. Córtala en trocitos y añádela a la besamel. Fritura. En el momento de freír los huevos ya empanados, vierte abundante aceite en una sartén ha de cubrir los huevos. Luego, añádelos y deja que se doren por ambos lados. El aceite tiene que estar muy caliente o el rebozado se podría deshacer. Más sabor. Si quieres enriquecer todavía más este plato, agrega unas tiritas de jamón de York o de jamón serrano entre la capa de besamel y el huevo frito.
67- PATATAS A LA RIOJANA
También conocidas como patatas con chorizo. Es un plato sumamente sencillo de preparar -básicamente son sólo patatas y chorizo como su nombre indica- y con una carga calórica ideal para días de invierno, patatas a la riojana. Un plato de gente del campo, de los vendimiadores de la Rioja y de toda España. Un plato de toda la vida y de origen muy humilde. Os estoy hablando de las patatas a la riojana, uno de mis recetas de guisos preferidas de invierno. Y por supuesto perfecta para todo el año, de los mejores para meterse entre pecho y espalda algunas calorías que te calienten.
Quizás sea el mejor reconstituyente que me haya tomado para desayunar después de la juerga en una de las mejores fiestas de España, las de Haro. Me imagino que la grasilla del chorizo ayuda a contrarrestar los excesos del alcohol. Algo similar a un buen cocido gallego después de una noche de farra. Ahora que ya voy viejo en esos menesteres las he preparado para la comida de fin de semana con su buena sobremesa y siesta de las de pijama.
Receta Ingredientes:
2 kg de patatas para guisar os recomiendo patata tipo cachelo gallego
500 g. de chorizo riojano dulce o picante, o mezcla de los dos, o bien chorizo de confianza.
2 cebollas grande
3 hojas de laurel
50 ml de aceite de oliva virgen extra
1 punta de cayena.
4 pimientos choriceros remojados en agua o una cucharada de su pulpa se vende en botes
6 dientes de ajo.
2 litros de caldo de carne si no tenéis, agua
1 cucharada generosa de pimentón dulce de la Vera "Las Hermanas"
Sal al punto, recordad que lleva chorizo
Preparación de Patatas a la Riojana
Comienza por cortar la cebolla en cubitos pequeños. Pela los dientes de ajo y córtalos en láminas. Vierte un chorrito de aceite en una cazuela y pocha la cebolla y el ajo suavemente hasta que comiencen a ablandarse. Añade también la hoja de laurel para que empiece a soltar su aroma, así como un poco de sal. Parte el pimiento verde en trozos gruesos y añádelo. Sigue pochando todo a fuego suave. Mientras, pela los chorizos y córtalos en rodajas.
Añádelos a la cazuela, sube un poco el fuego y sofríelos un minutito. Incorpora el pimentón y la carne de pimiento choricero. Remueve para evitar que el pimentón se queme. Seguidamente añade las patatas previamente lavadas, peladas y chascadas en trozos. Mezcla bien para que las patatas se impregnen de todos los sabores. Cubre con agua, tapa la cazuela y deja que todo se cocine a fuego suave durante unos 30 minutos o hasta que las patatas estén tiernas. De vez en cuando remueve un poco el guiso para que las patatas suelten su almidón y el caldo vaya espesando. Finalmente corrige el punto de sal y sirve tus patatas a la riojana con chorizo bien calentitas.
68- ENSAIMADA MALLORQUINA
Delicioso postre de Mallorca que se prepara y consume desde, por lo menos, el siglo XVII. Ideal para comer acompañado de una taza de café, ensaimada mallorquina casera. La ensaimada es un dulce típico de las islas baleares, concretamente de Palma de Mallorca. Estos tiernos y deliciosos bollos de orígenes judíos están recubiertos de azúcar glass y se identifican por su singular tamaño y su forma de espiral. Van envueltos en papel y en cajas con formas hexagonales o redondas.
Las ensaimadas pueden hacerse rellenas o sin rellenar. Hay quienes las rellenan de cabello de ángel, otros de nata o chocolate, y algunos hasta preparan rellenos salados. No obstante, en Recetas Gratis prepararemos la receta tradicional sin rellenar para que elijas cómo te gusta más. ¡Sigue leyendo y descubre cómo hacer ensaimada mallorquina de forma sencilla y clara!
Receta Ingrediente:
edientes para hacer Ensaimada mallorquina:
500 gramos de harina de fuerza
4 gramos de sal
90 gramos de azúcar
2 piezas de huevos pequeños
1 sobre de levadura seca de panadero o 20 gramos de levadura fresca
230 mililitros de agua tibia
200 gramos de manteca de cerdo a temperatura ambiente
1 bote de azúcar glass para decorar
Preparación de Ensaimada Mallorquina
Para comenzar haremos una masa con 15 gramos de harina de fuerza y una cucharadita cafetera de sal. Mezclaremos ambos polvos con un tenedor, en un bol y agregaremos 15 mililitros de agua. Mezclaremos bien hasta obtener una pasta y la dejaremos en el bol, pero cubierta con film plástico o con un trapo. Guardaremos el bol en el refrigerador e idealmente, dejaremos que se repose durante toda una noche. En su defecto, haremos esta masa madre en la tarde para dejarla reposando varias horas y continuar con la receta en la noche. Si realmente tienes el tiempo muy limitado para hacer ensaimada, pues, como mínimo extremo hay que dejarla reposar por lo menos una hora.
Asegúrate de que al menos esta masa madre hay cambiado su textura y consistencia después del tiempo de reposo. Debería aparecer con hoyitos o una especie de burbujas. Cuando retomemos la elaboración de las ensaimadas, mezclaremos en un recipiente el resto de la harina, otra cucharadita cafetera de sal y el azúcar. Una vez revueltos todos los polvos, haremos un hoyo en el medio y colocaremos el contenido del huevo, con 150 mililitros de agua natural y la masa madre que hemos dejado reposar previamente. Iremos mezclando con movimientos envolventes, prestando especial atención a que no se formen grumos.
Cuando la mezcla empiece a volverse homogénea, incorporaremos la levadura y la iremos integrando con el amasado. Hay que asegurarnos de que se vaya distribuyendo bien. Si contamos con una máquina para amasar en casa, tanto mejor. Nos será muy útil para amasar, porque tendremos que trabajar la masa durante largo tiempo. Lo ideal es que sean 20 minutos, y si llevamos el tiempo hasta 25, mucho mejor.
No hay que tomarse a la ligera esta etapa del amasado, porque es uno de los fundamentos para que la ensaimada nos quede deliciosa, realmente como las isleñas. Una vez que terminemos esta etapa del amasado, prepararemos una superficie plana para colocar la masa. Esta superficie debe estar bien limpia. Entonces la engrasaremos con un poquito de aceite y la espolvorearemos con harina. Cuando coloquemos la masa allí, lo ideal es que la dejemos reposar unos 20 minutos más (tapada con un trapo), para que se asiente después del amasado.
Esto es lo ideal, pero si está apurado, puedes saltarte esta fase. Yo he probado hacer la ensaimada con y sin este reposo, y bueno, si te lo saltas tampoco es que la diferencia será muy grande. Vamos a hacer una bola con la masa sobre la superficie, y luego a aplastarla. En este punto, tienes que decidir si quieres una ensaimada de una sola pieza, o si prefieres dividir la masa en muchas piezas iguales, para hacer ensaimadas individuales. En nuestro caso, hoy prepararemos una única ensaimada, grande y perfecta para compartir. Con la ayuda de un rodillo de cocina, vamos a estirar la masa y a dejarla lo más fina que se pueda, pero sin que se rompa.
Una vez estirada, untaremos la masa con abundante manteca de cerdo, hasta distribuirla totalmente sobre ella. Lo siguiente será ir enrollando delicadamente la masa, con cuidado de que no se rompa ni se maltrate. Le iremos dando forma de cilindro. Luego, conseguiremos una gran bandeja o placa de hornear, la cual cubriremos con una hoja de papel encerado. Depositaremos arriba nuestro “rollo” de masa, y la dejaremos levar durante otra hora cubierta con un trapo, para que no se reseque.
Pasado este tiempo, precalentaremos el horno a 180 grados. Retomaremos el trabajo con la masa e iremos formando con el “cilindro” una especie de espiral. Sin embargo, dejaremos un espacio interno en el espiral. Es decir, que no iremos pegando la masa al círculo anterior cuando vayamos creando las vueltas, sino que iremos dejando espacio adentro, porque la masa crecerá aún más cuando se hornee. De esta manera, lograremos una bonita forma para la ensaimada, sin que la masa se desborde. Una vez que el horno esté caliente, hornearemos nuestro espiral durante 15 minutos. Cuando la ensaimada ya esté lista, la dejaremos reposar para que se enfríe un poco. Entonces, la espolvorearemos con bastante azúcar glass, para darle el acabado típico de este tipo de plato.
69- PORRUSALDA CON BACALAO
La porrusalda, como otros tantos platos vascos, es comida de pescadores. Una receta sencilla hecha a base de patatas, bacalao y puerros, porrusalda de bacalao. La gastronomía tradicional nos regala platos atemporales muy humildes pero tremendamente sabrosos y reconfortantes, como la popular porrusalda, típica de la cocina vasca y hoy extendida a muchas otras regiones de España. Literalmente es un "caldo de puerros" que suele llevar patata y que, según la zona o costumbre, puede incorporar también bacalao y otras verduras, incluso productos del cerdo.
Es una receta que os gustará seguro. Sabrosa, saludable, económica y fácil de preparar, lo tiene todo. Con ingredientes básicos sacaremos un plato de cuchara de los que no se olvidan. Deciros que “Porrusalda” significa “caldo de puerros” en vasco, donde se sitúa el origen de esta receta. Como en otras recetas tradicionales, hay muchas variaciones, casi tantas como cocineros. Las hay con o sin cebolla, con o sin zanahoria, alguna llevan ajo o sofrito, etc. Pero lo que nunca falta es el puerro, y en cantidad.
Receta Ingredientes:
500 gr. lomos de bacalao desalado
4 puerros
3 patatas medianas
1 cebolla mediana
2 zanahorias
1 litro de caldo de pescado
½ vaso de vino blanco
Aceite de oliva virgen extra
Sal al gusto, tened cuidado con el bacalao
que tiene punto de sal.
Preparación de Purrusalda con Bacalao.
Desmenuza el bacalao
Desmenuza los lomos de bacalao en trozos de bocado. Pela las patatas y cháscalas en trozos de tamaño parecido. Limpia los puerros y córtalos en rodajas. Desmenuza el bacalao Prepara las verduras Raspa las zanahorias, despúntalas y córtalas también en rodajas. Pela la cebolla y córtala en juliana, y pica la ramita de perejil. Prepara las verduras Cocina las verduras Calienta 2 cucharadas de aceite en la cocotte y rehoga la cebolla y el puerro, durante 5 minutos. Añade las zanahorias y las patatas y una pizca de sal, remueve y vierte el vino. Cuece unos 5 minutos más. Incorpora el caldo caliente y lleva a ebullición. Cuando hierva, baja el fuego, tapa la cocotte y cuece durante 10 minutos. Cocina las verduras Incorpora el bacalao Agrega el bacalao a la cocotte y también el perejil picado, y prueba el punto de sal. Deja cocer 3 minutos más, hasta que las patatas estén tiernas, y sirve caliente. desalar bacalao en casa
Desalar bacalao en salazón.
Limpia el bacalao de la capa de sal que lo recubre. Puedes hacerlo bajo el grifo del agua, pasando la mano sobre el trozo de pescado. Verás que la sal se va eliminando fácilmente. Repite el proceso con todos los trozos de bacalao. Llena con agua un recipiente amplio en el que quepa todo el bacalao que quieres desalar y coloca dentro los trozos de pescado, mejor con la piel hacia arriba. El agua tiene que cubrirlos por completo.
Lleva este recipiente a la nevera, donde deberás tenerlo unos 3 días como media. Todo depende del grosor de los trozos de bacalao. Un lomo grueso tardará 3 días, un filete, que es más fino, puede estar desalado en 2 días.
El cambio de agua es muy importante. Porque la sal va pasando del pescado al agua y, si no la cambias, no consigues que el proceso de desalado tenga éxito. Debes cambiarla cada 6-8 horas. Esta es, quizás, la parte más tediosa del desalado.
Pasado el tiempo de desalado, puedes probar el punto de sal tomando un poquito de carne de bacalao. Si aún lo notas demasiado salado, cambia el agua y reserva unas horas más en la nevera. Si no vas a cocinar todo el bacalao que has desalado, puedes congelarlo bien envuelto en film para utilizarlo en otras recetas.
70- SARDINAS A LA BRASA
Tu dirías «¿sardinas a la brasa? eso lo hacen en todos lados» Sardinas a la brasa. Como el resto de los pescados azules, la sardina es rica en ácidos grasos omega-3, esencial para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Pero esto no termina aquí, la sardina nos proporciona también un buen puñado de minerales entre ellos el fósforo, potasio y vitaminas de los grupos A, B, D y E. Según la Fundación Española de Nutrición, las sardinas contienen un aporte de ácidos grasos poliinsaturados omega 3, por una ración, que casi cubre el 100% de los objetivos nutricionales recomendados para la ingesta diaria de la población.
Como ya sabemos, los ácidos grasos omega-3 son elementos esenciales para el buen funcionamiento del organismo pero el organismo humano no es capaz de producirlo por sí mismo, así que los debe obtener de los alimentos. Su aporte proteico es de alto valor biológico, por lo que son un alimento altamente aconsejado si queremos mantener una dieta equilibrada y llena de sabor. Autentica Receta de Sardinas asadas a la brasa. No importa como prepares las sardinas, si son sardinas marinadas o sardinas al horno, a nosotros nos gustan de cualquier forma, lo importante es disfrutar de ellas. Es una receta sencilla de realizar, No solo sabemos cocinar carne en una Parrilla o Barbacoa, sobre todo lo más importante es cocinar sano y rico.
Llega el verano, es la presencia de sardinas en los mercados y también en nuestras parrillas. Alcanzan su mayor notoriedad en torno a la noche de San Juan, el 23 de junio, pero su temporada de pesca se extiende hasta el mes de octubre. La calidad y frescura del pescado es muy importante. A la hora de comprar, para conocer su frescura, fijaos en que sean de un color plateado brillante, que tengan los ojos claros y sin sangre, el cuerpo firme y tieso, y las agallas de un rojo intenso. Y por supuesto, que no huelan mal, ya que a los 2-3 días pierden toda su frescura.
Receta Ingredientes:
1 kg. de sardinas.
sal gorda.
aceite de oliva.
Para acompañar:
ajo y perejil, picados, opcional
patatas cocidas, opcional
ensalada mixta, opcional
Preparación de Sardinas a la Brasa
Lo primero es abrir las sardinas con un cuchillo y con cuidado las sardinas por la mitad y limpia bien las tripas con agua, fíjate que no quede ningún resto. Después de esto sécalas un poco con papel de cocina. Seguidamente, en un bol y con la ayuda de un mortero, pica el perejil un poco, añade dos cucharadas de aceite de oliva virgen y los dos dientes de ajo. El tomate, con un cuchillo le quitaremos la Piel, lo partiremos en trozos y terminaremos metiéndolo en el mortero con el ajo y el perejil, Lo picaremos todo con el mortero de nuevo. No hace falta que sea un picado como si fuera con batidora, debemos de encontrar tropezones de tomate y pequeños trocitos de ajo. le añadiremos un poco mas de aceite.
El acetite de Oliva virgen es vida, Una vez lo tengamos todo ligado, veremos que esa salsa se ha espesado un poco, le añadiremos un poco de sal fina, al gusto y probaremos esa salsa. Lo que suelo hacer yo es probarlo con una rodajita de Pan, no lo puedo evitar, en otras palabras, catarlo!. Seguidamente, preparamos las sardinas en la parrilla, normalmente se utiliza una la parrillada en estas bases para parrillas de barbacoas qué son lavables y reutilizables solo queda servir y disfrutar de esta deliciosa, parrillada buen provecho.
71- JUDÍAS DEL BARCO GUISADAS
Las judías del barco se cultivan en Ávila. Son grandes y blancas, y por ser exclusivas de esa región lo recomendable es comerlas allá, judías del barco de Ávila. El Barco de Ávila, por su ternura mantecosa, por su sabor, por lo bien que combina con otros ingredientes. El pasado año, tuvimos la oportunidad de entrevistar a esta legumbre. El vídeo no tiene desperdicio. El guiso lo elaboramos con paloma torcaz, un ave migratoria, de carne más sabrosa y tierna que las palomas de cría. Su temporada finaliza en febrero, hasta entonces elaboraremos este guiso.
Estas estupendas Alubias del Barco de Ávila. En el plato de hoy van acompañadas de unas buenas costillas, que aportan un sabor delicioso al conjunto. Es un guiso sencillo ideal para el tiempo que está empezando a cambiar. Una comida que nos va aportar energía para todo el día. Pasamos a la receta. Es un guiso de los de siempre, para saborearlo y disfrutarlo poco a poco.
Notas de la preparación
Dejaremos las alubias en agua la noche anterior. Al día siguiente vamos incorporando todos los ingredientes a la olla o cacerola. Las alubias escurridas, las costillas de cerdo, la cebolla, el diente de ajo, la hoja de laurel y las zanahorias troceadas. Por último añadimos un chorrito de aceite y salpimentamos a nuestro gusto.
Recetas Ingredientes:
3/4 kilogramo Judías del Barco de Ávila.
100 gramo Punta de jamón serrano
100 gramo Tocino entreverado
Trozo de rabo de cerdo
Trozo de pata de cerdo
Oreja de cerdo
Cebolla
Chorizo
Pimenton
Cabeza de ajo
Hoja de laurel
Sal al gusto
Aceite de Oliva Extra Virgen
Cómo preparar este plato:
Par hacer esta receta, poner las judías blancas en remojo con agua fría y el alga kombu. Meter en el frigorífico durante dos días. Escurrir, lavar, volver a escurrir y poner, tanto las judías como el alga kombu, en el recipiente de la misma. Cubrir con agua hasta un dedo por encima de las judías y programar durante seis horas y media en temperatura baja. Una vez que haya pasado la mitad del tiempo, añadir todos los ingredientes menos el ajo, el pimentón y el aceite oliva virgen extra.
Cuando quede una hora para que finalice, en una sartén añadir el aceite oliva virgen extra, el ajo y dorar ligeramente. Luego, incorporar el pimentón y rápidamente un poco de caldo de las judías blancas. Cocinar unos segundos y añadir toda la mezcla a la misma. Cuando acabe el tiempo servir o bien, si se quiere espesar, incorporar un poco de caldo y algunas judías blancas en un vaso de la batidora, batir y añadir de nuevo.
Un buen resultado, las judías blancas deben ser de calidad, sino es probable que se despellejen. Para dar más sabor, incorporar una morcilla justo cuando queden 2 horas. Si se van a hacer en olla tradicional se deben llevar a ebullición y luego asustar dos veces, es decir, añadir un poco de agua fría que rompa el hervor. Luego, cocer aprox. durante una hora y media a fuego bajo. Si la cocción es en olla a presión se deben cocer durante unos 30 minutos.
72- LENTEJAS A LA RIOJANA
De nuevo lentejas, pero es que son tan deliciosas… La versión a la riojana pueden llevan también chorizo de la región, patatas, zanahoria y panceta, comer en Madrid lentejas. Las lentejas con chorizo al más puro estilo tradicional. Además del chorizo, llevan panceta curada, jamón, verduras y su hojita de laurel para darle un toque aromático. Con esta receta de lentejas a la riojana daremos solución a muchos problemas que tenemos a la hora de confeccionar nuestro menú semanal de comidas diarias.
Es necesario comer al menos un día a la semana legumbre y esta receta de lentejas encaja en cualquier circunstancia. Si resulta que estáis a dieta, podéis prescindir de la carne perfectamente, pero que nadie se lleve a engaño. Lo que hace sabroso este potaje de lentejas, es sobre todo el chorizo, la panceta y el jamón. Las verduras aportan mucho sabor también, pero les falta ese punto de grasa que todo potaje requiere.
Receta Ingredientes:
sal 1 cebolla 2 L de agua 1 pimiento rojo 1 diente de ajo grande 1 zanahoria 100 g de chorizo Aceite de oliva 1 pimiento verde 100 g de jamón curado 2 cucharadas soperas de tomate frito 1 hoja de laurel 500 g de lentejas 100 g de panceta curada 2 pimientos choriceros, laurel y clavos 1/2 vaso de leche 250 g de harina 1 huevo 250 g de queso
Cómo preparar Lentejas a la Riojana
Disponer las lentejas lavadas en una cacerola con 2 zanahorias cortadas en rodajas, las patatas peladas y troceadas en cachelos, 1 pimiento rojo cortado en cuartos y 1 tomate sin tallo, 2 pimientos choriceros, sin tallos ni semillas, 1 hoja de laurel y 2 clavos.
Cubrir con agua, incorporar un pellizco de sal y llevar al fuego. Por otro lado, cortar la panceta en dados y el chorizo en rodajas. Sofreír, en una sartén con unas cucharadas de virgen extra, e incorporar la cebolla picada y 3 dientes de ajo fileteados. Dejar, a fuego medio-alto, unos minutos y verter sobre las lentejas.
Para el pan de queso, calentar 1/2 vaso de leche, 1/4 de vaso de virgen extra y un pellizco de sal. Retirar del fuego y agregar la harina. Mezclar e incorporar el huevo y el queso. Amasar bien con las manos.
Formar pequeñas bolas de masa, ayudándonos con un poco de agua o aceite para humedecer las manos, y disponerlas en la bandeja de horno cubierta con papel vegetal. Cocinar, unos 15 minutos, en el horno precalentado a 180Cº. con ventilador.
Para terminar nuestras lentejas, sacar el pimiento, el tomate, los pimientos choriceros, y algunos cachelos de patatas. Triturar bien y verter, sobre las lentejas una vez lista para, servir y degustar este delicioso plato, de lentejas a la Riojana buen provecho.
73- CHULETAS DE CORDERO LECHAL AL HORNO
Pueden ser al horno o a la plancha. Las puedes acompañar con patatas horneadas y algunos pimientos morrones por arriba. No necesitas nada más en la vida deliciosas chuletas de cordero al horno. Uno de los platos que más nos gusta en verano y también durante todo el año es la receta de chuletas de cordero lechal cocinadas a la brasa o a la parrilla, hasta dejarlas bien crujientes. Para los que no tienen la posibilidad de cocinarlas así, nuestra receta de chuletillas al horno es una excelente alternativa para disfrutar en casa de una receta que siempre gusta a todos.
Receta Ingredientes:
Chuletas de cordero chuletillas de palo
12
Diente de ajo
Perejil fresco
Aceite de oliva aromatizado con humo
Sal y pimienta al gusto
Limón y unas gotas de zumo
3-4 Patatas
1 Cebolla Pequeña
75 ml. de Vino Blanco
Preparación de Chuletas de Cordero Lechal al Horno
Chuletas de Cordero al Horno
Para empezar a preparar la receta de las chuletas de cordero al horno lo primero hay que hacer es plantearse si de guarnición quieres ponerle patatas. En caso afirmativo, pélalas, las lavas y las cortas panaderas, en redondeles de 1 cm. aproximadamente. Las colocas en la bandeja del horno con un poquito de sal y pimienta y un chorrito de aceite y las llevas al horno a 190ºC con calor arriba y abajo y sin ventilador durante 20 minutos.
Para hacer las chuletas tienes que hacer un “majado” con los ajos laminados, el perejil picado, sal, pimienta y un poquito de aceite. Cuando lo tengas preparado se lo untas a las chuletas y las dejas así durante 15 minutos más o menos.
Después coge una cebolla, pélala y trocéala en juliana. Ese será el tiempo en el que están hechas las patatas. Sacas la bandeja del horno y colocas sobre las patatas la cebolla y, sobre la cebolla, pon el vino blanco. Coloca encima de todo esto las chuletitas. Lo vuelves a meter en el horno, colocando la bandeja en la parte media durante 15-18 minutos, hasta que las veas doraditas.
Servir y degustar estas deliciosas, chuletillas al Horno buen provecho.
74- CALLOS A LA MADRILEÑA
Otro plato legendario de la gastronomía española. Clásico de bares, tascas, tabernas, antros, huequitos, de Madrid. Chorizo, morcillo y estómago de res. En algunos lugares le agregan garbanzos, cazuela con callos a la madrileña. Disponemos en nuestra gastronomía de una cantidad increíble de recetas tradicionales a cual más rica. En esta receta utilizo una parte de la ternera y otra del cerdo y ambas pertenecen a lo que se conoce como casquería. Lo cierto es que actualmente no son muy populares ni están muy «de moda» pero eso no quita que den lugar a plato riquísimos y os recomiendo darle una oportunidad si todavía no las habéis probado.
Uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía madrileña es el de los callos a la madrileña, una receta tradicional de casquería, muy apreciada en la ciudad de Madrid y el resto de municipios de dicha Comunidad. Se trata de un plato de cuchara, tenedor y servilleta que además pide pan para deleitarse con la potente y sabrosa salsa que acompaña este manjar. En la preparación madrileña, no se añaden garbanzos cocidos como en la versión gallega ni se utiliza el pimiento choricero como en la versión vizcaína. Acompañadme a la cocina y vamos a preparar una buena cazuela de callos.
Receta Ingredientes:
½ kg de callos limpios
2 chorizos
1 uña de cerdo con codillo en salazón
1 pata de ternera
½ kg de morro de ternera
1 morcilla
1 punta de jamón
6 dientes de ajo y 1 y ½ cebolla
5 tomates maduros
1 cd. pimentón dulce y otra de picante
Sal al gusto y 5 granos de pimienta negra
2 hojas de laurel y 1 cd. comino molido
Aceite de oliva virgen extra
1 limón para los callos
Cómo Preparar Callos a la Madrileña
Vamos a preparar la receta con nuestra olla rápida pero si no tienes una sigue todos los pasos exactamente igual, solo que en el momento de cocción te indicaremos más minutos. Así quedaran los callos de ternera con la manitas de cerdo ante de ser cocinados Corta los callos de ternera en cuadraditos de 2×2 cm más o menos, que sean trozos de bocado. Ahora vamos a limpiar los callos y la manita de cerdo. Ponlos juntos en tu olla, cúbrelos con agua fría y enciende el fuego medio-alto para llevar al agua al punto de ebullición. Cuando eso ocurra, cuenta 5 minutos, retira el agua y escúrrelo todo. Si vas a utilizar esa misma olla para el resto de la receta deberás lavarla ya que lo que hemos hecho es limpiar las manitas y los callos de suciedad e impurezas.
Callos de ternera limpios.
Limpiamos los callos y las manitas hirviéndolo varios minutos. Deja los callos y la manita en un escurridor y lávalos bien bajo el chorro de agua fría. Es muy importante asegurarnos de que estas partes están bien limpias antes de cocinarlas. Pon de nuevo en la olla los callos junto con la manita de cerdo y el resto de ingredientes para cocerlos: panceta, cebolla, zanahoria, clavos de olor, laurel, pimienta negra en grano y un poco de sal. Añade agua hasta que queden cubiertos pero muy justos, ya que el caldo lo utilizaremos después y cuanto más concentrado esté, mejor resultará.
Ponemos todos los Ingrediente de la Cocción en la Olla
Ahora la cocción de los callos y la manita. Tienes dos opciones, la lenta y la rápida y que conste que ambas quedan igualmente deliciosas, no hay diferencia en cuanto a sabor y resultado final. Si utilizas una olla normal, pon el fuego fuerte y cuando hierva reduce el fuego al mínimo y deja que se cocinen unas 4 horas o 4 horas y media para que todo esté tiernos y perfectamente cocinados, removiendo de vez en cuando. Si utilizas una olla a presión como nosotros, una vez cerrada y con la válvula levantada o indicando los dos anillos de presión, deja que se cocine 50 minutos dependerá de la marca de la olla y ve reduciendo el fuego conforme veas que la presión se mantiene.
Aparta del fuego y activa el mecanismo para que salga el vapor y termine la cocción si tienes prisa, pero si tienes tiempo simplemente deja que se vaya el vapor solo poco a poco. Antes de terminar la cocción debemos incorporar el chorizo y la morcilla. Si lo haces en olla normal, échalos cuando lleves 3 horas de cocción, y en olla rápida al cabo de esos 50 minutos y cuando ya se haya ido la presión, abre la olla, pon dentro del chorizo y la morcilla y vuelve a cerrar y cuando salgan las dos anillas cuenta 10 minutos.
Comprobar que está todo bien tierno, la manita deberá estar un poco destrozada y los huesos deben salir con total facilidad. En este punto te recomiendo quitar toda la grasa que puedas de la parte superior ya que la aportan los embutidos y te aseguro que no es necesaria para darle sabor a la receta. Lo ideal es que dejes reposar un poco la olla y después con ayuda de una cuchara grande o similar retires toda la capa de grasa naranja de encima hasta que lo que se vea es el caldo y si acaso alguna gotita de esa grasa naranja, ya que si queda un poquito tampoco pasa nada.
Mientras se cuece todo puedes empezar a preparar la salsa. Pela la cebolla y los ajos y pícalos muy finitos. En una sartén amplia antiadherente pon un poco de aceite y fuego medio-bajo. Cuando esté caliente añade la cebolla y los ajos con un poco de sal y guindilla picadita al gusto. Sofríelo todo hasta que la cebolla esté tierna y transparente pero sin llegar a dorarse, tardará unos 10 minutos. Cuando la cebolla esté lista añade la harina, el pimentón y la carne de pimiento choricero y no dejes de remover durante un minuto e incorpora el vino blanco. Espera 2-3 minutos hasta que se evapore el alcohol.
Añade la salsa de tomate y mézclalo todo bien durante 2 minutos más. Ya tienes el sofrito listo, resérvalo hasta que los callos estén cocidos. Cuando tengas listos los callos y las manitas, saca la manita de cerdo de la olla y deshuésala, si está bien cocida debe ser muy sencillo. Todo lo que no son huesos ya puedes cortarlo como más te guste, por ejemplo en tiras o cuadraditos.
Retira del caldo la hoja de laurel, los clavos de olor y los granos de pimienta. Saca la cebolla y la zanahoria y ponlas en el vaso de una batidora junto con un poco de caldo y tritúralo bien. Pon en un plato aparte el chorizo, la morcilla y la panceta y corta los dos primeros en rodajas y la panceta en tiras. Saca también los callos y resérvalos en un plato aparte, de forma que en la olla solo nos quede el caldo.
En la sartén en la que hemos preparado el sofrito añade el triturado de cebolla y zanahoria junto con gran parte del caldo y ponla a fuego medio. Irás viendo qué textura va adquiriendo y cuando añadas los callos y la manita espesará más aún, así que ve graduándolo a tu gusto. Echar todo el caldo y después dejo que reduzca hasta que esté a mi gusto.
Incorpora los trozos de manita, los callos y los embutidos a la sartén y deja que se cocine todo junto a fuego bajo entre 15 y 20 minutos más, intentando que la salsa quede a tu gusto en cuanto a espesor. Probar y ver el punto de sal. Su tiempo de preparación al rededor de 1 hora y 30 minutos de preparación + 4-5 horas de cocción con olla normal y solo 1 hora y 15 minutos con olla a presión. Servir y listo para degustar este plato tradicional madrileño.
75- JUDIONES DE LA GRANJA
Estas gigantescas judías son típicas de Segovia. Excelentes para la época de invierno, alubias con chorizo. Los judiones de la granja, esa gran legumbre castellana. El judión es una judias de grandes proporciones, si no la habéis probado nunca es una maravilla, mantecosa y deliciosa. Solo os digo que entran una o dos como máximo en una cucharada. Los judiones de La Granja son un tipo de legumbre cada vez más demandada.
Su preparación suele acompañarse de algunos embutidos chorizo y morcilla ahumados, de panceta, de oreja de cerdo… Cuanta más calidad tengan los ingredientes que acompañarán a los judiones más rica será la receta. Es muy importante poner a remojo los judiones la noche antes a hacerlos. Al menos 10 o 12 horas de remojo necesitan antes del cocinado. Es una alubia que cuando se cocina conserva su textura y además son manteca pura cuando se comen. Cuando cogemos una cucharada como mucho caben en ella uno o dos judiones por lo que podemos hacernos una idea de su tamaño. A diferencia de otras legumbres no producen tantos gases, aunque si queremos un remedio casero podemos añadir una cucharadita de bicarbonato cuando las pongamos a remojo.
Receta Ingredientes:
500 gramos de judiones de la granja
2 chorizos
2 morcillas
1 oreja de cerdo
1 panceta ahumada
2 cebolla
2 ajos
Laurel
Aceite de oliva
1 cucharada de harina
1 cucharada de pimentón de la Vera
Tiempo de Preparación Judiones de la Granja
3 h.
Cocción.
3 h.
Reposo.
2 h.
Preparación de Judiones de la Granja
La víspera, dejamos los judiones en remojo en un bol grande con agua abundante. Tened en cuenta que por su gran tamaño absorben mucho por lo que será necesario prever que tengan espacio y agua suficiente para no encontrarlos secos cuando los vayamos a cocinar a la mañana siguiente. Por la mañana, tiramos el agua y ponemos a cocer los judiones con los chorizos enteros y el lacón y la panceta cortados en trozos en una olla con agua suficiente para cubrirlos y un poco más. Añadimos el laurel, la cebolla y las pimientas y dejamos que se cuezan a fuego lento -sin remover- durante dos horas y media. Para esta legumbre, es preferible hacerlas a fuego lento, sin usar la olla exprés como cuando preparamos la fabada en 20 minutos.
Mientras, en un cazo aparte cocemos la morcilla para que no quede muy fuerte durante 30 minutos y la reservamos. Por otro lado, cortamos la pluma de ibérico o un solomillo de cerdo si no lo encontráis en trocitos y la salteamos en una sartén, reservando los trozos dorados junto a la morcilla. Vamos probando los judiones hasta que estén perfectos de punto. Serán necesarias unas tres horas aproximadamente, dependiendo del fuego y la calidad de las legumbres. Una vez en su punto, metemos dentro la morcilla y las tajadas de carne de ibérico y damos un último hervor de cinco minutos.
Mientras, en un cazo aparte cocemos la morcilla para que no quede muy fuerte durante 30 minutos y la reservamos. Por otro lado, cortamos la pluma de ibérico o un solomillo de cerdo si no lo encontráis- en trocitos y la salteamos en una sartén, reservando los trozos dorados junto a la morcilla. Vamos probando los judiones hasta que estén perfectos de punto. Serán necesarias unas tres horas aproximadamente, dependiendo del fuego y la calidad de las legumbres. Una vez en su punto, metemos dentro la morcilla y las tajadas de carne de ibérico y damos un último hervor de cinco minutos. Una vez terminado este plato de Judiones de la Granja listo para servir y degustar buen provecho.
76- PINCHO MORUNO
El delicioso pincho especiado de origen andaluz. Lo idea es que sea de cordero, pero si te lo sirven de cerdo o de pollo también es delicioso, pincho moruno. Los pinchos morunos son una elaboración tan tradicional y extendida por todo el país que a cada persona les traerán recuerdos diferentes a la memoria. Tapa de bar, vacaciones de verano, barbacoas en familia... Algo tiene la comida ensartada que siempre gusta, y estos pinchos o pinchitos causan furor entre los amantes de la carne. El secreto, claro está en el adobo. El pincho moruno es una elaboración habitual del norte de África, donde se suele preparar con carne de cordero adobada con todo tipo de especias, y se sirve acompañada de un té moruno. En España es habitual encontrar esta elaboración en numerosos bares y tabernas, donde se sirve como tapa junto con una cerveza o un vino.
Receta Ingredientes:
1 kg de carne de cerdo, vaca, cordero o pollo deshuesada, en dados de unos 3 cm
1 cebolla
2 cucharadas de zumo de limón
5 dientes de ajo majados
2½ cucharadas de buen pimentón de La Vera dulce, picante o una mezcla de ambos
2 cucharadas de comino en grano
¼ cucharadita de pimienta negra recién molida
1 pellizco de hebras de azafrán
¼ cucharadita de canela molida
3 ramas de cilantro fresco picado
1 cucharadita de sal
120 ml de aceite de oliva virgen
Cómo preparar pinchos moruno
Pelamos los ajos, retiramos el germen y los majamos en un mortero. Añadimos el comino y el azafrán tostado, majamos bien. Añadimos la cebolla cortada en daditos y el zumo de limón, el pimentón, la pimienta, la canela, la sal y el aceite de oliva. Mezclamos bien. paso a paso pinchos morunos Cortamos la carne en dados, limpiamos nervios y/o grasa que nos pueda molestar más tarde y colocamos la carne en una bolsa apta para alimentación.
Vertemos el adobo dentro de la bolsa, cerramos con el cierre hermético y mezclamos bien hasta que toda la carne esté impregnada por igual. Dejamos macerando la carne dentro de la nevera durante toda la noche. Al día siguiente, pinchamos la carne en brochetas de madera o metal, encendemos la plancha a fuego fuerte, la carne tiene que quedarse bien dorada por el exterior pero poco hecha por el interior para que quede muy jugosa, un par de minutos por cada lado aproximadamente. Una vez terminado están listos para servir buen provecho.
77- BOQUERONES EN VINAGRE
Típica tapa que te ponen gratis en los bares cuando estás bebiendo cerveza o vino. Un clásico que nunca está de más y del que muchos son realmente fanáticos, boquerones a la vinagreta. Esta receta de pescado, acompañado de unas patatas fritas, con unas anchoas en matrimonio o con un poco de pan es la tapa más rica de España. El aperitivo más delicioso del mundo. Esta receta de pescado, acompañado de unas patatas fritas, con unas anchoas en matrimonio o con un poco de pan es la tapa más rica de España. Estamos entrando ahora mismo en temporada de boquerones ya que estos se consumen principalmente en abril, mayo y junio, aunque puede durar hasta finales de julio. Una de las mejores formas de cocinar los boquerones es está, en vinagre. El boquerón es uno de los mejores pescados azules junto con la caballa y el jurel. Esta una gran fuente de omega 3, una de las grasas que debemos incorporar a nuestra dieta semanal.
Receta Ingredientes.
1 kg. de boquerones frescos medianos o grandes,
lo que os diga vuestro pescadero de confianza.
300 ml. de vinagre de vino blanco o de manzana de buena calidad
100 ml. de agua, una cucharadita tipo postre de sal gorda
4 dientes de ajo
Aceite de oliva virgen extra el necesario para cubrir los boquerones
Perejil fresco
Cómo preparar Boquerones en vinagre
Para preparar los boquerones en vinagre es fundamental que los boquerones sean lo más frescos posible. Para eso hay que ver el brillo de la piel, los ojos y el aspecto de firmeza que tiene este pescado. Si, además, tenéis un pescadero o pescadera que os los limpie…¡Genial! Os ahorráis el paso. En caso de que os toque limpiarlos, es sencillo. Introduces la uña por la zona de la cabeza y vais abriendo en dos la parte de la “barriga” arrastrando vísceras y eliminando la espina. Al quitar la espina os quedarán los dos lomos unidos por la cola perfectamente separados.
A continuación viene la fase del desangrado del boquerón. Para ello, lo limpiaremos muy bien bajo el chorro de agua fría, hasta que el agua quede completamente limpia. Esta acción te puede llevar unos 5 minutos aproximadamente, pero es vital para que queden perfectos. Una vez los tengamos limpios, lo que vamos a hacer es meterlos en agua fría con hielo durante aproximadamente 30 minutos, notaréis en ese tiempo como el boquerón empieza a blanquear. Esta acción es perfecta para que se endurezca su carne.
¿A que ya ves tienes los boquerones en vinagre blancos? Los sacaremos del agua con hielo donde estaban metidos y los escurrimos bien del exceso de líquido. Los pasaremos a unos papeles de cocina que estarán previamente colocados en la encimara de la cocina y les pondremos otro papel por encima. Todo este proceso es mejor hacerlo con cuidado, para evitar que se nos rompan con la manipulación. A continuación pondremos en recipiente o fuente grande, intentando que solo quede una capa del pescado, aunque si son dos, no pasa nada. Los vamos a colocar boca arriba, es decir por la parte del cuerpo hacia arriba y la parte de la piel hacia abajo.
En un recipiente ponemos aproximadamente tres partes de vinagre por una parte de agua y una cucharada de sal gorda y removemos bien. Tenemos que comprobar que la sal se deshace por completo. Así es como sabremos que la solución está lista para usar. Ponemos los boquerones y vertemos por encima la preparación para dejarlos macerando. Los dejaremos preferiblemente tapados, al menos con un film, para evitar el fuerte olor del vinagre. Los vamos a llevar a la nevera durante aproximadamente 6 horas, este proceso será el que termine de poner blancos y duros nuestros boquerones en vinagre. El tiempo oscilará dependiendo del tamaño del pescado y de lo fuerte que nos gusten, pero como promedio, esta bien con una horas. Listos para degustar buen provecho.
78- POTE ASTURIANO
Es un cocido hecho con alubias blancas, no deben ser confundidas con las fabas. Como todo buen cocido tiene chorizo y morcilla asturianos obviamente, patatas, berzas y orejas o rabos de cerdo. Ni se te ocurra comerlo en verano, pote asturiano. El pote asturiano, propiamente dicho, suele prepararse con alubias pequeñas, berzas y, a modo de compango, chorizo, morcilla y tocino. A partir de estos ingredientes hay quien le añade costilla, otros oreja de cerdo e incluso careta o rabo. Se diferencia básicamente de la fabada en que el pote lleva berzas mientras que la fabada no lleva ningún tipo de verdura. El nombre de esta receta se debe más bien a su forma ancestral de elaboración. En la pota, pote o caldero que colgaba encima del fuego de la lareira, se cocinaba lo que bien hubiera para el día, se hervía abundante agua y se cocían los vegetales de temporada, berzas, patatas, coles o nabos y las carnes de que se dispusieran.
Receta Ingredientes:
350 g. fabes pequeñas
Un manojo de berzas
300 g. de patatas
2 chorizos asturianos
2 morcillas asturianas
300 g. panceta o tocino
Para el sofrito: 1 cebolla, 1 diente
de ajo y 1 cucharadita
de pimentón dulce de la Vera
Sal
Cómo preparar el Pote Asturiano
Como lo explicamos anteriormente, antes de empezar esta receta hay que dejar las fabes o alubias en remojo durante toda la noche. Al día siguiente, las escurriremos, las enjuagaremos, y las cubriremos nuevamente con más agua. Luego, vamos a calentar la olla, y una vez que rompa a hervir, bajaremos el fuego al mínimo. Dejaremos que la preparación se cocine, con la olla tapada, y después de media hora incorporaremos a la olla el chorizo, la morcilla, el tocino y la paleta. Taparemos de nuevo la olla y dejaremos que se cocine durante otra hora y media. Mientras tanto, aprovecharemos para pelar las patatas. Luego, las picaremos en cubos medianos y las reservaremos.
También aprovecharemos para preparar las berzas. Las limpiaremos bien, les quitaremos el tallo, las enrollaremos y las picaremos muy finamente. Luego, calentaremos una olla con abundante agua, y una vez caliente, incorporaremos las berzas. Dejaremos que se cocinen durante 15 minutos, a fuego medio. Una vez pasados los 15 minutos, escurriremos las berzas y las pasaremos a la olla más grande, con las fabas o alubias.
Una vez terminado el tiempo de cocción de los granos, los probaremos para verificar que estén tiernos. Si ese no fuera el caso, los dejaremos cocinándose un rato más. Cuando ya estén tiernos, vamos a agregar los trozos de patatas, además del azafrán en hebras. Si el nivel de líquido ha descendido con la cocción, agregaremos más agua hasta cubrir el nivel de los sólidos. También agregaremos un toque de sal al gusto y otro de pimienta.
Mezclaremos de nuevo, taparemos y dejaremos que el conjunto se cocine durante media hora más. Pasado este tiempo, vamos a verificar que las patatas estén los suficientemente tiernas. Si ese no fuera el caso, dejaremos que ella preparación se cocine durante unos minutos más. También aprovecharemos para verificar la sazón. Si hiciera falta, la corregiremos con más sal y / o pimienta y mezclaremos todo. Listo para degustar buen provecho.
79- JAMÓN IBÉRICO
Existen turistas que viajan exclusivamente a España por la gastronomía, y uno de los platos que más piden, sino el que más, es una buena ración del por muchos considerado el mejor jamón del planeta tierra. jamón Ibérico. El jamón serrano es una de los productos estrella de la gastronomía española. Se obtiene de la pierna de cerdo de diferentes razas, que es salada, secada y curada durante un tiempo variable en las sierras montañosas, de ahí su nombre. Constituye una de las tapas habituales en cualquier restaurante, bar o casa, donde no resulta extraño encontrar un jamonero. A continuación podrás encontrar todo tipo de recetas con jamón, un completo repaso del recetario español con este producto en común. Combinando con huevos, junto con todo tipo de carnes, en cocidos y guisos, junto a verduras o legumbres… Hay muchas posibilidades para incorporar este producto a nuestra dieta y disfrutar de un bocado sublime.
Receta Ingredientes:
Recetas con jamón ibérico para la comida La segunda de las recetas con jamón ibérico es ideal para la hora de la comida y se trata de una pechuga de pollo rellena con ricotta envuelta en jamón ibérico. Se necesitan 2 pechugas de pollo previamente limpias y lavadas, 125 gramos de queso ricotta, estragón, tomillo, 20 gramos de parmigiano reggiano, sal, pimienta y rebanadas de jamón ibérico.
Preparación de tapas de Jamón
Precalienta el horno a 200 grados. Realiza un fino corte en la mitad de las pechugas, dejando espacio suficiente para rellenarlas. Combina la ricotta con el queso parmigiano y las hierbas, luego usa la mezcla para rellenar las pechugas, y sella. Coloca algunas rebanadas de jamón ibérico en una superficie plana con las que luego envolverás la pechuga de pollo. Asegúrate de envolver firmemente para contener el relleno. Colócalo en una bandeja y ponlo en el horno entre 20 y 25 minutos.
Puedes acompañar este plato con vegetales al vapor y una copa de tu vino.
Otra tapa de jamón
seleccionar todos los ingredientes
2 baguettes
250 gramos de jamón serrano
2 dientes de ajo
5 cucharadas de aceite de oliva
2 jitomates, picados sin cáscara
Cómo preparar este plato
En un recipiente hondo mezclar el aceite de oliva, el ajo y el jitomate. Cortar la baguette en rebanadas aprox. 20y tostar ligeramente en el horno 10 minutos. Poner un poco de mezcla de aceite de oliva, jitomate y ajo sobre cada pedazo de baguette. Poner 1-2 rebanadas de jamón serrano sobre la baguette. Listo para degustar buen provecho.
80- PAELLA DE MARISCOS
Uno de los platos insignia de la comida española junto a la paella valenciana. Si quieres aprender a prepararla, comida española paella de mariscos. La paella de marisco es uno de los arroces más arraigados y que más se suele preparar, es una comida que se presta a compartir mesa con familia o amigos, y si son muchos, mejor que mejor. Para que sea una buena paella, necesita fundamentalmente un buen sofrito, un caldo casero en este caso un fumet de pescado o marisco y productos de calidad, buenos mariscos que le aporten todo el sabor. La paella y la tortilla de patatas son los platos más representativos de la gastronomía española y no podría decantarme por ninguno de los dos, ¡me encantan!
La paella se trata de un arroz cocinado en la «paellera», un recipiente de hierro de poco fondo con dos asas, aunque en Valencia dónde la paella es uno de los platos más tradicionales también denominan «paella» a este tipo de sartén. A este arroz se le pueden añadir los mariscos que más os gusten, dependiendo de la época podemos encontrar unos u otros en el mercado, y siempre se puede recurrir a los congelados. Puedes leer la receta haciendo click, en el link de arriba.
Tiempo de Preparación
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de cocinado: 50 minutos
Tiempo total: 1 hora
Raciones: 4
Categoría: plato principal
Tipo de cocina: mediterránea
Calorías por ración kcal: 736
Receta Ingredientes.
Paella de marisco
400 gramos de arroz bomba
1 sepia o calamar
12 mejillones
8 gambas o langostinos
1 pimiento verde
2 dientes de ajos
2 cucharadas soperas de tomate triturado o tomate fresco
1,4 mililitros de caldo de pescado
4 hebras de azafrán
1 cucharada postre de colorante
1 cucharada postre de pimentón dulce
1 chorro de aceite
1 pizca de sal
Cómo preparar Paella de Mariscos
Preparamos los mariscos: Limpiamos los mejillones, lavamos las almejas y pelamos parte de las gambas, reservando unas cuantas para luego adornar la paella. En una cazuela, con una pizca de aceite, ponemos a saltear las cáscaras de las gambas, apretando bien las cabezas con una pala de madera para que suelten todo su jugo. Añadimos agua y dejamos cocer, semitapadas y a fuego suave, durante unos 15 o 20 minutos. Colamos el caldo y reservamos.
Mientras se hace el caldo con las gambas ponemos a cocer los mejillones en una cazuela con un poco de agua. En cuanto se abran los retiramos con una espumadera y repetimos la operación con las almejas. Una vez retiradas las almejas colamos el caldo que haya quedado y lo añadimos al que habíamos preparado con las gambas. Reservamos procurando que se mantenga caliente. Hacemos el sofrito para la paella: picamos muy fina la cebolla y limpiamos y troceamos los pimientos. Ponemos a calentar la paellera con un poco de aceite y pochamos en el la cebolla y pimientos, añadiendo una pizca de sal.
Cuando la cebolla empiece a tomar color añadimos el tomate (lavado y rallado) y seguimos cocinado las verduras hasta que hayan perdido todo el agua. Añadimos ahora la sepia, limpia y troceada y la salteamos unos minutos. Añadimos el arroz : cuando la sepia haya cambiado de color, es el momento en que debemos incorporar el arroz a la paella. Movemos con una cuchara de madera y dejamos un instante al fuego, pero sin que llegue a tomar color, debemos sofreír el arroz solo lo justo para que absorba el sofrito.
Incorporamos el caldo y las especias: Regamos con el caldo de mariscos que habíamos preparado. La cantidad de caldo que se necesita para que la paella quede en su punto es 2 veces y media la medida de arroz, así que en nuestro caso tenemos que añadir 5 vasos si no hubiera suficiente con el caldo que hemos preparado se puede completar con agua. Salamos al gusto, movemos la paellera, para que el caldo quede bien repartido y subimos el fuego hasta que el caldo rompa a hervir. Mientras, hacemos un machado en el mortero con el ajo, perejil recién picado y unas hebras de azafrán. Añadimos una pizca de agua e incorporamos a la paellera.
Cocción: Repartimos las gambas sobre el arroz y proseguimos la cocción, ahora ya, a fuego suave. Tenemos que calcular aproximadamente unos 20 minutos de cocción desde que el caldo rompe a hervir. En los últimos minutos de cocción incorporamos las almejas y mejillones que habíamos reservado puedes presentarlos solo con media concha. Retiramos la paellera del fuego y dejamos reposar la paella de marisco, tapada, unos cinco minutos más. Listo para degustar buen provecho.
81- CHOPITOS REBOZADOS
Los chopitos son un tipo de calamar pequeño. Se pasan por harina y se fríen. Se sirven en la mesa con un limón al lado y ya sabes qué hacer. Deliciosos, chopitos. El plato de chipirones o calamarcitos fritos es muy típico de la cocina mediterránea. Este plato con fuerte origen español se prepara en bares, restaurantes y chiringuitos de la costa como una deliciosa tapa. Todos los veranos me encanta comer mirando el mar mientras tomo una cerveza, unas aceitunas y una tapa de chopitos fritos bien crujientes. ¡Sino los has probado no te los puedes perder! En la zona de Andalucía reciben el nombre de chopitos o puntillas y en las partes de costa del País Vasco los llaman txopitos. Las frituras de pescado son una de las tapas más típicas en las provincias de Cádiz y Málaga y, curiosamente, también en Madrid. Hoy voy a enseñaros cómo hacer uno de los platos que más nos gustan para acompañar las cervecitas o el vermút a la hora del aperitivo. Se trata de la receta de chopitos o puntillitas para el Día de la Tapa, que se celebra hoy, y que por supuesto podéis tomaros el día en que os apetezca disfrutar de este plato.
Recetas Ingredientes:
1 kg chipirones
3 huevos
200 g de harina
250 g de harina de garbanzos
Sal
Limón
Aceite de oliva
Cómo preparar chopitos rebozados
El primer paso es lavar los chopitos para quitarle la arena que pueda tener en su interior. También es importante retirar la pluma del chipirón (la parte del exoesqueleto). Separamos los tentáculos de la cabeza y lavamos otra vez. Si hemos escogido calamares grandes entonces los cortamos a trozos. Si son pequeños los dejamos enteros. Una vez bien lavados los secamos un poco y añadimos un poquito de sal por encima. Seguidamente ponemos en un bol las dos harinas. Podemos utilizar harina de garbanzos que le dará una textura curiosa. Seguidamente avocamos los chopitos dentro del bol con el combinado de harinas.
Mientras añadimos en una sartén aceite abundante y dejamos calentar a fuego medio Una vez los chipirones estén bien rebozados y el aceite de la sartén esté hirviendo vertimos los calamarcitos dentro de la sartén para freírlos. Esperamos unos 5 minutos hasta que estén bien doraditos y finalmente los retiramos de la sartén y los ponemos en un plato con papel de cocina para absorber un poco el aceite. Servimos en un plato junto con medio limón. Hay gente que les gusta comer los chipirones fritos con alioli o mayonesa. Listo para degustar buen provecho.
82 ANGULAS A LA BILBAÍNA
Dientes de ajo, guindillas, aceite de oliva y angulas, todo cocinado en una cazuela, angulas.
La receta de angulas a la bilbaína es tan rica como sencilla de hacer. Además, es tan versátil que puedes tomarla tanto en tu día a día como en una celebración más especial en la que quieras sorprender a tus comensales sin necesidad de pasar muchas horas en la cocina o sin ser un experto cocinero. ¿Aún no sabes cómo hacer angulas a la bilbaína? Te enseñamos una receta fácil por pasos y en tan solo unos minutos. ¡Toma nota de estas angulas como especialidad bilbaína que conquista corazones! Una de las recetas más hedonistas, ricas y simples que Euskadi en general y Bilbao en particular han exportado al resto de España es la de las angulas a la bilbaína. Una elaboración cuyo resultado final, tanto por la potencia del sabor de un producto tan noble como la angula, como por el aroma del ajo y el aceite y el picante de la guindilla, es tan elevado como el coste de este pequeño lujo gastronómico.
Receta Ingredientes:
500 gramos de angulas
3 dientes de ajo
1 guindilla seca
Aceite de oliva virgen extra
Cómo preparar Angulas a la Bilbaína
Pela y corta los ajos en láminas y dóralos en el aceite caliente con un trozo de guindilla. Antes de que el ajo se dore excesivamente, agrega las angulas y rehógalas brevemente sin dejar de remover. Calienta una cazuela de barro y sirve las angulas a la bilbaína en ella. Listo para degustar buen provecho.
83- ARROZ CON LECHE
Postre tradicional en España y mucho más allá. Suelen tenerlo en los restaurantes que ofrecen “menú del día”. En Comedera. Contienes una receta rica y fácil. El arroz con leche es un postre tradicional en la mayoría de países de Latinoamérica, se prepara con arroz, leche, canela, azúcar, uvas pasas, y leche condensada. Como es de esperarse, un postre tan popular y conocido como este tiene una gran cantidad de variaciones, y no solo en los países latinos, también en el mundo entero.
He probado arroz con leche al estilo asiático con especias como cardamomo y agua de rosas. En España lo preparan sin pasas o canela, pero le ponen corteza de naranja y agua de azahar. Es un postre que se puede servir frío, templado o caliente según la época del año, con ingredientes muy sencillos y sobre todo fácil de preparar, aunque la experiencia hace que le cojamos el punto perfecto al arroz para que se nos quede a nuestro gusto. El arroz con leche es un postre típico en gran cantidad de países alrededor del mundo, y en España lo aromatizamos con canela y limón. La forma exacta de prepararlo varía entre unos lugares y otros sobre todo a la hora de cocer el arroz, y con esta receta el excelente sabor y la textura del grano están garantizados.
Receta Ingredientes:
1 Ingredientes
2 Elaboración
3 Paso a paso
4 Maridaje y recomendaciones
5 Claves para el perfecto arroz con leche
6 El placer de cocinar
7 ¡Prueba otros arroces con leche!
8 Trucos y curiosidades
9 Canela
10 Truco: usa naranja
Preparación de Arroz con Leche
El primer paso es preparar los ingredientes con los que vamos a aromatizar la leche. Lavamos muy bien el limón y pelamos su piel de manera fina, sin mucho blanco que luego nos amargue el postre. Necesitamos también un palo de canela en rama, el más grande que encontréis. Calentamos los dos litros de leche a fuego medio casi hasta el punto de ebullición. Bajamos la temperatura y retiramos del fuego. Añadimos la piel del limón y por último la rama de canela. Dejamos todo en reposo durante 5 minutos infusionando la leche.
En otra cazuela ponemos el arroz con el agua y una pizca de sal y lo llevamos a ebullición. La sal es importante porque le da un toque muy importante, casi el secreto fundamental para que sea un auténtico arroz con leche. En cuanto el arroz haya chupado todo el agua retiramos. Pensad que hemos añadido poco agua y el arroz aún estará un poco duro, con este proceso conseguimos ahorrar casi media hora. Mi madre me comentó que lo mejor era pasarlo a la cazuela de la leche. Y siempre hervir a muy poca temperatura el arroz. Así que siguiendo el consejo de mi madre de 10 puntos de temperatura de mi placa de inducción lo he tenido al 3 en todo momento. Removiendo cada 10 minutos para que no se vaya pegando a la cazuela y que se mezclen bien los sabores. Listo para degustar buen provecho.
84- PANELLETS
Los panellets son dulces de mazapán que se preparan especialmente para el día de Todos los Santos en Catalunya, panellets en Lleida. Los panellets o empiñonadas son un dulce muy típico de la región de Cataluña, Aragón, Valencia y Baleares. Hoy vamos a aprender a hacer los panellets de forma casera, un dulce clásico de la repostería española que podemos encontrar en cientos de pastelerías de todo nuestro país. La receta tradicional de panellets sin ninguna duda proviene de la repostería árabe y data del siglo XV. Este dulce es realmente sencillo de hacer y es perfecto para la festividad de todos los santos, aunque se consume actualmente durante todo el año. Estos panellets de piñones son excepcionales, pero también podemos encontrar panellets de coco en el mercado. Yo personalmente no soy muy fan del coco rallado, pero seguramente a futuro los haga para que podáis tener la receta.
Receta Ingredientes:
250 g de almendra cruda molida
250 g de azúcar
Ralladura de un limón
125 g de patata cocida
1 huevo
70 g de coco rallado
60 g de piñones
50 g de almendras crudas enteras
Cómo preparar panellets
Cocemos la patata con la piel, la pelamos y la trituramos con el tenedor. Se mezcla con el azúcar, la ralladura de limón y la almendra hasta que quede una masa compacta. Se deja reposar 12 horas en la nevera. A esta masa base podemos ponerle colorante o cambiar la patata por zanahoria, calabaza o boniato, siempre todo cocido. Así haremos panellets variados en formas y sabores. Una vez les demos forma los pasamos por clara batida y por la cobertura elegida, piñones, almendras picadas, coco rallado… También podemos pasar por harina y les ponemos encima una avellana o almendra. Se hornean unos minutos entre 5 y 10 min a 180º en horno precalentado.
Tiempo de Elaboración
45 m
Elaboración
30 m
Cocción
15 m
Reposo
6 h.
Preparamos la masa base de los panellets que, como mencionado arriba, vamos a preparar de tres tipos: de almendra, de coco y de cacao. Para ello pelamos el boniato, lo troceamos y lo ponemos a hervir en un cacito. Cuando esté tierno lo retiramos del agua y lo escurrimos bien antes de chafar con un tenedor.
En un bol mezclamos uno de los huevos reservamos el otro para pincelar con el azúcar y la almendra molida. Añadimos el boniato chafado y mezclamos bien hasta obtener una pasta homogénea. Para obtener un buen resultado podemos trabajar la masa sobre la encimera hasta que esté todo bien mezclado. Cubrimos la masa con papel film y la dejamos reposar en la nevera durante seis horas. Transcurrido este tiempo, separamos la masa en tres partes iguales y a una de ellas le añadimos una cucharada de cacao en polvo, a otra una cucharada de coco rallado y la tercera la dejamos como está.
Con todas las masas formamos pequeñas bolas y las rebozamos de la siguiente manera: la masa de cacao la rebozamos en azúcar glas, la masa de coco la rebozamos en coco rallado y la masa de boniato la rebozamos en almendra laminada, picada o en bastones. Batimos el huevo que tenemos reservado y con la ayuda de un pincel de cocina pincelamos solamente cada uno de los panellets de almendra antes de colocarlos sobre una bandeja del horno cubierta con papel sulfurizado junto con los otros dos tipos de panellets. Listo para degustar buen provecho.
85- ROSCÓN DE REYES
Este famoso pan dulce se prepara para el día de reyes. En su interior se esconde un pequeño juguete para aquel niño afortunado que le toque el trozo “premiado”, Roscón de reyes. El Roscón de Reyes es una de esas tradiciones y recetas que yo creo que no se perderán nunca porque todos las adoramos y esperamos cada año que llegue otra vez el momento de probarlas.. Si hay alguna receta de Navidad que todos casi sin excepción probamos es el Roscón de Reyes. Sin embargo este año os reto a prepararlo vosotros mismos, o mejor aún, ayudados por vuestros hijos. Veréis cómo os sabe el doble de bueno… Luego sólo hace falta una taza de chocolate caliente y… ¡a esperar que vengan los Reyes Magos! ¿Sabes cuál es el origen del Roscón de Reyes? Dicen que el mayor promotor de este dulce fue el rey francés Luis XV. Cuenta la historia que el cocinero de la Corte, de origen eslavo, quiso agasajar al Monarca el día de la Epifanía con un roscón tradicional de su tierra, pero con una sorpresa en su interior: un medallón de diamantes que compró gracias a la colaboración de otros miembros del servicio.
Mientras que la tradición se perdía en Europa del Este, Luis XV quedó encantado con el invento y se dedicaría a propagarlo, con una moneda en su interior como sorpresa, entre la aristocracia francesa y europea. Así fue como, a lo largo del siglo XVIII, llegaría a España, donde recibió una excelente acogida. Pronto la costumbre pasaría de los nobles al pueblo llano, siendo Madrid y Sevilla importantes baluartes de esta obra maestra de la repostería. Poco a poco, todo el país y sus colonias sobre todo México se fueron dejando seducir por su sabor único. Roscón de Reyes en casa, este año puede ser tu primera vez. ¿Te animas? es prácticamente imposible que te quede peor de los roscones que se apilan en cajas en los centros comerciales y que asustan al miedo, hazme caso, no requiere un master, ni haber estudiado en Europa, se necesita sobre todo, ganas de hacerlo. También te digo otra cosa, cuando empieces, no podrás parar y harás roscones para toda la familia y parte de tus vecinos, amasar es lo que tiene, crea adicción, pero es un hobby barato, un kilo de harina cuesta poco más de un euro y te saldrán más de un roscón.
Receta Ingredientes:
650 g de harina
250 ml de leche tibia
25-30 g de levadura fresca
120 g de azúcar
120 g de mantequilla derretida
2 huevos y 1 yema
10 g de sal
2 y 1/2 cucharadas de agua de azahar
Piel rallada de 1 limón grande y 1 naranja
Cómo decorar
Frutas escarchadas
Azúcar
1 huevo batido
Una naranja
Sorpresita de interior Reyes Magos
Cómo preparar Roscón de Reyes Magos
En primer lugar, tenemos que elaborar la masa del roscón. La repostería es muy precisa, por eso es clave seguir la receta exhaustivamente y no equivocarnos en los valores de cada ingrediente. Para la primera masa, debemos coger un bol y diluir en él, la levadura en el agua. Cuando ya está diluida del todo, añadimos la harina hasta conseguir una masa homogénea. Para lograr el resultado que buscamos, debemos tapar la masa con un trapo seco y dejar reposar 30 minutos.
Para la segunda masa, debemos usar una máquina de amasar. En ella, introducimos el azúcar, la sal, la mantequilla previamente reblandecida a temperatura ambiente, y la leche. Mezclamos todos los ingredientes, y por último, añadimos el huevo y la harina. Una vez tenemos todos los ingredientes juntos, amasamos hasta obtener una masa lisa y elástica. En este punto, debemos juntar, la masa anteriormente reposada, a esta que acabamos de elaborar y amasar el conjunto durante cinco minutos más. No te olvides de introducir la haba y la figurita del rey para coronar a quién se la encuentre.
Colocamos la masa, formada de las dos anteriores, en un bol y la tapamos con un paño limpio y seco. Dejamos que repose y fermente hasta alcanzar el doble de su volumen. Para lograrlo, debemos situar el bol en un sitio cálido, alejado de posibles corrientes de aire.
Una vez que la masa haya doblado su volumen inicial, debemos colocarla en una superficie de trabajo plana, previamente enharinada, para desgasificar amasando con las manos. Una vez hayamos conseguido quitarle el aire a la masa, debemos colocar la bola sobre una bandeja de horno, forrada con papel sulfurado. A continuación, introducimos con cuidado los dedos, en el centro de la bola, para formar el agujero del roscón. Y muy despacio, lo vamos a ir agrandando hasta que tenga la medida que más nos guste.
Cuando ya tenemos la forma que deseamos para nuestro roscón, tenemos que batir un huevo en un plato y pincelar toda la superficie. De nuevo, debemos dejar que doble su volumen, en un lugar cálido sin corrientes de aire.
Pasado el tiempo de levado de la masa, pintamos de nuevo con el huevo restante. Colocamos las naranjas confitadas por encima de la masa y espolvoreamos las almendras y también el azúcar perlado. Si hemos cambiado los toppings, procedemos de la misma manera con esos ingredientes. Una vez terminado el proceso de decoración del roscón, lo introducimos en el horno que hemos precalentado a 190º y lo cocinamos durante unos 25-30 minutos.
Y ya estamos en el último paso: dejarlo enfriar. Una vez está a temperatura ambiente, lo cortamos transversalmente para poder introducir el relleno que hayamos elegido con ayuda de una manga pastelera de boquilla rizada. En nuestro caso, la nata.
Listo para degustar con chocolate y nata de nuestro delicioso Roscón de Reyes, en Navidad Feliz Año Nuevo y Felices Reyes Magos .
86- ARROZ CON BOGAVANTE
El bogavante es un delicioso crustáceo familia de la langosta y las cigalas. Es el protagonista de este plato y mira, mola infinitamente, arroz con bogavante casero. Bogavante uno de los Mariscos que nos ofrece el mar, siendo quizás de los mariscos más deseados tanto en la alta cocina como en los hogares. Posee una carne fibrosa, con poca grasa y de sabor intenso. En nuestra gastronomía, el bogavante es sinónimo de comidas de celebración y de darse un buen capricho de vez en cuando. Lo podemos degustar cocido, al horno, a la plancha y, cómo no, como ingrediente principal de uno de los mejores arroces.
No hay que tener miedo a preparar arroz con bogavante en casa, ya verás que con nuestra receta es más fácil de lo que imaginas y te va a quedar delicioso. Vamos a empezar la elaboración con un sofrito enriquecido con el coral del bogavante para dar mucho más sabor. Este coral es la carne oscura que tiene dentro de la cabeza y es mucho más cremosa que la blanca de las pinzas o la cola. Luego escogeremos un buen fumet de marisco para cocer el arroz y le pondremos dentro el bogavante al final.
Receta Ingredientes:
Arroz redondo
300 g
1Tomate
1Pimiento verde italiano
1Pimiento rojo
4 Caldo de pescado o fumet
veces el volumen del arroz
Sal y pimienta al gusto
2 Diente de ajo
1Bogavante fresco
Cómo preparar Arroz con Bogavante
Dificultad: media
Para 6 personas
Tiempo: 40 min. arroz
y 45 min. fumet .
Puestos a escoger, elegiremos un bogavante fresco de las Rías de Galicia, que nos valdrá entre 30-50 euros/Kg dependiendo de la época del año. Otra opción más económica es emplear el bogavante canadiense, más habitual en las pescaderías, y que nos saldrá a unos 8-9 euros la pieza 800 gr.. Una vez comprado, es aconsejable consumirlo cuanto antes para preservar su grado de frescura y por tanto sus cualidades. Entre ellos hay claras diferencias, que podéis conocer con detalle en el blog de la Tienda Online de marisco gallego “Sal y Laurel“.
Cortar el Bogavante
Hecho el fumet, llegamos a otro punto transcendental del plato: debemos de trinchar el Bogavante, y preferiblemente “vivo y coleando”. Para las que no podáis con este paso, metedlo unos 10 min. en el congelador. Así quedará como anestesiado y podréis cortarlo sin que se mueva.
Sea como fuere, colocamos el bogavante panza arriba en un recipiente, donde recogeremos los jugos que suelte. Separamos con un corte la cola de la cabeza. Quitamos las pinzas y seccionamos la cabeza en dos mitades simétricas. La cola la cortamos en 3-4 porciones, aprovechando los anillos del caparazón. A las pinzas les damos un golpe con un martillo de madera para escachen y luego sean fáciles de comer. Reservamos.
Cocinamos el arroz
Escogemos una cazuela ancha y plana para esta elaboración. Una cazuela de barro o una “paella” también nos sirve perfectamente. Picamos el ajo y la cebolla muy finos. El tomate lo pelamos, le quitamos las pepitas y lo picamos bien o rallamos. Echamos aceite en la cazuela y sofreímos las verduras unos 10 min., removiendo para que no se nos pasen. Salamos al gusto.
Apartamos la cazuela un momento del fuego, añadimos una cucharada de postre de pimentón dulce y mezclamos. Queremos que se incorpore a la salsa pero que no se nos queme. De nuevo en los fogones, añadimos ahora los jugos que soltó el bogavante al cortarlo y las dos partes de cabeza, con la parte carnosa hacia abajo. Aportarán su intenso sabor al sofrito. Cuando estén de color rojizo, reservamos.
Echamos el arroz y mezclamos bien con la salsa para que vaya absorbiendo su sabor. Cocinamos 1-2 min. a fuego medio. Incorporamos ahora el fumet, con la proporción de 2 partes y media de caldo por 1 parte de arroz. De esta manera nos quedará un poco caldoso. Removemos cuidadosamente para repartir el arroz uniformemente. Si lo preferís más caldoso tendréis que usar 3 partes de caldo.
En cuanto comience a hervir, añadimos las hebras de azafrán y mezclamos con cuidado. Bajamos a fuego suave nivel 4, de 1 a 10 y dejaremos cocer el arroz unos 20 minutos. Iremos comprobando la cazuela para que nunca se nos quede sin caldo el arroz. En los últimos 5 min. de cocción añadimos la cabeza reservada y el resto de trozos del bogavante. Con este tiempo le bastará para estar en su punto, y que no esté demasiado cocinada su carne.
En este momento, también aprovechamos para probar de sal y rectificar si es el caso, según nuestro gusto. Recordad que el fumet ya lleva sal. Cuando vemos que está en el punto deseado más o menos caldoso, retiramos del fuego y dejamos que repose 3-4 min. Así el arroz seguirá lentamente absorbiendo caldo y no se nos pasará. Servimos bien caliente. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
87- CAZÓN EN ADOBO
Plato típico andaluz, de la región de Cádiz. Se trata básicamente de trozos de pescado rebosado que, tal como su nombre lo dice, fueron previamente adobados. El bienmesabe, cazón en adobo, o tal como se dice en Cádiz, el adobo, sin necesidad de especificar más, es una de las tapas más agradables que puede uno tomar a la hora del aperitivo. Pues hoy voy a contaros cómo se hace el cazón en adobo para que todos podáis disfrutarlo en vuestra casa. El bienmesabe es como se conoce por la zona de Cádiz al cazón en adobo, aunque en la gastronomía española nos encontramos que se denomina bienmesabe a otras elaboraciones, así el bienmesabe antequerano es un dulce de almendra y en Canarias hay otro dulce que se llama bienmesabe. Por si no encontráis cazón o caella, esta receta de bienmesabe, también puede prepararse con mero en lugar de con cazón, y estará igualmente buenísima, pero la diferencia de precio es notablemente más cara si utilizáis el mero.
Receta Ingredientes:
500 g de cazón
Harina de garbanzos
1 vaso de agua
1 vaso de vinagre de jerez
3 hojas de laurel
3 ajos machacados
Sal
1 cucharada de pimentón
1 cucharada de orégano
½ cucharada de comino
Aceite de oliva suave
Preparación de Cazón en Adobo.
Primero cortamos el cazón en tacos grandes y lo ponemos en un bol. En un mortero, echamos el comino en grano, la sal y los ajos con piel. Lo machacamos todo bien hasta que quede bien mezclado. Añadimos al mortero el pimentón dulce, el orégano y el vinagre, lo mezclamos todo y lo volcamos sobre el bol con el cazón. Cortamos las hojas de laurel en 3 trozos cada una y lo incorporamos al bol. Después echamos un poco de agua hasta que el pescado esté completamente sumergido y lo removemos todo bien.
Cubrimos el bol con papel film y lo metemos en la nevera 8 horas. Cuando haya pasado este tiempo, ponemos abundante harina en un plato hondo y vamos rebozando los tacos del cazón, procurando que queden bien impregnados de harina. Ponemos abundante aceite en una sartén honda y lo calentamos a fuego fuerte. Antes de que empiece humear, freímos los cazones en tandas pequeñas durante 3 o 4 minutos, fijándonos bien en que se hace por todas partes. Según los vayamos sacando de la sartén, los ponemos en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite y queden crujientes por fuera. Listos para servir con un poco de salsa alioli o con su limón, a vuestro gusto lógicamente. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
88- ZARZUELA DE PESCADO Y MARISCOS
Mariscos, y en varios casos pescados, cocinados en cazuela en sus propios jugos. A veces con tomate y algo de brandy para darle un sabor especial, zarzuela de mariscos. La zarzuela de pescado es uno de los platos más laboriosos que tenemos en nuestra gastronomía, por lo menos de los que han pasado por mis manos. Lleva tiempo pero el resultado merece la pena. La zarzuela de pescado es un guiso muy típico de la cocina Catalana, de Castellón y Baleares. Este plato se considera plato único y es perfecto para la típica comida familiar a zarzuela es una especialidad del mar, perfecta para celebraciones y ocasiones importantes. En ella se conjugan un sofrito con pescado que, habitualmente, suele ser rape, merluza o una combinación de ambos, y marisco. En algunas elaboraciones también se pueden incluir calamares o sepia, incorporándolos en el momento del sofrito para que les dé tiempo a cocinarse.
Receta Ingredientes:
Añadir variedad al gusto los ingrediente del mar
Tiempo total
1 h
Elaboración 20 m
Cocción 40 m
1Rape fresco mediano
8 Gambones
12 Langostinos Cigalas
300 g Almeja fina
300 g Mejillones
12 Calamar en anillas
1 Cebolleta grande picada
2 Dientes de ajo picados
1 Ñora picada
2 Tomates en conserva natural
1 Laurel
240 ml Vino blanco
100 ml Brandy
Almendras crudas peladas
Perejil fresco lavado
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta negra molida
Sal
Preparación de zarzuela de marisco:
Pon las almejas en remojo. Deja las almejas en remojo con agua y sal durante 1 hora, cambiando el agua un par de veces, para que eliminen los posibles restos de arena. Luego escúrrelas, enjuágalas y vuélvelas a escurrir. Pon las almejas en remojo. Limpia los mejillones, las gambas y las cigalas. Limpia los mejillones, raspando con un cuchillo los restos de suciedad de la concha y eliminando las barbas tirando de ellas con un cuchillo o cortándolas con unas tijeras.
Lava también las gambas y las cigalas. Limpia los mejillones, las gambas y las cigalas Prepara el rape, la merluza y el calamar. Lava el rape, la merluza y el calamar. Sécalos bien con papel de cocina. Corta el rape en rodajas, la merluza en dados y el calamar en anillas. Precalienta el horno a 180o. Prepara el rape, la merluza y el calamar. Prepara una picada.
Lava el perejil. Repela las almendras y las avellanas elimina la pielecilla que las recubre, ponlas en la placa y tuéstalas 10 minutos en el horno. Luego, tritúralas con el perejil. Prepara una picada. Pela la cebolla y los ajos y pícalos bien menudos. Pon una cazuela al fuego con un fondo de aceite y rehoga la cebolla durante 5 minutos. Añade el ajo y la ñora, remueve y agrega los tomates lavados y rallados. Haz el sofrito. Cuece y añade el brandy, el vino y el caldo.
Deja cocer 15 minutos a fuego suave, y entonces vierte 50 mililitros de brandy y 100 mililitros de vino y deja evaporar el alcohol. Agrega también 50 mililitros de caldo, cuece 15 minutos más y sazona. Cuece y añade el brandy, el vino y el caldo. Agrega los pescados y mariscos. Añade a la cazuela los pescados, el calamar, las gambas, las cigalas, los mejillones y las almejas. Espolvorea con la picada de frutos secos y mezcla. Cuece durante 10 minutos y sirve enseguida, bien caliente. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
89- MAR Y MONTAÑA
Suena raro un plato que mezcle pollo con gambas. Pero esta receta, de origen catalán, lo hace a la perfección, mar y montaña. La expresión 'mar y montaña' procede de la catalana mar i muntanya y hace referencia a una categoría de platos que combinan ingredientes cárnicos con productos del mar. Hay varias recetas representativas en Cataluña como el pollastre amb llagosta pollo y langosta, el pollastre amb escamarlans o el arròs mar i muntanya con carne y marisco. Dicen que el mar i muntanya tiene su origen en el Ampurdán, una región de contrastes que limita al norte con la cordillera pirenaica y está bañada, al este, por el Mediterráneo en la espectacular Costa Brava.
Receta Ingredientes:
900 gr de pollo
400 gr de cigalas.
2 tomates
2 cebollas
120 c.c. Brandy
1 rebanada de pan
20 almendras
3 dientes de ajo
1 ramillete de perejil
Aceite de Oliva
Sal
Pimienta
Harina
Caldo de pollo
Cómo preparar Mar y Montaña
En un poco de aceite echamos las almendras, el pan y los ajos, y cuando esté listo, retiramos los ingredientes y salteamos las cigalas o los langostinos. Rebozamos en harina los muslos de pollo y los echamos a la misma sartén y lo doramos para que coja color. En otra sartén con aceite limpio, pochamos la cebolla y cuando empiece a dorar echamos los tomates para crear una salsa.
Añadimos un poco de brandy, lo flambeamos y trituramos todo. Hacemos una picada con los ajos, las almendras y el pan añadiendo un poco de perejil y aceite. Cuando el pollo esté tierno echamos la picada y dejamos que cueza alrededor de 10 minutos. Dejamos reposar antes de servir. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
90- MENESTRA DE VERDURAS
Este delicioso guiso de verduras se sirve como entrada ó como acompañante de otro plato. Hay una versión con jamón que, por supuesto, es divertida, plato con menestra de verduras. Menestra de verduras es, sin duda, una de las recetas más tradicionales de la gastronomía española. No hay una fórmula única para su elaboración. La menestra se prepara de muchas maneras distintas, todo depende de quién la cocine y de las verduras que tenga a mano. Es un plato de temporada que varía según la época del año en que se prepare. Al menos así era en origen, cuando los ciclos naturales de la tierra eran los que dictaban qué alimentos consumir y no existía globalización alguna que pusiera a nuestra disposición todo tipo de alimentos en todo momento.
Receta Ingredientes:
4 alcachofas
Media coliflor
Medio brócoli
1 bote de cardo en conserva
2 zanahorias
1 cebolleta
1 diente de ajo
2 patatas
200 gramos de jamón serrano
1 cucharada de harina
Sal
Aceite de oliva virgen extra
Cómo preparar Menestra de Verduras
Limpiamos y troceamos las verduras en trozos regulares. Pelamos y picamos la cebolla. La rehogamos en el aceite con los ajos laminados y el laurel. Agregamos la harina, damos unas vueltas y ponemos una punta de pimentón opcional.
Sin que llegue a freír, añadimos las verduras. Incorporamos el vino es opcional y los taquitos de jamón y, cuando se consuma el alcohol, cubrimos de agua. Salpimentamos y dejamos que se haga el guiso controlando el nivel de agua para que no se quede seco. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
91- HUEVOS A LA FLAMENCA
Cada quien lo prepara a su manera, pero el principio básico es el mismo: huevos cocinados en una cazuela sin revolver, con vegetales y en algunos casos chorizo y tomate, huevos a la flamenca. Los huevos a la flamenca son uno de los grandes clásicos de la cocina española. A pesar de llevar años preparando este manjar, no los teníamos en nuestro haber. Aunque le ponemos solución rápidamente y os contamos cómo los hacemos nosotros porque si hay algo que caracteriza a esta receta es su versatilidad.
Receta Ingredientes:
3 huevos
Tomate frito casero o de bote
Guisantes frescos
50 gramos de jamón en dado
5 trozos de chorizo de guisar
en lonchas o en dados
Sal
Cómo preparar huevos a la Flamenca
Lavamos los tomates y hacemos un corte en cruz en la base de cada uno de ellos. Calentamos abundante agua en una cacerola y, cuando arranque a hervir, sumergimos en ella los tomates. Escaldamos durante 30 segundos y retiramos a un recipiente con abundante agua helada para cortar la cocción. Pelamos los tomates la piel sale con mucha facilidad y picamos en pequeños trozos. A su vez pelamos y picamos la cebolla y los dientes de ajo. Calentamos un poco de aceite de oliva virgen extra en una sartén y pochamos la cebolla y el ajo a fuego suave durante 6-8 minutos. Cuando la cebolla se vea translúcida agregamos el tomate pelado y picado.
Sazonamos al gusto y cocemos a fuego medio durante unos 10 minutos o hasta que se haya evaporado la mayor parte del líquido. Añadimos el pimentón y el vinagre y damos un último hervor para que se amalgamen bien todos los sabores. Reservamos la salsa de tomate, manteniéndola caliente. Por otro lado troceamos el chorizo y lo rehogamos en una sartén durante un par de minutos. Retiramos y reservamos. En esta misma sartén freiremos los huevos, así que no tiramos el aceite que ha soltado el chorizo. Aportará mucho sabor. Dejamos las patatas y los huevos para el final, cuando estemos listos para servir los huevos a la flamenca.
Pelamos las patatas y las cortamos en dados. Freímos en una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra, a fuego medio, hasta que estén tiernas. Entonces subimos el fuego al máximo y freímos hasta dorar. De esta manera quedarán crujientes por fuera y tiernas por dentro. Añadimos un poco más de aceite a la sartén en la que hemos frito el chorizo y freímos los huevos a fuego fuerte. Emplatamos repartiendo las patatas fritas en la base de unas cazuelas, cubriendo con la salsa de tomate, repartiendo los guisantes, el chorizo y el jamón por encima y rematando con los huevos fritos. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
92- BONITO CON TOMATE
El primo hermano del atún, guisado con salsa de tomate, bonito con tomate. Bonito con tomate. Durante la época de verano, entre los meses de junio y octubre, está en pleno apogeo la temporada de bonito del Norte. Se trata de un pescado muy valorado por la calidad de su carne, texturas y sabores. Existen en nuestra gastronomía multitud de recetas de pescado con las que podemos preparar un buen bonito del Norte. Para ello, además, hay varias maneras: solo con tomate, añadiendo cebolla, también se puede con pimientos y hasta con el toque picantito de la guindilla. La salsa puede quedar tal cual, con trocitos, o, como te la presentamos aquí, la puedes triturar para obtener una textura fina. Eso ya queda a tu elección.
Receta Ingredientes:
600 g de bonito
800 g de tomate natural o en conserva
1 pimiento verde italiano
2 cebollas
3 o 4 dientes de ajo
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Perejil fresco picado opcional
Azúcar
Pimienta negra molida
Sal
Cómo preparar Bonito con Tomate
Corta el bonito a trocitos cuadrados, sazónalos, pásalos por harina, huevo batido y fríelos superficialmente para sellar el rebozado. Reserva. Corta la cebolla, la zanahoria, los pimientos y los ajos en el procesador de alimentos con disco de corte en juliana a velocidad 2. Añade la mezcla en el bol de Chef con varilla flexible, añade un chorro de aceite y sal y programa 8 minutos a 110º y a velocidad 3.
Añade el tomate pelado, despepitado y cortado en dados al bol y programar 20 minutos a 100º y a velocidad 2. Vierte toda la mezcla en la batidora de vaso y programa 2 minutos sin temperatura y a velocidad P. Añade un poco de agua a la salsa si queda demasiado espesa. Vuelve a verter la mezcla en el bol de Chef y programa 100º a velocidad 1 hasta la ebullición. Añade los trozos de bonito y dejar reposar 2 minutos. Controla el punto de sal y azúcar para evitar la acidez. Sírvelo decorado con un poco de perejil. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
93- RABO DE TORO ESTOFADO
Hay muchas recetas para hacer rabo de toro. Entre las más deliciosas está prepararlo estofado, al estilo cordobés, rabo de toro. El Rabo de toro o Cola de toro, como se denomina en algunas zonas, es una receta tradicional de Córdoba que se ha extendido a toda Andalucía. Se trata de un estofado o guiso de carne y verduras. Hay muchas recetas de rabo de toro, tantas como cocinas, esperamos que os guste la que hemos preparado hoy. Se trata de un plato de origen humilde ya que el rabo se consideraba un despojo al igual que la casquería, hoy por el contrario se ha convertido en un plato de lujo, muy codiciado. Es complicado encontrar rabo de toro de verdad, de toro de lidia, lo que normalmente nos venden en las carnicerías como rabo de toro realmente es rabo de ternera o de buey.
Receta Ingredientes:
Tiempo de Cocción.
En olla exprés 1 hora y 15 minutos, la abrimos y dejamos cocer destapada a fuego medio bajo 15 minutos más. En olla rápida 55 minutos, la dejamos reposando hasta que se puede abrir. La abrimos y dejamos cocer destapada a fuego medio bajo 15 minutos más.
1 kg de rabo de toro
1 cebolla
1 puerro
1 zanahoria
4 dientes de ajo
1 copa de coñac / 1 l de vino tinto / 1 l.
de caldo de carne y canela
Puré de patatas
4 patatas Grandes
50 gr de mantequilla / 2 cd de aceite virgen
100 ml de leche / cardamomo
Cómo preparar Rabo de Toro.
Preparamos los ingredientes para hacer el rabo de toro, receta rabo de toro ingredientes. En una cacerola ponemos el rabo de toro con el vino y un poco de romero y lo dejamos macerándose mínimo 4 horas. Pasado este tiempo sacamos la carne y la ponemos a escurrir, colamos el vino y reservamos, receta rabo de toto macerándose en vino. Salpimentamos la carne y la enharinamos En una sartén ponemos aceite de oliva y doramos la carne.
La sacamos y la dejamos sobre papel absorbente para retirar el exceso de grasa En la misma sartén donde hemos dorado la carne, pochamos las verduras, siguiendo este orden: cebolla y puerro, Cuando están un poco transparentes añadimos el pimiento, un rato después el tomate. Cuando están pochadas echamos el ajo, la cucharadita de pimentón y la zanahoria en rodajas para que se ablande un poco. Ponemos el laurel, las guindillas y damos un par de vueltas. receta rabo de toto pochando verduras
En una cacerola grande ponemos el rabo de toro, las verduras pochadas, el vino, el caldo de carne, el chorrito de coñac, la punta de jengibre y lo dejamos cociendo a fuego medio-bajo tres horas. receta rabo de toro olla con verduras y caldos Está listo cuando la carne del rabo de toro se desprende sola del hueso. En ese momento sacamos la carne y pasamos el caldo por el chino, nos queda una salsa espesa de color oscuro, queda la salsa estupenda. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
94- NAVAJAS AL AJILLO
Una de las conchas marinas más deliciosas que existen. Cocinadas con ajo y perejil para mayor felicidad, navajas al ajillo. Las navajas, muergo, lingueirón, aguillolos, o llongueirónas entre otras denominaciones, son moluscos bivalvos. Estos moluscos viven enterrados en la arena y se alimentan de plancton. Se les considera un excelente manjar en numerosos lugares como Asturias, Galicia y también en Andalucía que suele ser aperitivo o tapa habitual en bares y restaurantes de costa e incluso de interior.
Receta Ingredientes:
1 Kg de navajas
1 limón
5 dientes de ajo
Perejil fresco picado
Aceite de oliva
Sal
Cómo preparar Navajas al Ajillo.
Las navajas estaban muy frescas, y la verdad es que traían muy poca arena de la Ría, pero es fundamental quitar bien esa arena que para que no sea molesta y no nos estropee la receta. Este proceso en Galicia se llama «desbabar», lo mejor es hacerlo en agua de mar pero aquí en Madrid no es fácil conseguirla, así que lo haremos en agua con abundante sal. Debemos colocar las navajas en un recipiente redondo tipo botella de plástico o tupper redondeado.
Y las ponemos como si fuesen lápices. Llenamos de agua con sal y dejarlas así durante un par de horas, de esta manera soltarán la arena de una manera más rápida y toda concentrada en el fondo del recipiente. Este consejo queda para la siguiente tanda que prepare en casa, como podéis ver en el programa yo las «desbabé» en un bol grande con abundante agua fría, un buen puñado de sal gruesa y cambiando tres veces el agua. Sacamos las navajas y las escurrimos en papel absorbente o en un trapo de cocina de algodón. Hasta que se retire un poco de agua y reservamos.
Dejamos reposar las navajas en agua con sal para eliminar la arena. Primero, en un recipiente estrecho, ponemos una buena cantidad de agua y un puñado de sal. Metemos las navajas en posición vertical y las dejamos reposar durante un mínimo de 2 horas -mejor una noche completa-. Hecho esto, las abrimos y las ponemos en un colador para eliminar el agua sobrante. Hacemos una vinagreta de ajo y perejil para acompañar a las navajas. Pelamos y picamos los ajos y el perejil, y hacemos un pequeño majado, machacándolos en un mortero. Añadimos a éste un buen chorro de aceite, el jugo del limón, una pizca de sal, y seguimos machacando hasta formar una salsa.
Cocinamos las navajas a la plancha, brevemente y por las dos caras. En una sartén, ponemos un chorrito de aceite y lo calentamos a fuego fuerte. Cuando esté caliente, ponemos las navajas por el lado de la concha y las cocinamos durante alrededor de 1 minuto. Después, les damos la vuelta y dejamos que se cocinen durante, como mucho, otro minuto más. Si se pasan, quedarán como si fueran de goma dura. Finalmente, las colocamos en platos, con la carne hacia arriba. Pintamos el cuerpo de las navajas con la vinagreta de ajo y perejil. Ésta es muy intensa, por lo que no conviene echar demasiada cantidad. Con esta vinagreta conseguirás que este plato tenga un sabor de 10.Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
95- TORRIJAS
Famoso postre que cobra protagonismo en Semana Santa en toda España, torrijas. Son una de las recetas de postres más tradicionales en España, no pueden faltar en tu mesa. Esta es la receta que preparo en casa desde peque, tal y como me la enseñó mi madre. Con tan sólo una variación: el tipo de pan, pues en mi casa este era un postre de reciclaje y se reutilizaba el típico pan gallego de días anteriores. Las torrijas tradicionales en el centro de España se suelen preparar con un tipo de pan especial para torrijas, más esponjoso y grueso de lo habitual. La receta original y más tradicional, del dulce más típico en Semana Santa, un postre humilde que está basado en una rebanada de pan. La cual está empapada en leche, rebozada en huevo, frita en aceite de oliva virgen extra y aromatizada al gusto con almíbar o, en este caso, azúcar y canela y disfrutar, de este delicioso dulce.
Receta Ingredientes:
1barra de pan del día anterior o una barra específica
para torrijas de venta en casi todas las pastelerías.
La de esta receta tenía la escandalera de 55 cm.
1 l y medio de leche entera.
5 huevos medianos.
1 palo de canela-rama, 1 vaina de vainilla, la
cáscara de medio limón
100 ml de vino de Oporto
300 g de azúcar blanca y 1 cucharada de canela molida.
1/2 l de aceite de oliva virgen extra suave
Preparación de Torrijas.
Cortamos el pan en rodajas. Batimos los huevos en un cuenco. Ponemos el pan en leche En un cazo ponemos la leche con la rama de canela, las 4 cucharadas soperas de azúcar y la piel de un limón. Cuando rompa a hervir retiramos del fuego y vertemos sobre el pan; lo dejamos unos minutos para que el pan absorba toda la leche y se empape bien.
Freímos las torrijas. Ponemos una sartén con aceite de oliva virgen en el fuego. Cuando esté caliente pasamos el pan por el huevo y freímos en el aceite hasta que estén doraditas.
Sacamos y ponemos en un plato con papel de cocina para absorber el exceso de aceite. Después, aún calientes, rebozamos en una mezcla de azúcar y canela. Y ya están listas para tomar… hay a quien le gustan recién hechas y a quien le gustan frías cuando el azúcar forma un almíbar. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
96- AJOBLANCO
Deliciosa sopa fría andaluza ideal para los días calurosos. Sus ingredientes principales: ajo y almendras, plato de ajoblanco. El ajoblanco es una sopa fría típica de Andalucía. Es muy fácil de preparar y se hace con ingredientes habituales que puedes encontrar en cualquier supermercado. Está deliciosa y tiene una textura espectacular.Esta receta es ideal para tomar en un caluroso día de verano. Es refrescante y muy saludable, pero ¡no por eso deja de ser muy rica! Realmente tiene muy buen sabor, aunque yo la he adaptado a mis gustos.
Para el verano, está claro que los cocinillas solemos cambiar el horno y las cocciones lentas por preparaciones rápidas, sencillas y fresquitas. Sin duda los protagonistas son las ensaladas, y también las sopas frías, los batidos, los helados y casi cualquier cosa que pueda salir de la nevera directamente. El ajoblanco malagueño es un gran clásico de los meses más calurosos, ya que resulta muy refrescante, y según la cantidad de agua que añadas, puede pasar de ser una sopa fría y cremosa, a un líquido muy refrescante que puedes tomar directamente en vaso. Ajoblanco se suele consumir con uvas, manzana o melón, o acompañado de pan, o también, como hacen en la vega granadina, acompañado de patatas asadas, en cuyo caso se realiza más líquido para poder beberlo.
Receta Ingredientes:
200 g. de almendra cruda
2 dientes de ajo pequeños
150 g. de miga de pan de hogaza duro
1 litro de agua fresca
100 ml de leche de almendras
100 ml. de aceite de oliva virgen extra
30 ml. de vinagre de Jerez
Sal
Cómo preparar Ajoblanco
Coloca todos los ingredientes excepto las manzanas y las uvas en el bol de Chef y programa 10 minutos sin temperatura y a velocidad 5. Introduce la mezcla en el frigorífico durante dos horas. Coloca el disco de juliana fina en el procesador de alimento, introduce la manzana y pulsa P. Obtendrás laminas de manzana. Vierte el ajoblanco ya frío en un bol y añade la manzana a modo de guarnición junto a unas uvas y unas gotas de Aceite. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
97- ALBÓNDIGAS EN SALSA
Un plato que suele conseguirse como tapa en los bares ó como plato principal acompañado de ensalada o patatas, como hacer albóndigas en salsa. Cómo hacer albóndigas en salsa. Las Albóndigas en Salsa. La receta favorita de las comidas familiares de domingo en mi casa, un clásico que nunca falla y siempre gusta. Ya empieza a refrescar y apetece abrigarse un poco. Empezamos a pensar en recetas que nos inspiren la llegada del otoño, los platos calientes, la verdura de temporada, los aromas a laurel y tomillo; el olor a esos platos de cuchara que tanto nos gustan, los guisos, el caldo casero; Además parece que este otoño-invierno vamos a pasar mucho tiempo en casa… Porqué no aprender a hacer estas recetas ricas, fáciles y de toda la vida? Venid que os la enseño!!
Receta Ingredientes:
750 g carne picada de ternera
250 g carne picada de cerdo
3 yemas de huevo
2 cucharadas de sofrito triturado casero
2 cucharadas de pan rallado
1 miga de pan mojada en leche
harina
aceite de oliva
sal
Preparación de la Salsa de Albóndigas
1,5 l caldo de carne
2 cebollas grandes
1 pimiento verde
1 pimiento choricero
1 zanahoria
1/2 puerro
vino blanco
Preparación de Albóndigas
En un cuenco amplio ponemos la carne picada de ternera y la de cerdo y la desmenuzamos si está un poco apelmazada. Picamos la cebolla, el ajo y el perejil muy menudo y lo agregamos. Rallamos la zanahoria y batimos los dos huevos y también los añadimos a la carne. Salpimentamos y echamos dos cucharadas de pan rallado. Mezclamos todo muy bien, tapamos con film transparente y dejamos reposar unas horas en el frigorífico.
Pasado el tiempo de reposo sacamos la carne de la nevera. Calentamos abundante aceite de oliva en una sartén. Formamos bolitas de carne con ayuda de las manos y las pasamos por pan rallado. Freímos todas las albóndigas hasta que se doren y las vamos colocando en un plato sobre papel absorbente. Una vez listas todas las albóndigas las echamos en la salsa que hayamos elegido y dejamos que al menos cueza el conjunto unos 15 ó 20 minutos. Las albóndigas deben servirse bien calientes. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
98- CABRITO AL HORNO
Acompañado de patatas y con una buena botella de vino tino, cabrito al horno. El cabrito al horno es una receta tradicional de la gastronomía española. Una carne que dependiendo de la zona geográfica se llama también chivo o choto. Se trata de una carne muy tierna, jugosa y sabrosa, muy apreciada entre los consumidores por lo que suele prepararse en ocasiones especiales como puede ser en Navidad. La forma más fácil de preparar el cabrito es al horno como os proponemos en esta ocasión. Es una receta muy fácil, ya que sólo vamos a preparar los ingredientes y el horno será quien haga todo el trabajo. Vamos a cocinar en el horno el cabrito junto con unas patatas y cebolla que nos servirán de guarnición.
Receta tiempo Ingredientes:
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de cocinado: 1 hora y 30 minutos
Tiempo total: 1 hora y 45 minutos
Receta prevista
Cabrito medio o 2 paletillas y 2 piernas
Ajo 4 dientes
Cebolla 3 unidades
Laurel 3 hojas
Pimienta negra y blanca
negra, blanca, rosa y verde
Ron 1un vaso mediano
Agua 1un vaso mediano
Sal
Cómo preparar Cabrito al Horno
Limpiamos bien las piernas de cabrito de posibles restos de grasa. Sazonamos las piernas de cabrito y las colocamos encima de una cazuela de barro apta para el horno. Cubrimos la bandeja con un poco de agua. Vertemos un hilo de aceite por encima de las piernas de cabrito e introducimos en la parte central del horno. Que tendremos precalentado a 180º.Dejamos hacer durante 30 minutos y damos la vuelta a las piernas.
En un mortero machacamos los ajos, vertemos un poco de vinagre, una cucharada, más o menos, y medio vaso de agua. Mezclamos y vertemos sobre las piernas de cabrito. Asamos durante 45 minutos, damos de nuevo la vuelta y con la ayuda de una cuchara vertemos los jugos del asado las piernas de cabrito.
Esparcimos por encima unas hojas de romero y dejamos hacer el asado otros 15 minutos más. Comprobamos que están asadas las piernas de cabrito, pinchando con una aguja grande o una brocheta de madera. Si al pinchar la carne pone resistencia, asamos otros diez minutos más. Si la aguja entra con facilidad, es la señal de que ya podemos, poner a la mesa y disfrutar, de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
99- TORTILLA DE BACALAO
Dentro de la comida típica española las tortillas tienen un lugar importante. En este caso, con bacalao pues es el plato perfecto para acompañar un buen vaso de sidra, tortilla de bacalao casera. La receta de tortilla de bacalao estilo de las sidrerías de Euskadi, una riquísima tortilla de bacalao auténtica y tradicional ideal para preparar una cena o como tapa, muy consumida en Semana Santa. Esta tortilla de bacalao fácil y rápida es un plato que se puede variar dándole un toque de picante poniendo una guindilla si os gusta. El secreto de esta tortilla es que hay que dejarla muy jugosa, aunque el punto será el que nos guste.
Receta Ingredientes:
400 g. de bacalao ya desalado
4 huevos XL o 6 huevos medianos
1 pimiento verde
1 cebolla o una cebolleta
Un poco de perejil fresco
Un poco de aceite de oliva virgen extra para
saltear los ingredientes
Sal y pimienta negra recién molida al gusto
Preparación de Tortilla de Bacalao
Pelamos las cebolletas y las cortamos en juliana fina. En una sartén con aceite de oliva virgen extra la pochamos a fuego muy suave, que quede muy suave, hasta que comience a dorarse. Incorporamos las migas de bacalao, aunque son migas, a veces te encuentras con trozos más grandes que otros por lo que a mí me gusta cortarlos todos con unas tijeras un poco más.
Mezclamos unos cinco minutos. Batimos los huevos y añadimos a la sartén, removemos todo un poco. Bajamos el fuego y dejamos que cuaje, ponemos un plato sobre la sartén. Le damos la vuelta y volvemos a poner en la sartén para que se termine de cuajar por el otro lado después, asentada y jugosa, esta lista para. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
100- BUTIFARRA CON ALUBIAS BLANCAS
El famoso chorizo catalán acompañado de alubias. Un plato lleno de sabor y calorías. Tenemos que nombrar cuál es el plato más representativo de la cocina casera catalana sería sin duda la butifarra con alubias, o botifarra amb mongetes como se dice en catalán. De origen relativamente reciente, pues se estima que comenzó a adquirir popularidad por el boca a boca en el siglo XIX en las fondas de comida que la servían en la capital. Alubias con butifarra, un plato típico de la región de Cataluña. Es un plato muy sencillo, pero lo que hace bueno este plato es la calidad de sus ingredientes.
Unas buenas alubias cocidas en su punto, como las del ganxet que es una alubia muy fina y suave y que se utiliza para este plato, pero podemos usar otro tipo. También la butifarra es importante, que sea fresca, la podemos hacer en la sartén, pero si la hacéis a la brasa queda mucho más buena. Vale la pena probar este plato es muy completo y está riquísimo. Para preparar estas alubias blancas con butifarra te vamos a contar todo el proceso. Esto quiere decir que vamos a empezar con la cocción de las alubias. No obstante, nada te impide saltarte ese paso y utilizar alubias ya cocidas de bote. En ese caso harás una versión mucho más rápida de la receta. A ti te toca escoger la opción que más te conviene. La parte que te recomendamos respetar es rehogar las alubias en la misma sartén en la que hagas las butifarras para recoger los sabores que dejan estas últimas.
Receta Ingredientes:
2 butifarras crudas tradicionales.
300 g de mongetes o judías blancas.
A nosotros nos pirran la variedad del “Ganxet”.
Ajo.
Perejil.
Pimentón dulce
“All i oli” .
Aceite de oliva.
Sal.
Preparación de Butifarra con Alubias Blancas.
Lavaremos las judías blancas y la pondremos en una cazuela con agua fría y sin sal. Cuando arranque a hervir, las dejaremos unos minutos y seguidamente las escurriremos. Pondremos de nuevo las judías en una cacerola, junto con la zanahoria, partida por la mitad, la cebolla y las hierbas aromáticas, laurel, tomillo, perejil. Llenaremos la cacerola con agua fría, la taparemos y dejaremos cocer, a fuego suave, de 1 a 2 horas, dependiendo de la calidad de las judías.
Salpimentaremos a media cocción. En una sartén grande con manteca de cerdo o con aceite de oliva, freiremos la butifarra o butifarras, previamente mojada y pinchada con una aguja, para que no reviente, a fuego medio. Una vez frita, la retiraremos de la sartén reservándola en caliente. En la misma sartén y con la grasa existente, rehogaremos las judías, previamente escurridas. Las colocaremos sobre una fuente, acompañadas de la butifarra cortada en 4 trozos o si las hemos puesto individuales, mejor. Servir recién hechas adornadas con un poco de perejil, después de terminado, preparar para servir, y degustar este plato tan exquisito de butifarra con alubias blancas. Disfrutando de este delicioso, plato de Gourmet buen provecho.
Cocina Tradicional Española Gastronomía y Recetas
Cocina Tradicional Española Gastronomía y Recetas
ResponderEliminarEn consecuencia a la sucesión de culturas que han habitado la Península Ibérica, contamos con una inmensa variedad en lo que respecta a: la música, arte, idioma y como no podía ser menos, la gastronomía.
La situación geográfica de España, ha hecho que determinados productos sean principales en nuestras comidas, por la gran variedad que se nos ofrece. Uno de estos casos es el pescado, al ser una península y por lo tanto estar rodeado casi completamente por agua, este alimento, se ha podido consumir mediante la pesca desde tiempos muy lejanos. Gracias a la gran extensión de valles y caudalosos ríos que filtran el agua con el objetivo de sustentar el regadío, podemos contar con multiplicidad de verduras y fruta fresca en cada temporada. O los reconocidos jamones españoles, que se curan en las montañas de la Península.
Desde el asentamiento de colonizaciones fenicias, griegas o cartagineses hasta nuestros tiempos, la gastronomía española ha evolucionado constantemente con el paso de los siglos.